Pasitos Pequeños (Yoontae)

Capítulo 4

El momento que yoongi sacó al bebé de ese agujero, Taehyung lo tiene pegado en la memoria tan arraigado que solo recordar le hacen dar ganas de llorar pero llorar tanto que puede ganar una maratón como el más llorón.

Desea deshacerse en lágrimas y que su corazón libere esa presión que siente.

Pero no lo hace, no puede hacerlo si tiene unos grandes ojos negros que lo cautivan cada que le miran desde abajo, esas grandes mejillas llenas de tierra que no permiten ver un color natural de piel, aún no conoce como es el bebé por la cantidad exuberante de tierra húmeda que se encuentra esparcida en ese diminuto cuerpo.

— ¿A tu departamento o al mío? — escucha el grito de yoongi.

— Mejor al tuyo.

Con una sonrisa Taehyung se dedica a observarlo conforme la moto se moviliza a baja velocidad mientras el frío se hace más presente, siente las piernas frías por el baño y salida apresurada que yoongi lo obligó pero no le interesa, solo se concentra en acariciar con dulzura esa mugrosa y pequeña nariz que está un poco cubierta por el chupete que se mueve con fuerza.

¿Quienes son sus padres?

¿Por qué lo dejaron allí teniendo más lugares?

¿Cómo tuvieron corazón para hacerle eso?

¿Por lo menos tuvieron corazón?

No, no lo tuvieron porque a ellos simplemente no les interesó donde dejarlo, solo lo hicieron, lo tiraron como si fuera una bolsa de basura que no servía.

Solo es un pequeño bebé que no tiene maldad, es lleno de pureza y paz que se puede apreciar cuando esos ojos negros los observa.

Si ellos no hubieran aparecido por ahí justo esa noche fría ¿Qué hubiera sucedido con el bebé?

¿Hubiera pasado la noche ahí?

¿Cuánto tiempo estuvo solo?

No lo sabe, pero de lo que Taehyung está seguro es que el pequeño tiene hambre y por lo que también siente, los pañales están pesados.

A su corta edad nunca se detuvo a pensar en hacerse cargo de un pequeño por lo menos un día porque no está seguro que pasará con este luego que el día siguiente lo lleven a la comisaria para conocer algo acerca del paradero de sus padres.

Llevarlo a la comisaría sería lo más lógico pero por la hora de la madrugada no lo hacen, el bebé estaba pasando frío quien sabe desde que hora pero debían ayudarlo y lo están haciendo.

Tae se sorprendió ver a yoongi en una faceta muy distinta a la que siempre tiene, con esa cara de culo siendo amargado y enojon con todo el mundo a excepción de él, que si, no niega que la mayoría de las veces tienen fuertes peleas pero otras simplemente se dedican a descansar en casa mientras observan una película.

Ese día no pelean, al siguiente si.

Bueno los días de películas también pelean, pero es que a yoongi se le ocurre poner una de terror, ahí tae puede decir que hay muchas discusiones y gritos de su parte hacia el mayor que siempre termina riéndose de sus desgracias y miedos.

Pero muchas veces cuando está en la universidad, a tae le encanta joderle la vida siendo un poco maldoso.

— Muñeco, ya llegamos — la voz de yoongi lo saca de sus pensamientos.

Taehyung se da cuenta que ya se encuentran bajo el gran departamento del mayor, ese bonito y amplio departamento que le gusta a comparación del suyo que es un pequeño departamento que comparte con otro estudiante en la caseta de la universidad.