El falso duque y la princesa loca [3/3]

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Percival Eckhart entrego el sello de la duquesa a su esposa dos días después de la boda, tras despedir a la mitad de los sirvientes que lo acosaron durante años. Percival sonrió con alegría cuando sus hermanas irrumpieron en su oficina apenas unas horas después. 

"¡¿QUe hiciste?!" Grito Reyna tan pronto como lo vio a él y a su irritable sonrisa de zorro "¡¿Donde estan mis damas!? ¡¿Por qué no hubo ningun sirviente para atenderme en la mañana!?

"Percival ¿Qué demonios piensas que haces? ¡¿Sabes como esto afectaría la reputación del ducado?!" Desmera exigió "¡Has despedido a un monton de sirvientes! ¿¡Cuanto tiempo crees que tardaremos en volver a contratarlos?!

"¿Tardaremos? Dulce hermana, no confundas" Percy hablo por primera vez, un tono tranquilo y casual que no delato toda la burla que sentía hacia ellas en ese momento "Yo ya soy el duque, y ya hay una duquesa. Tu no tienes nada que ver con los deberes del ducado. 

"¡Este es nuestro hogar!" Reyna replico furiosa "¡No puedes quitarnos nada, bastardo!" 

"Bueno, ve y diselo a su majestad el emperador" 

Desmera apreto los puños con furia, rechino sus dientes y miro a su medio hermano menor que parecía estar esperando que terminaran de gritar, de quejarse, todo mientras se reía de ellas ¿Y como se atrevía él a mirarla así? Ella era la hija del duque y la duquesa, el asiento que su medio hermano tenía ahora, debió de tenerlo ella. 

No él, no su maldita esposa mandada del palacio imperial cuya existencia manchaba la reputación del ducado. 

No su maldita esposa que paso la noche con él. 

No su maldita esposa que lo tendría para ella el resto de su vida de una manera que Desmera solo podía fantasear. 

"Solo tienes lo que tienes es porque Yves murió, Percival" Desmera hablo con desprecio "Solo estas en el asiento en el que estas porque mi hermano esta muerto ahora, no porque realmente te lo hayas ganado, tienes que saberlo, no actues tan altanero frente a mi, que me has robado mi derecho de nacimiento. 

Percival sonrió y asintió con la cabeza. 

"Oh, estoy muy consciente de que si nuestro amado hermano no hubiera muerto con el duque, no estaría ni siquiera en este ducado... pero ese no es el caso, él esta muerto y yo vivo. Y hermana, a diferencia tuyo, no espero que todos se inclinen ante mi solo por un derecho de nacimiento ¿O acaso crees que solo me la pase riendo durante mi estadía aquí? ¿Crees que solo perdía el tiempo con otros nobles en las reuniones? Eres tonta, Desmera, solo te crees mas inteligente de lo que eres"

Miro a Reyna ahora. 

"Y tu, Reyna ¿Llamarme bastardo te hace sentir de alguna manera? Bueno, se lo dire a las dos ahora que estan aquí: Quejense si quieren, solo que si lo hacen demasiado alto, hare que las arrastren a la torre del ducado y las arrojen ahí sin sirvientas y con dos comidas al día, y rezen para que la comida no este en mal estado. Ahora, no me provoquen problemas a mi o a mi esposa, tampoco a su madre, que ella es lo unico que evita que las arroje a la torre ahora mismo. 

Las dos retrocedieron de inmediato, como serpientes que retraían sus colmillos llenos de veneno y se enroscaban sobre si mismas antes de huir ante un enemigo que no podrían vencer, un enemigo resistente a su veneno tras largos años expuesto. 

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"Cortaste tu cabello" Le dijo en voz baja Callisto durante la cena "Hace un año después de mi cumpleaños 22" 

"Ah, si, hubo un problema con mis hermanas" 

En esos momentos, el cabello le llegaba por encima de los hombros, lo había dejado crecer principalmente porque los sirvientes lo habían arruinado tanto cuando lo cortaron la primera y ultima vez que no se atrevió a dejar que volvieran a tocar el cabello que heredo de su madre. 

Historias Cortas [LMEEUFPLV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora