Al ver a Taeyoung frente a nosotras con los brazos cruzados mirándonos expectante me quedé paralizada, ni siquiera recordaba como respirar con normalidad. Mi vista se turnó entre mi acompañante y mi hermano sin saber que decir, aunque no importa mucho lo que diga, mi familia siempre verá maldad en todo lo que hago o lo que ellos se imaginan que hago.
–Tuve un problema y Rosé me estaba ayudando con el vestido-contestó la peligris sin dudarlo mirándome de soslayo–pero son cosas de chicas, así que por favor no preguntes más-tajó el tema con una sonrisa fingida esquivando la mano de nuestro contrario cuando intentó tomarla del brazo.
–Me prometiste bailar hace un rato y aún no me has cumplido-habló él con cierta molestia en su voz; el mismo fuego de la otra vez se volvió a instalar en mi pecho provocando que apretara la mandíbula para no decir algo que nos delatara.
–Sé que lo dije, pero estoy muy cansada-se excusó dando un paso cerca de mi y lejos del castaño–Invita a alguna de las chicas de allí-señaló una esquina en el otro extremo del salón–nadie las ha sacado a bailar y creo que ellas también tienen derecho de divertirse-le dió un pequeño empujón para que se alejara en esa dirección y él, a regañadientes, lo hizo–¿Quieres dar un paseo por el jardín?-propuso tratando de entrelazar nuestros dedos sobre su regazo, mas la aparté con una mueca mirando a los demás invitados.
–No es posible, ya tengo que irme al trabajo-me excusé mirando al suelo–Buscaré mi mochila en la cajuela del auto y me iré-anuncié con la vista en el suelo; quiero decir algo más, sin embargo no sé qué es.
–Te veré en casa antes de ir a la universidad ¿cierto?-inquirió con los labios temblando; mantuve los ojos fijos en mis pies cuando me encogí de hombros. Las lágrimas amenazaban con salir cuando corrí a la salida sin despedirme. Llegué al bar con una horrible presión en el pecho y sintiéndome culpable por tratar a la menor de esa forma.
–Vaya, la cenicienta ya regresó del baile-se burló mi buen amigo inclinándose sobre la barra, hice un mohín sentándome en una de las banquetas vacías–¿Qué ocurre hermanita? No eres tú-sonreí con pesar dejándome rodear por sus brazos, necesito saber qué alguien está ahí, que a pesar de todas mis estupideces y malas desiciones siempre se mantendrá a mi lado, y ese, definitivamente, es Jungkook.
–No sé si esto funcione-dije cuando nos separamos, dejó un jugo de uvas frente a mí cuando rechacé la cerveza que me ofreció y abrió una para él.
–Bueno, te recuerdo que lleva años funcionando y no te permitiré que me dejes ahora-unas sonoras carcajadas salieron de mi boca golpeando su hombro sin delicadeza alguna.
–Eres un tonto-me quejé rodando los ojos y dándole un gran sorbo a mi bebida–Me refería a Lisa-hablé ya más seria y sintiendo otra vez esa culpa caer sobre mis hombros–No creo que las cosas salgan bien entre nosotras, la situación es muy complicada-me quejé con las lágrimas escurriéndose por mis mejillas–Necesito que me des un consejo, no sé qué hacer, cada vez que está con Taeyoung los celos me ganan y termino pagando mi enojo con ella-chillé sorbiéndome la nariz.
–Estás hablando con la persona equivocada Chaeng-se inmiscuyó Eunbi en la conversación; la pelirosada coincidía conmigo en varios de mis turnos, no se puede decir que somos amigas, pero nos llevamos bien, aunque no se puede decir lo mismo de ella y el peliplateado–Jon es un soltero empedernido ¿qué podría saber él sobre el amor?-el mencionado rodó los ojos soltando un bufido cuando mi compañera se alejó.
–Tú no te preocupes, que el entrenador no juega-me guiñó un ojo haciéndome reír, solo él para mejorar mis peores momentos–Solo te puedo decir una cosa, lo que ustedes tienen es especial-cubrió mi mano con la suya sobre la madera–¿Cuánto puede tardar esta situación, unos días, unos meses, un par de años?-preguntó de forma retórica–Pero tu amor por Lisa ¿cuanto durará? Dime-presionó para escuchar mi respuesta y no supe que responder ¿cuánto duraría nuestra relación?¿cuánto tiempo tendríamos antes de que todos se enteraran? y cuando pase ¿ella será capaz de luchar por lo nuestro, o lo que sea que tengamos?
–Voy a ponerme el uniforme, ya puedes irte a casa, seguro estás cansado-evadí el tema entrando al baño de los empleados–¿Sigues aquí?-le pregunté cuando regresé detrás de la barra, las posiciones habían cambiado.
–Ahora soy un cliente, así que tráeme una cerveza-hizo una expresión altanera dejando el pago frente a mí; le hice una mueca sacándole la lengua para después dejar su pedido frente a él.
Tuve a Jungkook toda la madrugada comiéndome la cabeza con sus consejos, sus preguntas y su insistencia para que le contestara la cuestión anterior, y yo, seguía sin una respuesta para darle. Al terminar mi horario de trabajo mi amigo me llevó en su auto hasta la casa; cuando quise salir del vehículo me detuvo agarrándome por el brazo.
–¿Realmente es tan difícil darme una respuesta?-volvió a insistir recostándose en el asiento de cuero gastado, asentí dejando salir un suspiro pesado–Cierra los ojos y piensa en ella, piensa en Lisa y casi te puedo asegurar, que encontrarás la respuesta-hice lo que me pidió y en el mismo instante en que los párpados cubrieron mi retina la imagen de la peligris apareció en mi mente. La primera vez que la ví llorando y con el maquillaje corrido, las primeras palabras que cruzamos, la primera vez que nuestros labios se tocaron o que nuestras pieles se rozaron; cada momento que pasé con ella, los momentos de cariño, las peleas, en situaciones en que la mayoría de las personas pierde el amor el nuestro se volvía más fuerte; Lisa es imperfecta de una manera tan perfecta que parece casi irreal.
–No sé cuanto dure, pero haré que dure el mayor tiempo posible-aseguré abriendo los ojos, mi acompañante me miró con una sonrisa que correspondí–y seremos felices el tiempo que podamos-besé su mejilla en forma de despedida antes de entrar corriendo a la casa e irrumpir en la habitación con el mayor cuidado posible.
Me senté en el borde de la cama dejando salir un suspiro, había sido una noche agotadora. Observé a Lis dormir plácidamente abrazando mi almohada, reí despejando su rostro de algunos mechones de cabello salvajes dejando a la vista sus hermosas y relajadas facciones. Haré que funcione sin importar las consecuencias, porque aunque tu destino no estaba ligado al mío, tu corazón me eligió.
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My beautiful mistake (Chaelisa)
Romance¿Amor? Creo que dejé de creer un poco en él cuando me rompieron el corazón. Aunque quizás nunca estuve realmente enamorada, porque cuando mis ojos chocaron con los tuyos una revolución estalló en mi interior. No pensé que llegaras a mi vida de esta...