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🖤💜Hermanos💚💛

Taehyung se encontraba entre los brazos de su alfa en la casa de los Min, ambos habían decidido tomarse el día libre para estar juntos y ver una película o una serie acurrucados en sillón de la sala.

La señora Min había llegado hace unos minutos pero se había encerrado en el despacho para hablar por teléfono con uno de los managers de sus modelos, así que solo había saludado y desapareció por los pasillos de la mansión.

Con el teléfono del omega sonando, ambos se separaron con pesar al ver que al no responder la primer llamada una segunda entro para luego una tercera, con un puchero en sus labios Taehyung se inclino y tomo su teléfono y observo la pantalla y el nombre de su mejor amigo brillo en ella, tenia dos días que no veía a Jimin, el primero por que se había ido con Yoongi a una agencia y el día anterior porque no se presento en la agencia por que tenia una reunión personal con Namjoon, su manager.

- Es Jimin - dijo levantándose y alejándose un poco de la sala

Jungkook se quedo en la sala observando a la distancia a su omega quien hablaba con su mejor amigo, pero él tenia un mal presentimiento desde el día anterior, no era normal que su hermano faltara al trabajo, mucho menos que no respondiera sus llamadas.

Era verdad, Yoongi siempre se alejaba cuando tenia un mal rato, pero horas después aparecía y le contaba todo, nada que Jungkook no presintiera ya, al ser mellizos compartían un fuerte lazo que les hacia saber cuando uno de ellos la estaba pasando mal, y era por ello que llamaba a su hermano con insistencia, pero sus sospechas fueron ciertas al contemplar a su hermano entrar por la puerta con un semblante de mierda.

- Te necesito hermano - pronuncio el alfa mayor por solo unos minutos antes de soltarse a llorar en los brazos de su hermano

Jungkook se quedo en shock al ver tan mal a su hermano, luego vio como su omega volvía a la sala con cara de querer matar a alguien, y ese alguien era el alfa que tenia entre sus brazos llorando como un bebé que pierde su juguete favorito.

- Jimin llamo y me pidió vernos, así que no creo volver hoy - Taehyung se oía molesto

- ¿Él esta buen? - se escucho la voz de Yoongi como un susurro

- ¿Qué si esta bien?, ¿Debería de estar mal? - pregunto con una sonrisa irritada

El silencio reino en la sala por unos segundos, y justo cuando Taehyung estaba dispuesto a salir de la casa, la señora Min apareció con su teléfono en mano y con cara de póker, demostrando lo molesta que estaba.

- Jimin me llamo ayer pidiéndome que lo cambiara de agencia, una lo mas lejos de Seúl, ¿Alguien quiere decirme por que? - pregunto pero lo único que recibió fue el silencio ensordecedor - acabo de terminar con una llamada, era Namjoon pidiendo lo mismo y como me negué dijo que estaban dispuestos a ir a juicio por incumplimiento de contrato -

Yoongi se alejo de su hermano y se dio media vuelta para ver a su progenitora a la cara, hizo un puchero al no poder decir nada, el nudo en su garganta se lo impedía y se sentía frustrado, jamás se imagino que su lobo le daría la espalda por rechazar a su omega destinado, a su Mate.

- Que hiciste Min Yoongi - su madre negó con la cabeza y suspiro rendida - creo que tendré que enviar lejos a uno de mis mejores modelos si no quiero perderlo - dio media vuelta y volvió a entrar al despacho

- Nos vemos mañana amor, mi bebé me necesita - se despidió de su alfa y observó a su cuñado con una mirada asesina - espero que todo esto te sirva por cabezota, pero Jimin es muy obstinado y no volverá a caer dos veces ante ti, te costará mucho y yo no estoy dispuesto a ayudarte en nada - advirtió antes de salir de la casa

Jungkook no dijo nada, solo le indico con un movimiento de manos a su hermano que fueran a la habitación del alfa mayor.

Yoongi siguió a su hermano en silencio, entraron a la habitación donde solían pasar sus momentos difíciles y cerraron la puerta con seguro.

La habitación era oscura, la única ventana que estaba era cubierta con una enorme cortina negra, había una cama enorme, un sillón junto a un piano y una guitarra.

Jungkook solía tocar la guitarra cuando estaba triste o dolido, y Yoongi tocaba el piano cuando sentía que ya no podía más con todo, la habitación era a prueba de ruido, pero eso no impedía que los de afuera no escucharan el sonido de la guitarra o el piano

- ¿Quieres contarme que paso? - preguntó con cautela, su voz era baja, no quería torturar más a su hermano

- Soy un idiota, eso pasa - se dejó caer en el sillón y suspiro

- Dime algo que no sepa Yoongi, lo que yo quiero saber dónde estuviste ayer, no respondiste mis llamadas, Jimin tampoco fue a la agencia y ahora resulta que de la nada tu estás así y el se va -

- Se va por qué yo se lo pedí, le dije que no lo quería en mi vida ni en la agencia - y volverlo a decir el voz alta hizo que su lobo le gruñera

El pulgoso era lo único que hacía desde que el Omega se alejo de él, o mejor dicho, desde que el lo corrió de su vida.

- Muy bien - el alfa menor se sentó a su lado - ahora quiero saber que fue lo que te llevo a tomar esa estúpida decisión -

- Yo........ Tuve sexo con Jimin y luego le pedí que se fuera - mordió su labio inferior para no soltar un sollozo que estaba reteniendo - y ahora mi lobo no me habla, no sé que mierda hacer -

- Si sabes que esa fue su primera vez, ¿Cierto? - Yoongi asintió y sorbio su nariz - ¿Y que piensas de eso? - preguntó sabiendo la respuesta - ¿Lo marcaste? - preguntó cuando callo en cuenta de eso

- No, no soy estúpido como tú, yo si pude contener a mi lobo de marcarlo - pronunció y su lobo le volvió a gruñir molesto y escucho un "idiota"

- No, tienes razón, no eres idiota como yo, porque tú lo eres mucho más - dijo con molestia - te amo, eres mi hermano y todo lo que te pase me preocupa, pero has lastimado al lobo de tu Omega -

Yoongi guardo silencio, su lobo ya se lo había reprochado mil veces el día anterior, a tal punto que lo ignoro y para pagarle con la misma moneda, el pulgoso ahora ignoraba al humano y le gruñía cada vez que podía.

- Pero dime, ¿Qué piensas del sexo con Jimin? -

- No te puedo mentir, es el mejor sexo de mi puta vida kookie, sabes que todos se quejaban al ver mi gran cosa - señaló su entrepierna - siempre se quejaban al principio, luego gozaban y luego terminaban quejándose de dolor, pero él no, desde un principio todo fue maravilloso - expreso con una mueca

- Eso es porque Jimin está hecho para ti, para encajar como un rompecabezas en cada parte de ti, tus manos en su cintura, tus labios en los de él, tu.... Cosa allí en.... Aish tu me entiendes -

El pálido alfa observó sus manos y un recuerdo vino a su mente, uno morboso de su pene entrando en ese apretado agujero de su Omega, sus manos encajaban a la perfección en esa estrecha cintura, sus labios y lenguas reconociéndose.

Mierda, se estaba poniendo duro de solo recordar.

Se levantó del sillón y se sentó en el banquillo del piano y comenzó a tocar, una nueva melodía salía de su cabeza, una melodía que le recordaba a él, sin darse cuenta estaba componiendo una melodía para su Omega, su Mate, uno que no podría tener por estúpido y cabeza hueca, por no hacerle caso a su lobo y seguir su destino, ahora lo estaba perdiendo todo.

LOS OMEGAS no SON LINDOS [YM & KV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora