Ida a la Mansión Malfoy

180 10 0
                                    

Llegó el fin de semana y Severus Snape llevó a su hija a la Mansión Malfoy en brazos.

Acuéstala acá-le dijo Lord Voldemort-¿Cómo te sientes pequeña?, ¿Necesitas algo?- le preguntó el Señor Oscuro a Caroline.

Quiero dormir, tengo mucho sueño- le dijo la niña.

Bien, dejémosla dormir- dijo el Señor Tenebroso. 

La dejaron acostada y tapada, mientras se iban a una sala contigua, no lejos de ella, por si sentían que debían volver para calmarla.

Bien, nos turnaremos- ordenó el Señor Oscuro, Lucius, te quedarás en la tarde, al lado de la pequeña; Severus por la noche y  Bellatrix atenderás a tu hija en la mañana.

Como usted ordene mi Lord- dijo Lucius.

Así será mi Lord- dijo Snape.

Si mi Lord- dijo Bellatrix.

Lucius fue a la habitación, se sentó en una poltrona y comenzó a leer un libro, no tenía nada importante que hacer, se relajó;  estaba con un ojo en el libro y el otro en la pequeña.

Pasó la gran parte de la tarde durmiendo hasta que despertó.

¿Qué quieres cariño?- le preguntó Lucius.

Caroline trataba de abrir los ojos, pero los tenía pegados y se puso a gemir.

Tranquila bebé- le decía con mucho cariño- mientras le besaba los ojos para que pudiera despertar y así tranquilizarse.

Se abrazó a su Tío Lucius, quien instintivamente, se desabrochó la camisa para calmarla, estaba ella con la mañita, la hizo dormir y arrullar en su pecho, hasta que se volvió a dormir.

Pasó un rato y llegó Severus a verla.

¿Cómo está?- le preguntó.

Despertó con los ojos pegados, pero ya la acomodé para que durmiera.

¿La alimentaste?- le preguntó el pelinegro.

No me ha pedido ni sangre ni semen- le dijo Lucius.

Ok, en quince minutos le tocará su mamadera de semen-dijo Snape.

Lucius se despegó con mucho cuidado para no despertarla, se acomodó la ropa y fue a buscar una mamadera para extraer el semen suyo y conservarla para la noche por si estaba hambrienta.

Caroline sintió el perfume de su padre y se acomodó cerca de su pecho, el pelinegro se desabrochó la camisa y la acercó para que se tranquilizara.

¿Cada cuánto la estás alimentando?- le preguntó Lucius,  mientras se extraía el semen en la mamadera.

Cada cuatro a cinco horas, le estoy dando semen; sangre dos veces al día cuando está con el tema de la ingesta-le respondió.

Acá era exactamente lo mismo-respondió Malfoy- mientras tapaba la mamadera y llamaba a un elfo.

¡Marcy!-exclamó el rubio.

Con un ¡Pof! apareció un elfo.

Dígame amo- contestó Marcy 

Llévate esta mamadera a que se mantenga fresca- le dijo Lucius.

Como ordene amo- le respondió el elfo.

Si necesitas algo Severus, llama a Marcy, el es mi elfo persona, iré a descansar ahora-le dijo el rubio.

Gracias Lucius- le dijo el pocionista.

Severus tapó a su pequeña con su capa y la envolvió en ella, mientras se volvía a sentar en la poltrona para poder leer.



Tu eres mi vida y yo soy tu alimentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora