𝐘𝐎𝐔 | 𝐏𝐚𝐛𝐥𝐨 𝐆𝐚𝐯𝐢.

Pablo's Pov V

"Lo haré por ti, mi amor"
8 de noviembre de 2021

Había pasado ya una semana desde mi beso con Ele. Ninguno de los dos hablamos al respecto de ello, creo que ambos sabíamos lo que queríamos y lo que podíamos.  Nos habíamos dado un par de besos, pero nada más.

Sabía que si intentaba algo serio con ella, estaría en el punto de mira de todo el mundo. Sobretodo de la prensa, que últimamente se dedicaba a tenerme como único tema de conversación por mi supuesto "juego sucio" y que soy un inmadura y muchísimas cosas más que realmente, me preocupaban. Solo era un chaval que recién empezaba y no sabía si era bueno o malo que pensasen tanto tan pronto.

Mi cabeza volvió al tema de Elena. Yo la quería de todas las formas, pero era verdad. Ahora mismo no podía estar con ella, y me dolía, y no sabía si ella era consciente. Desde los últimos meses hay una infinidad de rumores sobre yo y Elena, sobretodo por mi discurso al ganar el Golden Boy, donde claramente la nombraba.
Y una infinidad se le habían venido encima a Elena.

Pero por ahora no pensaría en esa, estaba bien con ella, creo.

Decidí ir a su casa sin ningún previo aviso.

Toqué el timbre que, para mi sorpresa, abrió Elena. Se encontraba con un pantalón de pijama gris y una sudadera azul, con un moño mal hecho y sus gafas. Se veía muy mona.

— Buenos días canaria. - Dije mientras no me movía del margen de la puerta, esperando a que ella me diese el permiso para entrar.

— Podrías avisar ¿No? Me podría haber arreglado un poco y todo eso... - Dijo mientras se echaba a un lado para dejarme pasar.

— Estás preciosa con lo que te pongas, cielo. - Mis palabras hicieron que la canaria se pusiese totalmente sonrojada. Me acerqué un poco a ella provocando que Elena se echase para atrás. — Me gustas mucho cuando te pones nerviosa por todo.

— Calla, anda. - Me dijo mientras me miraba a los ojos — Hoy tengo partido de volley, por la tarde. - Soltó Elena.

— Pues voy a ir. Anda déjame entrar a tu habitación que me quiero tumbar. - Fui a su habitación a hacer dicho gesto. La cama se encontraba desecha, así que supuse que recién se había levantado.

— Perdona que tenga la habitación así. - Expresó con una mirada un poco avergonzada, acompañada de una risita.

Elena se subió a la cama conmigo y se dejó caer levemente. Ella acariciaba mi pelo un poco mojado ya que me había duchado antes de venir.

Dejé un beso suave en su frente y la acorralé entre mis brazos.

[...]

Ya era casi la hora del partido de Elena. Habíamos acabado de comer, y ambos nos fuimos solos a la habitación.
Yo me senté en el borde de su cama mientras ella se vestía.

— Date la vuelta, cochino. - Dijo Elena en forma de burla y yo obviamente me giré. — Es broma, no hace falta que te gires, total, ya me has visto desnu...

— Calla. Me giro igual. - Dije con una amplia sonrisa.

No me sentía seguro de si ella estaba bien conmigo mirándola, aunque si era verdad que ya la había visto sin ropa fue hace mucho tiempo, y yo no quiero incomodarla.