8. El espectáculo del Circo

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(Pv Lucius)

Acosté a Lari en su cuna ya que había quedado tan cansada de jugar con sus amigos que se quedó dormida en mis brazos mientras la bañaba.

—Me alegra que la pasara tan bien—sonreí arropando a mi pequeña mientras Isabel se enrollaba a su lado.

—Parece que se ha adaptado bien—decía Kaito mientras se ponía el traje que Lady le dio para su presentación—. Si alguien de Tornasol la viera, dudo que notara la diferencia, Snow ha hecho un buen trabajo en enseñarle a actuar como una niña común.

—Tienes razón, aunque yo solía dejarla correr en el jardín lejos de la mirada de la gente—sonreí besando la mejilla de mi hija—. Tal vez llamaríamos la atención en nuestro viejo hogar, pero aquí somos un poco normales.

—Eso sí—dijo mirándose en el espejo—. Jeje me veo tan guapo como siempre.

Volteé los ojos resignado, este hombre podía ser demasiado arrogante con su apariencia.

Aunque ahora que lo conocía mejor, no era tan desagradable como aquel día en que lo conocí. 

—¿Te quedarás con ella? Hoy trabajaste mucho—me preguntó.

—Mmmmm es que...me gustaría ver el espectáculo—admití—. Nunca fui al circo así que me gustaría verlo aunque sea un poco.

—Bueno, tampoco es que nos vayamos mañana o algo así—aseguró—. Pero bueno, creo que podrías ver un poco, pero no dejes que te vean o llamarás la atención.

—De acuerdo.

Salimos de la habitación y seguimos a los demás a la carpa, todo estaba listo para el espectáculo por lo que Cronos se dirigió al escenario y comenzó la presentación mientras yo me acomodaba tras bambalinas junto con Lady, Laurens y Gwen.

—¡Damas y Caballeros! ¡Les doy la bienvenida al circo de la Estrella Azul!—anunció—. Esta noche, les presentaremos un hermoso espectáculo digno de su agradecimiento por recibirnos cada año.

El público aplaudió emocionado antes de ver a Ícarus y a Hermes subiendo a lo más alto de los portes para tomar los trapecios usando ropa colorida y brillante, eso sí, las alas del chico estaban ocultas bajo un hechizo al igual que a los híbridos, incluyendo la cola de Kaito.

—Y ahora, demos comienzo a la presentación, comenzando por nuestras aves humanas ¡Hermes e Ícarus!

Las luces se apagaron y los reflectores iluminaron a ambos chicos, usando prendas verdes brillantes y grandes sonrisas.

Todos aplaudimos y comenzó el espectáculo. Los chicos saltaron sujetándose del trapecio y hacer piruetas en el aire mientras el público gritaba de emoción, la verdad yo también estaba emocionado y aplaudía como loco, lo que hacía que Lady riera y Gwen me jalaba la oreja para que me calmara.

—Lo siento—me disculpé.

—Pareces un niño, que bueno que te dejamos tras bambalina—suspiró Laurence.

—Es que nunca había visto esta clase de espectáculos—reí nervioso.

—"No te preocupes"—escribió Lady divertida—. "Te ves tierno así"—y me dio unas palmaditas en la cabeza de forma maternal.

Eso fue bastante agradable, era un gesto que hace mucho mis padres hacían, por lo que me trajo muy buenos recuerdos.

...Me pregunto si mi madre estará bien.

Los aplausos me trajeron de vuelta al presente y vi que habían terminado la presentación de los chicos.

—¡Y esos fueron nuestros queridos trapecistas! Ahora ¡Diviértanse con nuestros acróbatas!

La Leyenda del Mago MayordomoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora