𝐈 𝐇𝐚𝐭𝐞 𝐔 𝐌𝐫. 𝐇𝐚𝐧𝐝𝐬𝐨𝐦𝐞 | 𝐉𝐢𝐤𝐨𝐨𝐤𝐦𝐢𝐧 (𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧)

Capítulo 18 : LIMBO

"Sé que estabas pensando cosas malas cuando me besaste. Tu lengua me dijo solo mentiras. Canción triste, la ocasión cálida."
—Allie X

Jungkook observó la casa de su entrenador a través del cristal del coche de este y dejó escapar un suspiro involuntario de sus labios. Todavía sentía en su pecho esa pequeña mancha de ansiedad que lo estaba haciendo reaccionar de forma inquieta e impredecible con Park. Por mucho que había intentado mantener sus ojos lejos de este durante el trayecto, su mirada había terminado una vez tras otra sobre los detalles de la mandíbula marcada de este, sus manos sobre el volante o la simpleza de su flequillo siendo removido por el cálido aire de la calefaccion del vehiculo.

—¿Cómo te sientes? — la pregunta llegó de forma inesperada y cuando Park giró su rostro, Jungkook también lo hizo. Rehuyendo sus ojos casi asustado. No quería ni podía mirarlo a los ojos todavía después de lo que había pasado en la piscina aquella tarde — Jungkook...

—Estoy confundido, ya sabes eso — bufó esquivando el toque de su entrenador y llevando la mirada hacia los asientos traseros del coche donde descansaba Peach tranquilamente — Todo es muy extraño.

—Espero que Taehyung pueda ayudarte un poco entonces — Jimin observó al muchacho por unos instantes antes de decidirse a salir del vehículo.

—Realmente también espero lo mismo... Todo lo que necesito ahora mismo es aclarar mi mente antes de que las competiciones comiencen.

Jimin pensó en que el objetivo del chico era realmente ambicioso, por supuesto que para este tan solo se trataba de una nueva fase con fecha de caducidad cercana, siguiendo las palabras que el nadador había expresado en el trayecto hacia su casa. Aquello no era una fase, el Jimin del pasado habría estado de acuerdo en algún momento pero el adulto de veintiocho años que en la actualidad se encontraba ahí, en ese lugar y con un muchacho confundido por el rumbo que parecía tomar su identidad o sexualidad... Ese adulto que se encargaba de entrenarlo, sabía que Jeon no estaba enfrentándose a ninguna fase temporal sin importancia. Jungkook solo se encontraba situado en medio de una crisis de identidad y negación que lejos de facilitarle las cosas, lo haría caer cada vez más profundo. Mientras le colocaba la correa a Peach y sonreía al notar los bostezos aburridos que esta dejaba escapar, decidió que ese no era su problema. Pondría todo de su parte para ayudar al chico, sin embargo si este finalmente decidía negarse no lo forzaría a admitir cosas que todavía podrían sentirse demasiado nuevas y extrañas en su interior.

Después de todo Jimin ya se había encontrado antes con el tipo de hombre que tiene esposa e hijos pero en las sombras busca el calor ardiente que solo alguien de su mismo género le puede proporcionar. Su vida estaba demasiado repleta de idiotas cobardes que decidieron ceder ante la presión social de la idea de normalidad y raciocinio.

—Sea como sea tú eres el único que sabe lo que siente Jeon, no dejes que otros intenten reconducir o afectar tus sentimientos y decisiones. Ya hay suficientes hombres que viven negando lo que son ahí fuera, solo porque su generación les impidió atreverse a mostrar lo que son sin miedo. No te conviertas en un chico autoflagelado más. No encajas en esa definición.

Jungkook mantuvo su mirada sobre su entrenador por unos segundos, era absurdo pero aquellas palabras lo reconfortaban, al igual que la mirada cálida que este le dedicaba.

—Yo... Todavía no sé qué me pasa así que no puedo prometer nada acerca de mis futuras acciones — Jungkook aceptó gustosamente la correa de Peach cuando Park se la cedió — Pero prometo seguir siendo fiel a mi mismo entrenador. Eso no va a cambiar.

Jimin se limitó a sonreír mientras observaba al nadador cambiar a su derecha, hundió las manos en los bolsillos de su abrigo teniendo que luchar levemente contra las ganas de pellizcar una de sus mejillas y soltar alguna broma sin sentido. La rutina que habían obtenido ese mes, parecía suficientemente adecuada para acabar con cualquier rastro de incomodidad.