Escenseless

Capítulo 14

Cuenta la leyenda que Selene, Diosa de la Luna concibió 50 hijos con el Hermoso humano Endimion, el menor de ellos Dawa, nació bajo la protección de la fuerza de la Luna Llena y la Luna Nueva, Zeus, al creer que sería una amenaza para los Dioses intentó matarlo, sin embargo Selene tomó a su pequeño y sellando sus virtudes, ocultándolo de los Dioses, decidió esconderlo en un templo terrenal donde dormiría por miles de años, Selene y Endimion se habían desvanecido de este mundo y el sello de Dawa se había debilitado con el paso de los años, en aquel mundo terrenal donde su gente se regia por jerarquías, una pareja de cuna humilde viajo hasta el templo de Selene donde con devoción pidieron el milagro de la concepción, el alma de Selene escucho y con un soplo de vida en el vientre de aquella mujer, un pequeño se formó dentro de ella, dando vida a un pequeño que al ser hijo de Selene, sería el ser humano más hermoso jamás conocido, sus virtudes habrían tomado forma física, en su interior dos lobos crecieron a la par del ahora humano, Dawa en su forma inmortal nombraría a sus lunas como Bader (Luna Llena) y Neoma (Luna nueva). Sin embargo, al nacer del vientre humano Dawa sería nombrado como un ser Mortal y su Luna Nueva, Neoma se mantendría dormido en un sueño profundo ya que el poder de la Luna Nueva regia de la oscuridad de la Luna y representaba la ira, coraje y fuerza. Bader siendo la Luna llena representaría la pureza, belleza, y valentía del pequeño.

Los padres humanos rezaron a Selene para poder concebir a su primogénito, por lo cual la Diosa aprovecho la oportunidad de bendecir a la pareja, brindándoles la dicha de ser padres y así poder proteger a su propio hijo de los Dioses del Olimpo.

El pequeño Dawa creció bajo el seno de la familia Humana, aunque había nacido como un mortal común, llamaba la atención de quien lo mirase sus cabellos dorados, piel tersa y delicada y sus ojos azules eran causa suficiente para ser admirado por cualquiera, siguió creciendo hasta la edad mortal de 10 años, camino sin rumbo hasta el corazón del bosque escuchando los susurro de los árboles, sin previo aviso callo de rodillas al suelo un calor en su interior apareció sin explicación alguna, sus ojos azules cambiaron a un dorado brillante e intenso, su semblante era serio y con gesto de molestia, Neoma, molesto por haber sido sellado intentó tomar posesión del pequeño cuerpo de Dawa, más sus intentos fueron interceptados por el alma de la misma Selene, quien apareció frente a Dawa bajando desde los cielos, unas hermosas alas Grandes y blancas que se movían hermosamente con el viento. Tomó una de las plumas de sus propias alas y en un collar dorado la coloco sobre el pecho del pequeño.

-Lleva esta pluma siempre contigo pequeño.

-Dw: Eres mi Ángel Guardián?

-Así es pequeño.

-Dw: Pero porque me das tus plumas, no te duele al quitarlas?

-No, porque mis alas son parte de ti también, - le sonrió al pequeño - ellas te protegerán.

Selene, con esa pluma sellaría el poder de Neoma ocultando la presencia de ese lobo en el interior del pequeño Dawa, este, al estar de regreso en casa, contó su vivencia a sus padres quien le miraron con asombro al escuchar dicha historia.

Con el tiempo, Neoma calmo su resentimiento y prometió proteger al pequeño cuando se le permitiera Actuar, odiaba la manera en que los humanos trataban al pequeño por ser extraño para ellos en su mundo, en el que un aroma era casi obligatorio en cada persona y su pequeño humano no poseía aroma alguno que pudiera ser percibido por mortales comunes.

La leyenda dice que en el momento en el que Neoma despierte el único que podrá contener su fuerza será el destinado de Dawa y así las dos Lunas tendrán su tan deseado equilibrio creando un doble lazo, imposible de romper incluso para las diosas del tiempo.