BRECHA GALÁCTICA

RUMIA Y SHAAK

Al día siguiente, Rumia comenzaba a despertar, cuando abrió los ojos, miro que estaba en una hermosa y elegante habitación, la cama era tan grande que entraban todos sus hermanos en ella, pero por alguna razón no podía mover sus pies y sus manos apenas y podía moverlas.

En eso le llegó un enorme flashback de todo el sufrimiento que pasó aprisionada en el calabozo de Calígula, los recuerdos de cuando se comió a sus bebés recién nacidos frente de ella, las veces que la violó y torturó, y luego recordó a sus dos únicos hijos que no fueron devorados por el vampiro semihumano lobo que la tenía cautiva.

En eso comenzó a derramar lágrimas, sus ojos se pusieron cristalinos por las lágrimas, fue entonces cuando pegó un fuerte grito y comenzó a llorar fuertemente, alterando a algunas sirvientas que pasaron por la habitación que no dudaron en avisar a Shaak.

Cuando esta llegó, miró como Rumia pegaba gritos de agonía y lloraba a todo pulmón, los recuerdos llegaron justo cuando despertó, en eso miro como Shaak entró a la habitación y corrió hasta ella, Rumia detuvo sus gritos, pero seguía derramando lágrimas .

Shaak: ¡¿Estás bien?! -preguntó preocupada, casi gritando

Rumia no hablo y solo abrazo a la fauna, pues por alguna razón, sintió que ella podría calmarla, comenzó a llorar nuevamente.

Shaak: [abrazándola] sshh tranquila, ya todo pasó -dijo intentando tranquilizar a Rumia y empezando a acariciar su cabeza lentamente y con cariño

Rumia: *sniff* Porque...*Sniff* Porqueeeee...-decía llorando poniendo más fuerza en el abrazo..

Shaak: ¿Por que qué? -preguntó confundida

Rumia: Porque me salvaste. -dijo aun con lágrimas.

Shaak: no podía dejar que alguien como tú sufriera todo eso -dijo tranquila y sinceramente

Rumia: Rumei, Lumia...¿dónde están?...mis hijos ¿dónde están? -preguntaba con lágrimas en los ojos mirando a los ojos a la fauna.

Shaak: ellos están con tu abuelo -dijo sinceramente y empezando acariciar con cuidado la parte central de la espalda de Rumia

Rumia en eso recordó algo que Calígula le dijo, y eso era que la princesa Shaak ordenó asesinar a sus hijos, empujando a Shaak de ella.

Rumia: Tu. -decía molesta entre lágrimas. -¡Ordenaste matar a mis hijos! -grito envuelta en llanto, sus mejillas parecían cascadas de las lágrimas que bajaban de ellas.

Shaak: no -dijo sinceramente- él ordenó eso, yo solo ordena ejecutar a un espía -dijo diciendo la verdad

Rumia: Dejame sola. -dijo volteando la mirada, aun seguía llorando.

Shaak: estaré afuera por si necesitas algo -dijo sincera para empezar a salir de su habitación

Rumia no dijo nada, solo seguía viendo hacia otro lado, más específico a la ventana de la enorme habitación.

Rumia: Porque....-se agarró la cabeza y comenzó a negar con ella. -¡Porque! -grito de impotencia.

Rumia estaba molesta, triste y debil, no podia hacer nada, aparte ella nunca fue soldado, a diferencia de sus hermanas menores Remilia & Flandre, ella optó por llevar una vida tranquila y trabajar en algo que no tuviera que ver con portar una armadura y un arma de fuego.

Pero seguía siendo mitad vampira y mitad sayayin, por lo que, tenía sangre guerrera, ella solo tomo clases de defensa personal, mas nunca llegó a pelearse, siempre fue tranquila, inteligente y muy trabajadora, ella tenía su propia empresa que ayudaba a los refugiados de la guerra contra el imperio Barony.