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Entramos de nuevo a la habitación, esta vez sin las enfermeras. Yo no sabía que decir o que hacer, estaba sin palabras, me pase un rato sin decir nada, evitando el contacto visual, solo parado ahí.

Dios, no puedo creer que no le incomode mi presencia. No tenía ni la más mínima idea de que hacer, mis interacciónes solo se limitaban a mi mamá y familiares.

Siento que alguien me toca el hombro –oye... –volteo y era él, mi corazón aceleró haciendo que me de un mini espasmo que él notó

–o-oye estás bien? –asentí, era la único que podía hacer

Veo como me mira con ojos de preocupación, dándole varias caricias a mi hombro para calmarme –solo quería preguntarte tu nombre, ya sabes... tenemos un tiempo compartiendo habitación... –dijo con un tono muy suave, y tímido, casi como una melodía para mis oídos

Respiro hondo y trato de hablar – A-aquino... dime Aquino...

Aveces me daba a mi mismo lastima.

–Hola Aquino, soy Duxo

–Rethey?– dije sin pensar

– a- sí, cómo lo sabes? –decía con una sonrisa nerviosa

<<Mierda...>>

–Amm... e-estaba en la dedicatoria del libro que me diste...

– ah ok, si lo estás leyendo? –decía con cierta emoción

– amm... lo comencé a leer, la verdad es muy interesante

–si, es mi libro favorito, me lo regaló alguien especial para mí...

<<Alguien especial? "TM"?>>

No sé porqué, pero me deprimí un poco, ¿alguien especial? TM será su pareja? Por qué me importa eso, puede ser un familiar o un amigo, o simplemente el autor del libro, debo dejar de sobrepasar todo, creerá que soy raro

–oye... oye, ey –dijo Duxo sacudiendome

<<Muy tarde>>

–a- lo siento, que decías?– dije con pena

– que normalmente no comparto mis libros con nadie pero, cuando te vi por primera vez... supe que le hacia falta algo a tu vida, no digo que tu vida sea miserable tampoco, sino que ese algo es la alegría de vivir, estar desde pequeño con esta maldita enfermedad no es fácil

Miré al suelo, de alguna u otra forma tenía razón, he estado muy deprimido últimamente

El me miró con ternura y tomó mi mentón con cuidado para que lo mirase y habló con la voz más dulce existente

–y por eso te admiro

Volteé extrañado –a qué te refieres?

Suspira– tengo esta enfermedad desde hace 7 años, este mes me transladaron  a este hospital para tratamiento especial

<<Por eso es que se lo llevan tan seguido del cuarto>>

El hace una pausa y continúa– cuando vine, me dijeron que tenias la misma enfermedad, pero a diferencia de mí, tu la tuviste desde que naciste, tanto los doctores como yo admiramos tu fortaleza y cuando supe que me pondrían contigo... estaba nervioso de alguna manera...

El estaba... nervioso?

En ese momento Aquino recordó como fue cuando lo vio por primera vez...

Flashback

"Debido al contacto visual el apartó su mirada rápido, seguido de alejarse veloz y torpemente consiguiéndo así enredarse con los pequeños tubos los cuales estaban conectados a el, haciendo un movimiento brusco casi se cae hacía atrás pero alcanzó a equilibrarse a tiempo, quedando en una posición graciosa."

Me quedé callado, no sabía que decir. Miré a Duxo a los ojos otra vez, no recordaba lo peculiar que estos eran, se veían... fascinantes.

Inconscientemente acerqué mi rostro para verlos mejor, se veían tan irreales, podría quedarme viendo un buen rato.

Me acerco un poco más, me sentía en la nubes, estaba a punto de decir algo pero tropecé haciendo caer los dos portasueros y aterrizando en el pecho de Duxo

Por qué existe gente como yo en el mundo?

–estás bien? –el me mira con preocupación

Retrocedí rápido y me agaché para recogerlos, estaba rojo de la vergüenza, vaya primera impresión, una impresión del asco

– a- déjame ayudarte –dijo para después agacharse también

Ambos se pusieron de pie pero había un problema, los tubos que están conectados a ellos están enredados

– am- e-espera– dijo el castaño tratando de desenrredarse, este sin querer jala uno de los tubos de Duxo

– Auch!

– L-lo siento!

–esta bien, de hecho estoy acostumbrado jajjaja

Después de un rato lograron desenrredarse y se pusieron de pie de nuevo, con la ayuda del otro

–te gustaría charlar un poco? Para conocernos mejor

El castaño estaba más que emocionado por conversar, tal vez no sea la gran cosa, pero para él era una oportunidad para hacer un amigo

◇◇

Se la pasaron hablando, ambos hechados en la camilla del azabache, contando sueños frustrados, anécdotas y ocurrencia divertidas, el ojos ámbar ya se estaba soltando, hablando más abiertamente y relajado, estaba tan feliz de poder convivir y socializar con alguien de su edad, pero según él no era oficial, tenía que asegurarse que le agradaba.

– entonces el doctor me encontró dentro del armario jajajajaj– decía un risueño azabache

–jajajajj, oye, no puedo creer que hayas pasado toda tu niñez en hospitales, yo también pero... no era tan extrovertido como tú

–por qué no serlo? Eres genial,  deberías tener más confianza en ti mismo

Volteó a mirarlo – tu crees? No creo que sea tan bueno

El también voltea pero completamente, poniendo sus dos manos debajo de su cabeza como si fueran almohadas mirándolo con ojos soñadores –Enserio, por qué tú no lo crees? Deberías tener muchos amigos

El castaño volvió a mirar al techo, soltando un suspiro melancólico –la verdad? No tengo amigos, tengo familiares que me tratan como uno pero... no es lo mismo...

–... yo puedo ser tu amigo

El ojos ámbar vuelve a girar su cabeza emocionado –enserio?

–claro!, me caíste demasiado bien

El castaño quería llorar, era su primer amigo,uno que no sentía pena por el o siendo obligado por alguien, en verdad le había agrado a alguien

–Duxo...

–Mhm?

–gracias... –le dice con una sonrisa calida y los ojos levemente cristalizados

Al ojilila esto le dió ternura, y en ese instante se prometió a sí mismo ser el mejor amigo que Aquino pudiera tener, iba hacer lo posible para que aquella amistad sea duradera.

–no hay de que aquinito – este le dió un abrazo, pues el era muy cariñoso con las personas

Pero por otra parte Aquino estaba a punto de llorar de la emoción y felicidad, no lo pudo contener más y lloró en el hombro del azabache aun con este en brazos, el mencionado se dispuso a dar caricias en su cabellera castaña y rizada, jugando con sus rizos dorados, calmandolo... que buen amigo que es...

&quot;¿Compartimos camilla?&quot; •[DUXINO]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora