Capitulo 38

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Gilbert

me encontraba en el laboratorio de investigación de Toronto,  los análisis de Lía lo teníamos estudiando para tener una cura aunque pensé que ya la tenía aún falta últimos detalles y que la aprobarán

pensé que la enfermedad de Lía seria rara, pero es normal que en menos de un mes y medio las personas mueran, a pesar de eso Lía había tenido unos días muy normales pero  de un momento podía estar inestable

-Con el trabajo de hoy seguramente la cura estará en menos de una semana- comento la Señora Charlotte 

-que bien,  ayudara a muchas personas- comento Dylan  

-son buenas noticias al fin podre ver a mi esposa- confese con una sonrisa 

-la extraña mucho señor Blythe, se le nota en esas inmensas ojeras- exclamo parándose quitándose la bata

- la extraño, pero eres un pésimo compañero de cuarto, además creo que Maya tampoco este tan bien que digamos- brome sonriendo cuando vi como su rostro se ruborizaba

- enserió no sabes ni disimular- río Elena, marchándose

Negué con la cabeza  saliendo del cuarto dirigiéndome a la habitación, sentí mis ojos pesados así que decidí dirigirme a la cama para poder descansar y dormir

.....

Me desperté por los toques en la puerta Me levante aún adormitado abriendo la puerta

- disculpe que lo despierte señor Blythe, pero me dijeron que esta carta es importante- dijo Elena avergonzada extendiendome la carta

- descuida esta bien, Gracias- dije tomándola viendo como ella daba la vuelta para marcharse y cerré la puerta

La observe no le tome importancia ya que era de Mateo, Aun sentía mis ojos muy pesados así que deje la carta en el pequeño mueble de noche y me volví a acostar rápidamente quedando dormido

A la mañana siguiente me levante temprano para seguir con lo planeado y poder regresar más rápido a casa, hoy solo trabajariamos medio día así que después de terminar volví a mi habitacion y la arregle al ver la carta me sente al borde de la cama y la abrí

Esta carta no será formal, al grano.

Se que no es manera que de te enteres pero desde que te fuiste la salida de Amelia a empeorado y esta muy grave, ella no te lo quiso decir pero tuvo un accidente el día del laboratorio y una muestra de Lía la quebró haciendo que su herida se contaminara, desde que te fuiste a estado  cada día peor, vuelve lo antes posible...

Att. MATEO..

Al leer la carta mi desesperación creció al momento de tirar todo lo que en algún momento había ordenado, ¿como era posible que no me había dado cuenta?¿por eso su palidez cuando me fui?, me dirigí al laboratorio

- ¡¡necesito la cura!!- dije exaltado viendo como los 3 me miraban asombrados

- ¿que pasa ?- pregunto Dylan preocupado

Me acerque a él tirandole la carta en la mesa

- ¡¡ella necesita esa vacuna!!- dije moviendo de un lado a otro- tengo que irme- aclare viéndolos

- comprendo su preocupación señor Blythe, pero si no está aquí los jefes no aprobarán la cura-aclaro la señora Charlotte - así que le pido -

-¡¡no puedo, no puedo mi esposa me necesita!!- exclame, el sentimiento de perderla hacia que mis lagrimas salieran por si solas

- tranquilo, su mujer es fuerte- hablo Dylan acercándose a mi

- ¡¡como me puedo tranquilizar sabiendo que mi esposa esta muriéndo rápidamente!!- Exclamé alejándome de ellos

- ¿que pasará si se va?, ella no tendrá la cura porque hasta que no la aprueben será un delito utilizarla, le quitaran su licencia y nunca podra ejercer su profesión- aclaro la señora Charlotte acercándose lentamente a mi

-¡¡ no me importa si pierdo todo, no me importaría si se que al final la salvaré a ella!!- conteste

- porfavor señor Blythe si quiere puedo ir en su lugar- ofreció Dylan - yo la cuidare bien le enviare cartas diario de su estado

Negué rápidamente con la cabeza -¡¡ ella me necesita!!

- con lo alterado que esta no podrá hacer nada, no se deje llevar por sus impulsos- hablo la señora Charlotte

-¡¡No puedo, mi esposa esta enferma y tengo que estar con ella!!- grite dándome la vuelta para salir

Sentí como un pinchazo en mi brazo - lo siento Señor blythe pero no podemos dejarlo ir- dijo volte a verlo

Escuchaba como mi voz decía repetidamente "mi esposa, tengo que ir con mi esposa", vi como Dylan meneaba su boca pero no lo escuchaba, vi como me agarraba antes de que todo se tornará oscuro

...

Me desperté en mi cama vi una silla al rincón de la habitación

- ya despertó señor Blythe- hablo Elena

- tengo que ir con mi esposa - aclare

- Dylan hace 4 horas se acaba de ir, la Señora Charlotte me dijo que le dijera que el se encargaría de todo, que mañana serán los últimos detalles y en dos días verían si su aprobarán el medicamento, que la Señora Blythe estará en buenas manos- confeso

- yo soy su esposo, yo tengo que estar allí para ella- dije sentándome en la cama

- Señor si va a Avonlea con su esposa podría complicar las cosas, en tres días estará aprobada la cura, espere- exclamo parándose - Mateo, Maya y Dylan la observarán usted y su esposa han aceptado en su grupo a personas con éxito y buenos en su trabajo, no dude que estarán en buenas manos hasta que aprueben la cura - aclaro dándome unos golpesitos en el  hombro

- tienes razón- confese- haré lo necesario para terminar aquí y poder estar con mi esposa

- bueno la señora Charlotte a estado preparando todo ya que la fórmula de la cura está lista así que creo que debería ir con ella, al igual que nosotros ella también esta preocupada

- ¿por qué debería de estar preocupada si no conoce a Amelia?- pregunte

- porque al igual que usted eligió esta profesión para salvar vidas, ya que no pudo salvar a alguien que amaba- aclaro saliendo de la habitación

Al escuchar la puerta cerrarse puse mis manos en mi rostro, solo quería que estos días pasarán rápido para verla, me necesitaba pero no serviría de nada si regreso a Avonlea sin la cura

DESTINO | GILBERT BLYTHEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora