•Capítulo 6: Cunningham•

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Estábamos las tres acurrucadas viendo Coraline y la puerta secreta, mi película favorita desde los 10 años, las chicas no estaban muy convencidas ya que les daba miedo

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Estábamos las tres acurrucadas viendo Coraline y la puerta secreta, mi película favorita desde los 10 años, las chicas no estaban muy convencidas ya que les daba miedo. En mi caso era todo lo contrario pero, tengo que admitir que tiene una vibra extraña.

Comíamos palomitas, va, solo yo ya que cristal y Chrissy tenían un nudo en el estómago el cual no podían digerir bocado.

-¿Y a dónde fueron sus verdaderos padres? -Ya perdí la cuenta de las veces que me preguntó lo mismo.

-Se los llevó la otra madre cristal -contesté un poco aburrida.

-¿Y quiénes son esos fantasmas? -rodé los ojos

-Son los niños desaparecidos -chrissy habló -ya cristal deja las preguntas, que me pones nerviosa.

La película seguía su curso, Chrissy estaba atenta a la televisión, yo sólo repetía los diálogos en mi cabeza, ya me los sabía de memoria....

-Porque cora...

-CRISTAL! -No la dejamos terminar, ya había agotado nuestra paciencia.

-Ya, perdón -agachó la cabeza.

-Voy por refrescos, vuelvo enseguida -me levanté de la cama.

-No tardes -hablaron al mismo tiempo.

Mientras me dirigía a la cocina, pensaba en Jason, a lo mejor tiene razones para estar enojado, me tuve que haber cerrado mi boca, él es mi amigo y a Eddie apenas lo conozco. Aunque él fue muy lindo conmigo, se nota su rivalidad con jason.

La noche está fría, se nota en la casa. Cuando me dirigí al refrigerador se escucharon pasos en la puerta trasera. Me quedé estática por segundos hasta que reaccioné. Tomé de la mesada un palo de amasar, pensé ¿serán ladrones? ¿O la otra madre?

Caminé hacia aquella puerta, a este punto me voy a hacer Pis de los nervios. Cuando encendí la luz alguien rápidamente tapó mi boca...era Jason.

-shh shh no grites, soy yo -abrí mis ojos completamente, su labio estaba partido y tenía un moretón en su mentón.

-¿Qué diablos te pasó? -toque su labio, este se quejó -hay Perdón, ahora dime por qué vienes en ese estado?

-Solo un pequeño inconveniente con el friki, nada más -rodé mis ojos, ya me veo sacándolo de las peleas con Eddie.

-Luego me cuentas tu ridículo show, ahora vamos a curarte -Le señalé el sofá para que se siente -ya vuelvo, voy a buscar el botiquín.

El solo asintió, antes de ir al baño primero fui a la habitación donde estábamos con las chicas, por suerte estaban muy entretenidas con la pelicula ya que nisiquiera notaron mi presencia, No quería que lo vieran así. Cuando encontré el botiquín, bajé a la sala a curar a mi amigo, que apenas me vio dio media sonrisa.

𝐓𝐡𝐞 𝐟𝐢𝐫𝐬𝐭 𝐚𝐧𝐝 𝐭𝐡𝐞 𝐋𝐚𝐬𝐭-𝐄𝐝𝐝𝐢𝐞 𝐌𝐮𝐧𝐬𝐨𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora