Capítulo 4: Solo nosotros, muchos sitios, el nuestro.

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Nemugasa y yo saliamos hacia el Mcdonal's, nos quedaba uno cerca y ir a comer ramen nos salía algo pesado por ahora.

No sé que estaba haciendo Nemugasa en el IPad pero tenía muchísima curiosidad. Lo miré, estaba muy atento al IPad, no lo miraba en sí, pero lo apretaba mucho contra su pecho.

-¿Que tal te pareció?-Le pregunto, para romper la tensió.

-Estuviste genial, Maya.-Me respondió, sonriendo, sus ojos brillaban y era algo muy... enamorable?

Llegamos al Mcdonal's rápidamente, había poquita gente, practicamente una pareja, que solo estaban tomando un café. Pedimos nuestras comida, yo pedí un menú grande mientras que Nemugasa uno mediano. Nos sentamos en un lugar alejado de todos y como siempre soliamos hacer, Nemugasa púso un video en el IPad, los auriculares (ya que teníamos un adaptador para poder poner 2 pares) y empezamos a comer.

Noté que Nemugasa me observaba mucho, paré el video de uno y lo miré.

-¿Que pasa?- Me pregunta él, mirandome extrañado comiendo un trozo de su hamburguesa.

-¿Porque me miras tanto?

-Bueno....-Dijo él, levemente sonrojado y desviando la mirada nervioso.- Es que estas muy guapo hoy.

.... Quiero besarlo, pero estaba demasiado lejos. Lo que hicímos anoche lo dejó molido y lo noté en su forma de caminar, pero hoy en solo pocas horas, me estába encendiendo demasiado con cosas simples. Eso era demasiado peligroso para mí, para mantenerme tranquilo y para él, para mantener su forma de caminar normal.

El video continuaba pausado, Nemugasa me mirába extrañado aún. Solté un suspiro y cerré el IPad.

-¿Estás bien, Maya?- Me pregunta él. bebiendo de su refresco.

-Sí, solo quiero que hablemos...

-¿Pasa algo malo?

-No, todo lo contrario, todo está genial solo que... Bueno, ¿que te parecería si viviésemos juntos en un apartamento en el centro?

Nemugasa toció y escupió un poco de su refresco, me miró aun más extrañado, limpiando su boca con la manga de su chaqueta.

-¿A que viene esa pregunta ahora?

-Bueno, me vinó a la mente ahora mismo.

-Está bien...-Él se ríe levemente arreglando sus gafas.- Dame cinco buenas razones.

Me acomodé en la silla, mordí un gran torzo de hamburguesa, lo tragué y le sonreí con maldad en mi cara.

-Primera: Nos queda más cerca al trabajo y la universidad; Segunda: Tendríamos más intimidad; Tercera: No tendríamos que dar tantos viajes para vernos; Cuarta: Pasaríamos más tiempo juntos y última y más importante: Nuestra relación se reforzaría más.
-Buenas razones... Estaria genial...-Dice Nemugasa, sonriendo y acabandose su paquete de patatas deluxe.
-¿Entonces porque que hablamos tanto?- me arrebato el IPad y lo abro- ¡Busquemos uno en el centro y que sea grande. No hay ningún problema!
-Mis padres...-Susurro él, bajando la cabeza. Los ánimos se me bajaron de un momento a otro.
-Es verdad... Ojala te dejen...
-Si, seria lo mejor.-Nemugasa me respondió con una sonrisa.

Acabamos de comer, hablando de temas corrientes, incluso chismorreo de nuestros compañeros de la universidad.
-Sabes...-Digo, mientras los dos saliamos del McDonal's. -Si viviesemos juntos, tendríamos una habitación llena de libros....el cual seria... Nuestro sitio...-le digo, pasando mi brazo por su hombro y le bese la cabeza.-
El se rio levemente y sonrojado, oí un susurro que decía: "Ojala..."
Amo demasiado a ese tonto...

Nuestro hogar, nuestro amor -Hidoku Shinaide (YAOI FANFIC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora