La chica, la corredora, la optimista (Newt y tu)

Castigo

(Esta parte está en narrador omnisciente, ¿vale?)

Newt se acerca sigilosamente hacia la chica de cabellos rubios oscuros que tanto admira. No lleva más de una semana y ya siente que se ha enamorado de ella. No entiende el por qué, a lo mejor es por su belleza, o por su forma de ser, o simplemente porque todo en ella es perfecto.
_______ está sentada sobre la hierva, apollada en el tronco de un árbol.
-¿Qué estás haciendo?-pregunta Newt lo más dulcemente posible.
La chica da un pequeño salto, se ha asustado.
-Nada...-responde, sonrojándose ligeramente.
-Algo estás haciendo,-dice Newt, acercandose mas a ella y sentandose a su lado-dime el qué.
_______, aún colorada, le pone al chico un cuaderno entre las manos.
-He estado dibujando las cosas que recuerdo antes de venir aquí... Así nunca las olvidaré y estaré preparada cuando volvamos.
Newt abre el cuaderno y empieza a ojear las hojas, tan solo unas cuantas están pintadas, pero los dibujos son maravillosos. El que más le gusta es el de un lago, con unas montañas al fondo y un par de barcas navegando.
-Valla...esto es increíble...-comenta mirándola a los ojos-dibujas genial.
-Gracias-el rubor vuelve a sus mejillas.
Él chico no puede evitar sonreír por la fácilidad con la que se sonroja, y pensar en lo adorable que está.

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(En otro lugar, pasados los muros del laberinto.)

Una mujer, la mujer con la que _______ soñó se encuentra de pie frente a un montón de pantallas y ordenadores. En una se puede ver a un chico y una chica; Newt y _______. Están riendo y jugando, se nota lo que sienten el uno por el otro, eso es lo que más enfada y, a la vez, fascina a esta mujer.
-¿No crees que ya ha tenido demasiada felicididad?-pregunta un hombre, su rostro recuerda a una rata.
-Si.-dice fria-Es hora de que aprenda la lección.
El hombre rata asiente y se dirije hacia un ordenador, pulsa unas teclas y vuelve al lado de la mujer.
-Está programado para cada mes, como ordenaste, se activará dentro de dos semanas.
-Bien.-sonríe amargamente.-Te arruinaré la felicidad niña, pero recuerda que tengo mis motivos, no haría nada si no es por una razón importante... Espero que lo entiendas.