Intercambio de almas

Dos charlas

Tomó nuevamente las cartas que había estado leyendo, definitivamente el líder Yao era un dolor de cabeza donde fuera. Suspiró y la dejo sobre la mesa... Ahora tenía otros asuntos que atender.

Jin Ling.

Tenía la misma edad que el de su realidad, pero había una gran diferencia. Su A-ling iba a ser hermano mayor y trataba de pasar tiempo ayudando a su padre con los asuntos de la secta así que no lo veía tan seguido como cuando todavía era pequeño.

En esta realidad... El niño se había quedado sin padres y él lo había criado. Así que la relación era mucho más profunda. Por eso había estado escribiendo varias cartas a lo largo de esas semanas. Llevaba un mes aquí, un mes en el que se sentía completamente solo.

Lan Huan a veces lo visitaba, lo mismo Wei Wuxian, pero no era lo mismo.

Desde que había molestado a Lan Huan la vez que fueron a buscar la caja, quería volver a besar a su propio esposo. Admitía que le agradaba ver algunas expresiones, pero... Dejó escapar un suspiro y miro hacia el techo. Dijeron que alguien debía llamarlo. Pero necesitaban preparar todo, no podía hacerse al azar.

En eso la puerta de la oficina se abrió sacándolo de sus pensamientos.

— ¡¡JIUJIU!!

Así que así se veía su sobrino. ¿Por qué no le sorprendía que la expresión que tenía era casi igual a la suya? Aunque notaba todos los rasgos que lo identificaban como hijo de su hermana.

— Mocoso, deja de gritar -lo regañó frunciendo el ceño- ¡Y saluda como corresponde!

El chico solo rodo los ojos mientras cerraba la puerta detrás de él, entrando para sentarse al otro lado de su escritorio dejando su espada a un lado.

— Pero Jiujiu, ¡llevas días sin responder mis cartas! ¡Tu nunca tardas más de dos días sin hacerlo! ¡Aunque sea para regañarme!

— No puedes depender siempre de mi- lo volvió a regañar notando que no había saludado, pero lo dejaría pasar- He estado ocupado para tu información...

— Shizui me ha dicho que últimamente has estado teniendo varias reuniones con Zewu Jun y hasta has invitado a Wei Ying aquí. – le comento - ¿Qué está pasando?

¿Shizui? ¿Quién era ese chico? Recordaba a Lan Jingyi que era uno de los amigos de su sobrino, pero no al tal Shizui.

— Hemos estado investigando algunas cosas y lamentablemente necesité la ayuda del idiota de tu tío- expresó mientras comenzaba a ordenar las cosas en su escritorio

— ¡Jiujiu! ¡¿Acaso estas enfermo?! ¡¿Te envenenaron?! -la pregunta claramente sorprendida y hasta angustiada lo tomo por sorpresa

Bueno si había maldecido, pero no ponía en peligro su vida... O quizás solo su vida amorosa si no volvía pronto con su esposo. A menos que fuera a atacar al Lan Xichen de ahí.

— ¡¿Qué mierda?! ¡¿Qué te hace pensar eso, mocoso?! Estoy bien

— ¡Pero no tiene sentido! ¡¿Por qué investigarías junto a Wei Wuxian y a Lan Wangji?! Puedo entender Zewu Jun pero... ¿esos dos? ¡Apenas si estás hablándote con Wei Wuxian!

Ahora él frunció el ceño ante eso.

— ¡Mocoso! ¡¿Quién mierda me crees?! – golpeo la mesa - ¡Soy un Líder de Secta! ¡Aun yo puedo dejar de lado mis diferencias personales si realmente es necesario!

— ¡No es lo que me dijiste el mes pasado cuando te sugerí que hablaras con Wei Wuxian sobre los ghouls y prácticamente me echaste! -lo regañó - ¡Y acabas de decir que es mi tío!