CAPITULO XVIII

122 16 0
                                    



JUNGKOOK


Hasta que no empezó los ensayos con la compañía de baile, Jungkook no fue consciente de lo mucho que iba a aprender en esa gira, pues no solo castigaba su cuerpo, si no que estaba aprendiendo como nunca había imaginado y era por eso que Hoseok y él aunque terminaban exhaustos, estaban emocionados y llenos de entusiasmo. Como el gran bailarín que era su amigo, los pasos para aprender se le hacían de lo mas sencillos, por lo que Jungkook tenia que esforzarse un poco mas, para al menos estar a su mismo nivel, por lo que cuando terminaban las practicas, él se quedaba una hora mas repitiendo una y otra vez los movimientos que mas problema le podían traer y esa era una de las razones por las que cuando llegaba a casa se le hacia muy complicado no dormirse, sabiendo que ya había terminado el día y ya podía relajarse. Pues solo en ese momento era cuando se permitía dejar de pensar en las distintas coreografías, que tenia que tener mas que aprendidas en tan solo cuatro meses.

Por otra parte Taehyung parecía que de verdad estaba intentando no comportarse tan frio con él, pues no solo se mantuvo firme a su lado en la reunión urgente que Jin convoco en el centro a mitad de semana, para forzar la instalación de los nuevos radiadores en todo el refugio, si no que ademas en casa, también parecía que lo ignoraba menos.

A veces Jungkook se decía a si mismo que no debía de hacerse ilusiones y tampoco bajar la guardia, pues seguía siendo Kim Taehyung y le gustase o no, en opinión del resto del mundo prácticamente le había robado la mitad de su herencia.

Aunque sinceramente, se lo ponía muy difícil cuando le miraba a si de suave, como le miraba a veces, como la mañana que se acerco hasta el hospital para llevarle un par de tuppers que Chin Sun le había preparado y es que Jungkook hubiera volado a otra ciudad si hubiese sido necesario, con tal de ver esa mirada o esa sonrisa de agradecimiento que iba dedicada a él, solo a él, a pesar de que debido a pasarse por el hospital le hiciera llegar tarde a las practicas, aun así eso era algo de lo que no se podía arrepentir cuando se trataba de Taehyung.

Por supuesto la promesa velada de que iba a tener que pasar el fin de semana con él, no tuvo que ver para que esperara ese momento como si se tratara de agua de mayo, no, para nada.

Tan emocionado como para incluso despertar mucho antes de lo que solía hacerlo los sábados, tan nervioso como para no poder dejar de mover una de sus piernas mientras desayunaba, Todo eso para convertirse después en una explosión de distintas emociones cuando Taehyung sugirió acercarse al centro Kim para ver que tal iba la instalación de la calefacción.

Sinceramente Jungkook nunca se imagino que iba a sentirse tan bien pasando su tiempo libre en aquel lugar y mas cuando Taeyang jamas quiso llevarle a conocerlo, ni siquiera había tenido tanta relación con niños hasta ese momento, pero esa era la pura realidad, pintar con los mas pequeños, corretear o ayudar en sus tareas a los mas mayores, incluso ofrecerse a hacer de pinche en la cocina, echando mano de las cualidades que había heredado de su madre para cocinar. Todas esas cosas hacían que no solo se sintiera bien consigo mismo, si no que también le hacían sentir que por fin era parte de alguna manera de la familia Kim.

Evidentemente levantar la cabeza y chocar con la mirada intensa de Taehyung o cruzarselo cuando cada uno estaba haciendo algo distinto, solo hacia que su corazón brincara como loco dentro de su pecho.

Dedicar los días de entre semana al baile y los sábados a ese lugar, para Jungkook no era un plan para nada malo, todo lo contrario si ademas incluía pasar ese día con Kim Taehyung.

Que a pesar de eso a veces se preguntaba si el joven Kim se acordaría de su "promesa" tal vez aunque estaba seguro de que lo dijo de todo corazón, ahora ya no lo había olvidado y ya tenia planes con sus amigos, pues dado el horario que había tenido esa semana, Jungkook creía que no los había visto.

INTRUDERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora