Tu eres mi vida y yo soy tu alimento

Nacimiento

Caroline descansaba en su cama, después de hacer el amor de manera intensa con su esposo, cuando algo la despertó asustada, ya que sentía las sábanas mojadas.

¡¡Cottine!!- gritó.

¡Pof!-apareció la elfina- Amita, ¿en qué le puede servir Cottine?.

¿Dónde esta Severus?- le preguntó apesumbrada la niña-

En su despacho-le dijo la elfina.

¡Anda a buscarlo por favor!-le pidió Caroline-¡creo que daré a luz hoy día a mi bebé!-

En seguida, amita-le dijo la elfina y desapareció con un ¡Pof!

Severus a los tres  minutos entró nervioso al dormitorio nupcial.

¡Amor mio!, ¿qué tiene?, ¿qué le pasa?-le preguntó asustado.

Caroline descubrió las sábanas y le mostró a Severus.

¡Tranquila mi amor!, ¡todo está solucionado!-¡¡Tipsy!!-llamó el pelinegro

Amo, ¿en qué le puede servir Tipsy?-le preguntó el elfo.

Anda a buscar a Cissy que venga con la partera-le dijo el pocionista, ¡¡Urgente!! ¡¡apúrate!!.

En seguida, amo-le dijo el elfo y desapareció con un ¡Pof!.

Cissy apareció con la partera, quien le pidió a Severus toallas, un lavatorio y paños fríos.

Ahora Caroline-le dijo la partera-escúchame bien, pujarás cada 10 segundos, ¿listo?.

Lista-dijo la niña.

Severus se acomodó detrás de su esposa y le tomó las manos para que se asujetara ella.

Vamos, mi amor, tú puedes, eres fuerte, puja-le decía el pelinegro.

¡¡Augrrrr!!-pujaba Caroline.

Vamos bien, Caroline, se está empezando a asomar, vamos cuenta hasta 10 y puja-la animaba la partera.

1, 2, 3, ....9 y 10- decía Cissy- ¡¡puja!!.

¡¡Augrrr!!!- volvía a pujar la niña.

Severus le cambiaba los paños fríos de su cabeza cada 5 minutos.

Se está asomando su cabecita-decía la partera- vamos Caroline una vez más.

¡¡Augrrr!!- terminó pujando Caroline.

Un hermoso llanto inundó la estancia, había nacido una hermosa niña, de pelo negro y blanca como una perla.

¡¡Felicidades!!, es una hermosa niña- le dijo la partera- alcáncenme el lavatorio para lavarla.

Bienvenida Eileen Madeleine-le dijo Severus a su hija, quien la tomó y se enamoró al instante de ella.

Dejaron descansar a Caroline, mientras Severus era feliz viendo a su princesa que buscaba su pecho para dormir.

Igual a tu mami-le dijo Severus- quien estaba feliz abrazándola.