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Cuando Joshua entró al consultorio no pudo fingir como siempre. Su rostro abatido se anteponía a cualquier otra emoción que quisiera demostrar.

Seokmin lo miró recostado desde su camilla. Una sonrisa en su rostro lo esperaba, como todos los días. Dejó el libro que sostenía sobre sus piernas.

- ¿Está todo bien?

Joshua le sonrió y caminó hasta él. Se sentó en un banquito y luego suspiró.

- Yo debería preguntar eso.

- No hay novedades conmigo. Tu vida parece mucho más interesante que la mía.

Joshua se rió y Seokmin también. Al menos le había sacado una sonrisa.

- A veces quisiera que no sucediera nada - confesó - Al menos así no tendría razones para sentirme triste.

- Pero tampoco serías feliz.

Joshua esperaba ese comentario.

- Para ser feliz hay que ser triste también. De otra forma no podrías disfrutarlo.

- ¡Ya deja de sermonearme! - Joshua sacudió el cabello de Seokmin de forma juguetona.

Ambos volvieron a reír.

- Eres afortunado, doctor Hong.

Seokmin miraba sus manos. Eran delgadas y pálidas. No había rastro alguno de salud en todo su cuerpo. Era como si cada célula fuera apagándose poco a poco. Las agujas clavadas en el dorso de su mano. Las mangueras de oxígeno conectadas a su nariz. Todo en él indicaba enfermedad.

- La verdad es que mi enfermedad no me hace sentir triste o desdichado, porque sé que en algún lugar del mundo hay muchas personas pasándola peor que yo. Algunos más con cáncer en los pulmones que no tienen la oportunidad de dormir en una cama tan costosa como la que uso en este momento - Joshua lo miró en el momento en el que su voz se quebró - Algunos más muriendo de asfixia por no tener este costoso tanque de oxígeno a su lado y... -

- Ya basta, Seok.

Joshua tomó su mano y lo miró con los ojos casi molestos.

- Es cierto. Hay muchas más personas afuera que no tienen tanta "suerte" como tú. Pero no puedes culparte por ellos - apretó aún más sus manos haciendo que lo mirara - Lo mejor que puedes hacer es recuperarte, salir y ayudar a otros, contar tu experiencia de vida y hacer lo que quieras.

Seokmin volvió a bajar la mirada y sonrió triste.

- No sé si ese día llegue.

- Seokmin.

- Y si te soy honesto... Tengo miedo.

- Está bien, Seok - lo consoló - Está bien tener miedo. Es normal. Y no es necesario salir de aquí para comenzar a hacer lo que quieras.

- ¿Ah, no?

- ¡No! - gritó emocionado - ¡Dime si hay algo que quieras, lo haré si es posible!

- ¿Lo que sea?

Joshua asintió con la cabeza.

- ¿Y si eso fuera...? ¿Un beso?

Joshua no dijo nada.

⏳⏳⏳

- ¡No puedo creerlo!

Wonwoo lo miró desde la camilla. Tenía esa aguja pasándole una medicación desconocida por intravenosa así que a juzgar por el tamaño de la bolsa estaría ahí un buen rato. Escuchando las quejas de Jeonghan mientras caminaba de un lado a otro en el cuarto de hospital. Al principio era divertido pero después de un rato comenzó a aburrirse. Diciendo que Seungcheol era un hombre bueno, y luego que era una terrible persona. Lo odiaba y luego lo dudaba.

US AGAIN (WONHAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora