𝐈 𝐇𝐚𝐭𝐞 𝐔 𝐌𝐫. 𝐇𝐚𝐧𝐝𝐬𝐨𝐦𝐞 | 𝐉𝐢𝐤𝐨𝐨𝐤𝐦𝐢𝐧 (𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧)

Capítulo 65 : MOMENTUM

“Mentí, no puedo controlar el amor. Estoy aquí para combinar nuestra pobreza, voy a secar las mangas mojadas de este pequeño niño. Voy a consolarlo y a abrazarlo con todas mis fuerzas.”
—Indie (MoonMoon)

El tiempo parece pasar mucho más rápido cuando la felicidad envuelve cada uno de los días que vives. Y Jeon Jungkook era realmente feliz al lado de Park Jimin, tanto que antes de lo que él mismo pensaba ya se encontraban rozando el final de diciembre. El año nuevo llegaría y todo lo que deseaba se resumía en seguir manteniendo ese sentimiento de extraña calma. Había pasado gran parte de su vida centrando toda su atención en la natación y las piscinas, sin embargo ahora tenía muchas más cosas en las que mantener su mirada.
                   
Ahora soñaba con seguir levantándose al lado de su entrenador, con desayunar mientras los dos hablaban tranquilamente acerca de los progresos del entrenamiento mientras sus mascotas los rodeaban, con continuar recostandose en el sofá de la sala de estar con sus pies envolviendo los de Jimin tras la cena y sus cuerpos entrelazados buscando el calor del hogar. Soñaba con que esa cálida sensación nunca abandonase su cuerpo, porque al lado de Jimin estaba logrando apartar la ansiedad incluso en los momentos más repletos de presión. A veces era más que suficiente el detalle de estar a su lado, sabiendo que este se mantendría sincero, siempre dándole una opinión sincera acerca de sus dudas o pensamientos quebraderos de cabeza.
                   
Esa sinceridad que formaba parte de la personalidad de su novio provocaba que la calma se hiciese lugar entre su habitual rutina de estrés. Jungkook solo había conocido el entrenamiento, las piscinas y la constante lucha por ser el mejor. Estaba comenzando a conocer la tranquilidad gracias a Jimin, este lograba sustituir sus días de desasosiego por poco habituales jornadas difíciles en las que lograba encontrar sosiego con la llegada a casa. Su entrenador le había enseñado a apartar su faceta de atleta de su vida real, y poco a poco eso comenzaba a tomar sentido mientras se acostumbraba a pensar en algo más allá de vencer la siguiente competición.
                   
—Estás muy callado Jungkookie.
                   
La mano de Jimin masajeó con cariño el cuello de su nadador y se acercó a su mejilla para dedicarle un rápido beso repleto de sentimentalismo, manteniéndolo sobre sus piernas. Se encontraban en su despacho, después de una de las mejores competiciones a las que Jeon se había enfrentado y con la medalla todavía colgando del cuello de este.
                   
—Sé que tu operación coincide con la final de las competiciones nacionales, pero… ¿Crees que podrás ir a la carrera de natación solidaria?
                   
Jimin pasó una de sus manos alrededor de la nuca de Jungkook, sosteniéndolo antes de inclinarlo un poco para besar sus labios con mimo. Podía notar la sincera preocupación en los expresivos ojos de su niño.
                   
—La final es en Febrero y la carrera solidaria un par de meses después. No te preocupes, podré ir.
                   
Jungkook asintió sin apartar la mirada de su entrenador. Con Jimin a su lado a menudo olvidaba las partes malas que todavía residían en su vida y que últimamente se resumía bastante a su madre.
               
—Tendremos que viajar hasta Japón para la carrera, me preocupa que tu hombro se resienta durante el viaje. — le explicó — Deberíamos preguntarle al cirujano antes de decidir, de todas formas aún quedan unos meses así que si fuese necesario podríamos aplazarla.

—¿Vas a acompañarme al médico esta tarde? — Jimin modificó un poco el tema, sabiendo que la preocupación de Jungkook era un asunto exagerado que se mostraba continuamente de forma inevitable, desde que la fecha de su operación fue definitivamente confirmada el chico no dejaba de darle vueltas.

Kook asintió rápidamente y acomodándose sobre las piernas de Jimin se deshizo de la medalla para a continuación colocarla alrededor del cuello de este. Sus manos se detuvieron por varios segundos sobre el pecho de su pareja mientras en su cabeza los resquicios de preocupación regresaban. Una preciosa sonrisa escaló hasta los labios de Jimin haciéndole prestar atención de nuevo al hombre ante él, no tardó en volver a besarlo.