Capitulo 4.

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Llegamos hasta la propiedad, el jardín es grandioso, tanto Catherine como yo miramos todo con asombro. Aunque ella no ha sido pobre como yo. En la villa no se veían estás casas y fiestas tan ostentosas. Debo controlar mis nervios no quiero quedar mal ante la sociedad, si bien su aprobación es algo que me da igual, no puedo permitirme el lujo de perder los negocios, tengo muchos planes y todos y cada uno de ellos pasan por tener capital.

Al llegar al lugar indicado, el cochero me ayuda a bajar, para después hacerlo también con Catherine, avanzamos hacia el interior de la casa, el caballero de la entrada nos ha dicho que la fiesta se realiza en el gran salón de baile. Al entrar al salón  puedo ver como algunos hombres se giran para vernos, siento ganas de agachar la cabeza por la vergüenza, mi amiga agarra mi brazo y me arrastra hasta la mesa de los aperitivos.

— Ellen creo que nunca había visto tanta comida junta—

— Catherine menos mal que eres tú la que sabes de modales y decoro— digo sonriendo.

— Que voy a decir si todo tiene tan buena pinta—

— Disculpen señoritas, me dejan sus nombres, solo será un momento—

Miro a Catherine confundida, estoy a punto de decirle que estoy invitada a la fiesta, tengo la carta en el bolsito.

— Es para el carne de baile, veo que son nuevas en Londres—

— Catherine Tompsom— responde mi amiga.

— Ellen de Corvens—

— Usted es la nueva duquesa? Siento mucho la perdida de su padre—

Yo asiento con la cabeza, la verdad es que yo solo se que ese hombre se encapricho de mi madre, no quiero seguir pensando en el, la verdad.

— Cuál de ustedes bellas damas me concedería el próximo baile?—

— Y usted es, caballero?—

— Lord Andrews, para servirle—

— Ellen de Corvens, si mi acompañante lo estima puede concederle el próximo baile, yo estoy algo cansada ahora—

Catherine me mira en busca de aprobación, yo le sonrió y veo como el Lord apunta en su cartoncillo.

Unos minutos después veo como baila radiante con ese Lord.

— La veo muy sola y su carné está en blanco, no entiendo porque una dama tan bella no tiene pretendientes— dice un caballero a mi lado.

— Contrario a lo que usted piensa no me exhibo como mercancía, no deseo buscar esposo ya que yo misma me sobró y me basto y ahora sí me disculpa voy a tomar un poco de aire fresco—

Me alejo un poco de él y me asomo por el balcón, observó que hay gente cerca y que no estoy realmente sola, esa es una de las reglas que Catherine me enseñó "no puedes estar sola en un lugar apartado y menos si te acompaña un caballero"

En otro lugar de la sala...

— Hijo aún no has invitado a bailar a ninguna dama, como anfitrión debes de sacar a bailar al menos a una dama y solo te pido una—

— Madre ninguna de estas mujeres son de mi interés, todas son iguales, no tienen conversación y sus intenciones...—

— Sabes que tarde o temprano tendrás que elegir a una, el condado necesita de un heredero—

— Madre quien esa dama? —

— Es la nueva duquesa de Corvens— es bonita verdad, una pena que sea una hija bastarda aún así su fortuna es mayor que la nuestra.

Eso me hace pensar, no voy a negar que la dama es bonita, pero no es eso lo que me ha llamado la atención sobre su persona, es la primera mujer que me ha rechazado y no he sido el único por lo que veo.

— Lord Midellton no le visto en toda la velada, si soy sincera esperaba que me invitará a bailar— dice la petulante de Amelie.

— No es apropiado para una dama ofrecerse a un caballero, sabe que yo no bailo pero quizás si se lo pide al Baron Davis el estará encantado, ya lleva dos bailes con la señorita morena—

— Usted es un impresentable, señor... No tiene modales—

— Lo que usted diga mi Lady, ahora sí me disculpa tengo cosas mejores que hacer—

Me acerco hasta el balcón y veo que la dama está ahí, distraída mirando al horizonte.

— Sabe que no es decoroso estar aquí sola—

Ella se voltea sobresaltada y me lanza una mirada de enojo.

— Es usted el que no tiene decoro yo estaba aquí antes, por lo que no veo nada inapropiado en mi actitud—

— Creo que no me he presentado correctamente, Lord Midellton conde de Sunset—

— Ellen de Corvens, Duquesa si lo prefiere— dice tendiendo su mano enguantada.

Cojo su mano y dejo un beso sobre ella, ella la aparta avergonzada y la esconde tras su espalda.

— Ellen, Ellen te estaba buscando ven vamos a tomar un refrigerio—

— Si nos disculpa— dice y se marcha junto a la otra dama.

Me retiro al lado de los caballeros, todos hablan de la nueva Duquesa, de su belleza y de su fortuna. Creo que no le van a faltar pretendientes a la señorita, su fortuna es muy jugosa. Por lo que dicen es un buen partido.

****

Querida prima, cuánto tiempo sin verte— dice Jane sonriendo.

— Perdone creo que se equivoca de familiar—

— Pero que dices Ellen—

— Recuerdas...  Tu y yo no somos familia...—

Pero eso era ante de que...—

— No sigas Jane, tu misma me apartartaste de tu vida, ahora sí me disculpas es hora de regresar a mi casa—

Escucho como gruñe, pero no me quedo a su lado, salgo hasta la puerta y espero la llegada de Catherine.

— Sabes que su esposo le pegó tremendo regaño a tu prima, creo que van detrás de tu dinero— dice Catherine preocupada.

— Ya lo imaginaba, no te preocupes mañana hablare con el administrador y haré correr un rumor...—

— Das miedo de verdad, cuando dices esas cosas—

— Qué tal con el Lord?—

— Ha sido un sueño Ellen, tres piezas y una buena conversación. Ha dicho que si se lo permites empezará a cortejarme—

— Bueno, antes investigare un poco sobre sus intenciones y si de verdad sus intenciones son serias y no te quiere solo por mi dinero te daré una buena dote—

— Sabes que no es necesario verdad, yo tengo una pequeña dote ya—

— Lo se querida, pero quiero que seas feliz.—

— Y tú Ellen porque no bailaste con nadie, ví a varios hombres acercarse hasta ti, y a uno de ellos lo ví hasta en dos ocasiones—

— Solo buscan mi dinero, no me interesa un marido que solo quiere quitarme mis cosas—

Me quedo pensando en aquel caballero, que ser tan cansino y petulante. Pero esos ojos y el beso en mi mano hacen mi cuerpo estremecerse.

Dueña de mi DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora