Capítulo 13

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Fort llego a la empresa donde ya estaba esperando a su padre y suegro.

Sin necesidad de presentarse entro directamente a la oficina de presidencia.

Fort: Buenas tardes señor Zee, padre, procedamos a la firma de los documentos ahora.

Mile: Tranquilo Fort todo a su debido tiempo, Zee y yo hablamos y queremos asegurar que nos den un heredero, así que la firma no se llevara a cabo a menos de que tú y Peat tengan un hijo.

Fort: ¿Pero ¿qué dices?

Mile: Tal como lo escuchas, nada se firmará hasta no tener entre mis brazos un nieto o nieta, lo que sea es bueno.

Fort hecho una furia no hizo más que salir disparado del lugar, no es posible que cada vez le pusieran más y más trabas para logar sus objetivos.

Llamo a June.

June: ¡Fort, amor!, tanto tiempo, creí que me habías olvidado.

Fort: Necesito verte, voy ahora mismo para tu departamento.

June: Bien aquí te espero cariño.

Termino la llamada y se dispuso a conducir lo que le faltaba hasta llegar a casa de June, se quedó un momento en su auto para tratar de calmarse, sabía que si llegaba de mal humor y se le salía decir algo sarcástico June podría llegar a ofenderse y ya no le daría lo que buscaba.

Una vez que considero que estaba lo suficientemente tranquilo emprendió el camino hasta el departamento del cual desde luego él tenía llave así que no fue necesario llamar a la puerta.

Sin demora avanzo hasta la habitación donde lo esperaba June desnuda en la cama.

June: Me imagino que tuviste un día muy pesado y quieres relajarte, porque no te recuestas y te doy un masaje.

Fort obedeció dejándose consentir por ella, mientras tuvo oportunidad para pensar en cómo haría para conseguir ese niño, sin necesidad de dormir con Peat, de repente la solución apareció ante él.

Fort: June, ¿quisieras tener un hijo conmigo?

June: Estas bromeando Fort es lo que siempre he querido.

Ella se lanzó a abrazarlo y fue correspondida por Fort quien ahora pensaba en cómo convencer a Peat de aceptar al niño y sobretodo de guardar el secreto y no delatarlo con sus padres.

Obviamente tuvo relaciones con ella y dejo de lado cualquier método anticonceptivo para logar su propósito, una vez terminaron no se molestó en regresar a casa con Peat, permaneció a lado de June hasta el día siguiente.

Obviamente tuvo relaciones con ella y dejo de lado cualquier método anticonceptivo para logar su propósito, una vez terminaron no se molestó en regresar a casa con Peat, permaneció a lado de June hasta el día siguiente

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Peat acaba de despertar, desde luego que se percató que Fort no llego a dormir, pero se imaginó que se quedó en casa de su suegro.

Tay llamo a la puerta, no entro a la habitación simplemente le comunico que el desayuno estaba listo.

Se vistió y bajo hasta el comedor donde ya se encontraba su plato servido a la derecha de la cabecera de esa enorme mesa.

Peat: Tay ¿en dónde se encuentran los demás?

Tay: Desayunado en la cocina señor.

Peat: Diles que vengan a desayunar conmigo, y te dije que me llamaras Peat no señor.

Tay: Lo siento, enseguida les comunico lo que ordeno.

Desapareció en la puerta que daba a la cocina y después de unos segundos todos entraban a el comedor sonrientes y con su plato y vaso en mano.

Nanon y Copter: Buenos días Peat – saludaron muy contentos contagiando a Peat de su alegría quien sonriendo correspondió al saludo.

Ohm: ¿Qué tal? – fue el seco saludo, pero a pesar de haber sonado así él lo trato de expresar con simpatía.

Peat: Buenos días a todos, por favor siéntense y disfruten su desayuno.

Nanon: Muchas gracias Peat, por cierto, ¿y el señor Fort?

Estaba por responder cuando todos escuchan la puerta principal abrirse, era Fort quien apenas y se asomó un poco al comedor para indicarle que subiera a la habitación en cuanto terminara de desayunar.

Obedeció y no sin antes despedirse de los chicos, se puso de pie y camino hasta donde sabía que estaba Fort esperándolo.

Entro cuando escucho la voz del otro lado de la puerta permitiéndole el paso.

Peat: ¿Qué ocurrió Fort?

Fort: Nuestros padres quieren un nieto.

Peat se sonrojo y no negara tampoco que se ilusiono con la idea de tener un bebe, pero las siguientes palabras de Fort rompieron su corazón en mil pedazos.

Fort: Ya encontré a alguien que está dispuesta a darme ese niño, se trata de mi pareja con la cual mantenía una relación antes de las ridículas ideas de nuestros padres, la traeré aquí para que este bien atendida mientras dura el embarazo, quiero que mientras estés aquí también veas por ella y por el bienestar de mi heredero desde luego lo mejor será que no le comentes nada sobre esto a nuestros padres o todo esto se ira al caño.

Sin decir una sola palabra Peat salió de la habitación sintiéndose miserable, el en verdad tenía una enorme ilusión de tener un hijo, pero por lo visto aun no será.

Recuerdos del corazón (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora