Una esperanza

642 69 5
                                    

-KELDEO!-

grite con todas las fuerzas posibles sin embargo... era una idiota ¿por que pensaba que un pokemon legendario iba a rescatarme?

Pude escuchar la carcajada de Ghechis mientras decia algo que casi no podía entender pero, estaba completamente claro, se estaba burlando de mi.

Kyo... Lamento dejarte solo.

Un grito a lo lejos y después de eso una ráfaga de luz, no entendía lo que pasaba pero al abrir los ojos todo era una completa confusión. Máquinas dañadas, la pared de la propia base partida en dos, y además de eso, Confagrigus tirado en el piso, debilitado de un solo golpe.

Había humo alrededor y muchos cables rotos, era demasiado peligroso caminar por allí.

"¿Estas bien?"
Me gire para encontrarme con una especie de unicornio pequeño... Nunca lo había visto pero me parecía algo conocido.

-Eres...-

"Lo lamento, soy Keldeo" me quede atónita, ¿acaso había acudido en mi ayuda?

-Emmm... Gracias por salvarme- musité, sin embargo el Pokemon soltó un resoplido.

"No fui yo, acabo de llegar" lo mire bien y pude ver la innumerables heridas que tenía, rápidamente cogi mi maleta y saque una súper poción para curar sus heridas.

"Gracias"

-No hay de que, pero si no fuiste tu ¿quién hizo esto?- era raro pensar que un Pokemon normal podía hacer semejante daño a una base hecha de metal.

"No lo se... A menos de que" se quedo en silencio y le seguí la mirada, a lo lejos vi a Confagrigus sin embargo una especie de oscuridad lo rodeaba y lo levantaba del suelo, aunque el verdadero problema era el creador de esa sombra.

Un niño de unos 7 años de edad, de pelo rubio pero de ojos oscuros e intimidantes.

En un dos por tres Keldeo se colocó enfrente mío como si tratara de protegerme, ese niño de alguna manera parecía peligroso.

-¿Estas bien?- su voz era algo distante, aún así la pregunta era para mi dejándome algo confusa.

Asentí en silencio y él pareció aliviado.

-Afortunadamente no te hizo daño- se dio la vuelta y miro a Confagrigus.

-¿Como lo hiciste?- musité con curiosidad, él se me quedo mirando en silencio y luego, sin mover un músculo, una onda de energía salió de la nada destruyendo una gran parte del techo.

Sin mas se me acerco a mi... Sonriendo, a pesar de sus ojos, esa sonrisa era... Honesta pero, algo le paso y empezó a agarrarse la cabeza con unos gruñidos de dolor.

-¿¡Qué sucede!?-

-Nada- Tartamudeó, sin embargo su sufrimiento era notable, trate de acercarme pero Keldeo me lo prohibió.

"No sabemos que trama"

-No me importa- me paré de golpe y corrí hacia él -Tranquilo, todo estará bien- levantó su mirada y en unos segundos se abalanzó hacia mi.

"Señorita!" Keldeo grito a mis espaldas con preocupación, sin embargo yo sólo sonreí.

-No te preocupes Keldeo, no pasa nada- el chico me estaba abrazando.

Si fuera una persona normal entraría en shock o confusión pero, solamente sentí algo muy familiar, como una preocupación y comprensión que había sentido en algún momento.

-Por...favor...-
-¿eh?- me miro con sus sombríos ojos.
-Por...favor...no mueras- se alejó de un salto y una sombra lo rodeo, logrando que desapareciera en el acto.

Narra ???

Me levanté con rapidez, exaltado, lo había sentido, esa energía que tanto odiaba... Solté un gruñido, se suponía que Ghechis se encargaría de esa persona antes de que soltara su poder...

"Señor" me gire para encontrarme con la mirada de mi fiel Pokemon.

-Tu también lo sentiste ¿verdad?- asintió pero luego su mirada se volvió sombría, no es que me importara mucho, él sabía lo enojado que me encontraba, después de todo, había fallado en la misión que nos llevaría al éxito.

-No te elogiare- le dije - pero al menos me quitaste un peso de encima cuando te encargaste de "ella"-
"Señor... Lo lamento, no sabia que tenía sucesores"

-Nadie lo sabia, se lo tenían muy guardado, además necesitamos encargarnos de alguien mas- me quede en silencio durante un rato, si yo mismo me hubiera encargado de esa misión nada de esto hubiera pasado. Pero, ese era solo el pasado, ahora lo único que importaba era deshacerse de esas pequeñas molestias llamadas sucesores.

"El chico... Esta cerca de su posición" lo mire con desconfianza ese chico era fuerte a pesar de ser un simple niño de unos 7 años de edad, incluso yo le tenía cierto pavor.

-Así será mucho más rápido- susurre.

"Así es... Sin embargo hay un problema" El Pokémon titubeó por unos segundos.

-Cual?-

"Sus poderes... Llegaron a la segunda fase"

-imposible... Apenas los sentí-

"Esa chica se convirtió en un completo despertar"

-...- una sombra paso por nuestro lado y la figura de un niño fue presente.

-Así que llegaste- Intenté disimular mi disgusto, de alguna manera tenía que saber lo que había visto.

-Si...- tenía una mirada de dolor.

-¿Te encargaste de ella?- se quedo en silencio durante un rato y pude notar como su dolor aumentaba.

-No, ni siquiera me encontré con ella- solté un resoplido y lo obligue a retirarse.

"Estaba mintiendo"

-Lo se, sin embargo era obvio-
Me aleje un poco, directo a mi propia oficina, sentándome en la silla para tomar un pequeño descanso.

Mi Pokemon se acercó a mi lado, con aire de confusión. Sonreí era obvio que no entendía nada.

-Ese chico jamás lastimaría a nuestra enemiga-

"¿Porque esta tan seguro?" Solté una risita de desilusión.

-Porque él no se atrevería a tocar a alguien de su familia-

Fin de su narración

Ese chico, estaba sufriendo... Pero no sabia el porque, aún así ya no había nada que hacer.

"Señorita"
-Gracias Keldeo, pero tengo que encargarme de unas cosas-

Asintió y se alejó saltando por las aberturas que había en el techo. Solté un resoplido y mire alrededor, buscando la puerta.

"H..huh?" Escuché unos susurros a lo lejos y corrí hacia ellos para encontrarme con una sala un tanto diferente a la anterior; Los aparatos estaban completamente dañados pero habían demasiadas pantallas y algunas seguían funcionando.

-¿Que es esto?- trate de entender lo que fuera que estuviera en una de esas pantallas pero era imposible.

"Annie?" Un escalofrío me recorrió la espalda, esa voz era parecida a la de mi compañera pero al mismo tiempo era diferente.

Me gire para encontrarme con una silueta entre el humo, emocionada corrí hacia Pikachu, que se acercaba con lentitud, en ese momento solo pensaba en pedirle disculpas y decirle que lo sentía.

Sin embargo cuando el humo se dispersó, mi mente quedo en blanco y pare en seco.

Esa no era pikachu.

-(owo)7
Niko reportándose! Las evaluaciones finales se terminaron \(*~*)/ paryhard en mi casa okno :V gracias a eso tengo un mas tiempo libre (pero no mucho) así que tratare de publicar mas seguido, gracias por seguir leyendo y espero que les esté gustando la historia.
Muchísimas gracias.
~Niko

Un linaje Pokemon [Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora