🅃🄴 🅅🄴🄾//𝑷𝒆𝒅𝒓𝒊 𝑮𝒐𝒏𝒛𝒂𝒍𝒆𝒛

❸⓿

→Elisa

Ahora todo se trataba de Gavi es decir, el chaval estaba mal con él, pero mi novio, el cual es muy empático, se siente mal por no poder ayudarlo. Y verlo mal, me sabe mal a mí. Entonces cogí y me fui a verlo. Sola. Sin nadie más. Sabía dónde vivía, había acompañado a Pedro un par de veces. Me abrió la puerta con el mando de la Play en la mano, una camiseta y unos calzones, así tal cual.

-Hostia... ¿Todo bien?

-No, no vengo por eso... ¿Tú estas bien? -el chico hinchó su pecho con oxígeno antes de decir palabra.

-Pasa -no dice nada mas, simplemente se aparta de la puerta y me deja paso.

Entro en su piso, no era algo grande, pero era cómodo y cálido. Me siento en el sofá, y espero a que me diga algo.

-Soy... Muy difícil de trabajar.

-Salta a la vista -el centrocampista agacha la cabeza.

-Te juro que no soy malo... Quiero mejorar -me mira, y yo asiento.

Sé lo difícil que es controlar tus emociones, porque hay veces que te hunden por dentro en vez de manifestarse fuera. Es lo que más me pasa a mi, pero a él, se le ve tan transparente que no sabe hacerlo...

-Y puedes, ¿sabes? Creo que mientras estás lesionado, puedes hacer un pensamiento e ir al psicólogo -él me mira un momento y vuelve a mirar a sus manos, concentrándose el los jugueteos que hace con sus manos.

-Bueno... Es que no soy nada bueno abriéndome con otra gente -suspira el sevillano, le frustra.

-Y lo creo.

-Pues... No lo sé. No se cómo hacerlo.

-Victoria quiere ayudarte... Y supongo que habrás visto el títular. Ahora lo sabe toda España... -le pongo una mano en el hombro.

-Pedri no sabe la suerte que tiene de tenerte... -suspira-. Desearía tener a alguien que me comprendiera y me amara como tú lo haces con él.

-Todo llega, Pablo. No tengas prisa. Primero tienes que aprender a amarte a ti mismo, antes que a los demás. Tal vez de momento solo necesites una persona que te levanté y te ayude en el proceso -es sevillano, inseguro, me mira. Para luego asentir y suspirar-. Esto no es tan fácil como tú lo ves... Mi relación con Pedri no es tan perfecta, ha habido baches...

-Pero mira qué bien estáis -insiste.

-Lo estamos después de haber trabajado en ello. Y sobre todo, en nosotros mismos. Yo tuve que estar con otro chico antes de entender que lo quería a él -sus ojos indecisos pasan de los míos a sus manos.

-Ya, ya lo sé. No sabes lo mal que estuvo durante ese tiempo...

-Durante ese lapso, ¿no estuviste hablando con Victoria?

-Sí, de hecho sí. Pero, no sé... Tenía miedo de cansarla, aburrirla, y nunca le hable realmente.

-¿No lo hiciste? -no se por que me extrañó.

-No, nunca -negó rotundo.

-Deberías hacerlo... Ella estudio el primer año de psicología, sabe cosas. No lo sabe todo, pero te ayudará mucho, ella sabe lo que hace, Pablo.

-... Debería abrirme.

-Deberías –apoyé mi mano en su hombro-. Créeme, de verdad que tú puedes.

Él suspiro, le di un abrazo y tras charlar con él un rato más, me fui. Y me fui a ver a Pedri al entrenamiento, por qué no.

–¡PEDRIII, TU AMIGAAA! –chilló Eric García.