Las islas

Cap 18 Upgrade

Solo hace falta una chispa de motivación y mucho resentimiento para lograr grandes cosas.

Oscar estaba en cierto grado preocupado por la salud física y emocional de su nueva socia, y todo va acorde a su nuevo proyecto, bien los primeros dos días desarmo por completo el casco del barco, de ahí en adelante se dedicó a soldar dia y noche.

Es cierto que solo tenia siete días antes de entregar el taller y toda la herramienta, ya tenía exactamente cinco días de trabajo continuo, Oscar no aguantaba tanto y aveces se quedaba dormido pero cuando despertaba Hope seguía trabajando

Reacondicionado la bodega del bote, amplió su tamaño pero redujo su capacidad ya que ahora en vez de tener un espacio insignificante para los motores según entendía los planos diseñados por su misma amiga esto sería un camarote con dos literas y un micro inodoro.

— Ammm estas segura que debe ir asi el baño— Oscar comentó curioso.

— No podemos desperdiciar ni un solo centímetro — Hope mencionó.

— Pero la privacidad tú sabes — Oscar comentó con algo de reserva.

— fácil uno defeca primero y luego el otro simple — Hope no se detuvo de seguir soldando.

La estructura reforzando la capa interna, aplicando los selladores y aislando térmicamente la bodega. la obra ya empezaba a tener forma, así su humilde bote pesquero se convirtió en una cosa que flota.

— Amm Hope no quiero dudar de tus capacidades, pero ¿esto es legal? — Oscar comentó cuando miro los motores que terminaba de ensamblar.

— No en algunos estados — Hope mencionó emocionada.

Siete dias habian pasado Hope estaba temblorosa como una gelatina aun con su taza de café en mano, Oscar solo bostezaba por el cansancio pero ahí estaba, eso parecía un bote pero no exactamente uno rudimentario casi podría imaginarlo como en esos programas donde suelen tunear tu vehículo.

— Y no se hundirá verdad — Oscar mencionó sereno mientras aun veía ese bote suspendido en el taller.

— Ten la certeza total de ello — Hope comentó aturdida — que carajos debemos probarlo ahora mismo—

Oscar miró incrédulo cómo habría las puertas del taller y activaba un mecanismo que llevó el nuevo y reluciente bote o bueno el artesanal bote al mar.

— wow, no se ha hundido aún podría servir — Aun con dudas Oscar se subió al mismo.

Hope no tardo demasiado, saco la llave para encender el motor y se la dio a Oscar — Guárdala bien aun no la instalo — Dicho esto tomo un par de cables y los junto mirando como se formaba una chispa y el encendido del motor — Que? es lo próximo que arreglare —

La mecánica toda entusiasmada arrancó el motor del bote llegando a la salida natural entre las rocas tan rápido como si el bote fuera nuevo — Mi pequeño bebe quiere pasear — Hope se rió un poco mientras aumentaba la velocidad para dar una vuelta alrededor de la isla.

Oscar estaba acostumbrada a la navegación pero la expresión de su nueva socia, en un bote literalmente reacondicionado con esta velocidad le dio una incesante necesidad de aferrarse a algo.

— Qué te pareció, ¿Quieres probarlo? — Hope cedió el lugar.

Oscar comenzó lento el avance aún estaba algo nervioso, pero poco a poco aumentó la velocidad — es increible, parece una lancha rápida mas que un bote de pesca —

— Deberías probar el turbo — Hope grito — El mar está quieto no hay peligro —

— Por que le instalaste un turbo a un bosque pesquero? — Oscar crítico mientras dudaba si jalar la palanca o no.

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Alrededor de la isla siempre está algo al acecho, siempre paciente, siempre esperando y casi nunca hay nada solo un barco que no hace mucho trituro pero nada más, esa voz le dice que eso debe hacer y debe cumplirse.

Por primera vez no sabía cuánto tiempo había visto un bote, un delicioso barco, a veces están rellenos de comida, a veces solo tiene alimañas.

El enorme ser se acercó con cautela desde las profundidades podría ser una presa fácil, pero cuál fue su sorpresa cuando esta se detuvo un poco y aceleró de nuevo, acaso era un desafío o lo estaba provocando, la enorme criatura marina se abalanzó con la simple intención de destrozar ese barco de una mordida pero algo no iba bien, este empezaba a ir mas y mas rapido.

El enorme pez se emocionó y comenzó a nadar con emoción pues su presa ahora podría ser un reto, cuál fue su sorpresa cuando este bote empezó a alejarse de su alcance, por mas rapido que nadara este nuevo bote era no difícil era imposible de alcanzar, el enorme criatura solo se retiró de regreso a las profundidades, tal vez la próxima.

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Hace unas semanas, la alcaldesa del pueblo tuvo que hacerse cargo del faro, esa anciana tenía negocios que concretar en otra parte de la isla, y por la reacción del mar la semana pasada parece que todo había resultado favorable, era un buen momento para relajarse y tomar su té de la tarde y por qué no en el faro la vista era más simplemente mas bella, ajena a todo el desastre ocurrido.

Todo habría sido perfecto hasta que observó algo que le helo la sangre, y sintió que casi se ahogaba con su té, la bestia estaba atacando a un barco y casi le daba alcance.

— No, no no... el hechizo no puede estar fallando en este momento — La alcaldesa sin perder de vista el bote comenzó a llamar a la encargada del lugar — Maldición contesta, contesta —

— Hola — Contestó la vieja del faro.

— El hechizo está fallando, está persiguiendo un bote — La alcaldesa miro nerviosa como las distancias se acortaron a pesar de lo rápido del mismo — no tenemos a nadie para solventar este problema, regresa de inmediato —

— Maldición, no puedo, no ahora no tengo forma de moverme — La vieja comentó, usa uno de la bodega para rescatar a los que sobrevivan esos ya están marcados —

— Bien, espera que alivio están dejando atrás a ese bruto — La alcaldesa miro como el bote aceleró evitando el desastre y regreso al muelle — Están a salvo, porfavor regresa necesito que revises el problema —

— Que alivio por un momento pensé que se daría una desgracia, saca a eso dos del agua — La vieja comentó aliviada.

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Oscar estaba impresionado, nunca había manejado un bote pesquero con tanta potencia.

— Eso fue increíble — Oscar comentaba mientras bajaba la velocidad y se dirigió al muelle.

— Tan pronto de regreso, vamos una vuelta mas — Hope mencionó,

— Mira escuche un ruido extraño, sería bueno que lo revizaras antes, espero solo sea mi imaginación no vaya a ser que terminemos a la deriva en el primer dia de prueba.

— Bien, solo llega al muelle, ve por algo de comida y mucho café — Hope mencionó forzando una sonrisa.

Todo parecía genial hasta que en el muelle observaron a la alcaldesa y estaba furiosa.

— Tenían que ser ustedes dos y que clase de basura es esa — La alcaldesa estaba muy molesta — Apaguen esa cosa de inmediato, tenemos que hablar muy seriamente en mi oficina y tu tambien Hope no te escaparas de esta — La alcaldesa se comenzó a retirar no sin antes amenazar de nuevo — Saquen esa cosa del agua antes que decida hundirlo yo misma —

Oscar y Hope estaban algo aturdidos, ya que por lo general la alcaldesa era una mujer tranquila y serena pero nunca, ni siquiera Hope la había visto tan pero tan molesta como en ese momento.