CAPIULO XXV

127 19 12
                                    



TAEHYUNG


Después de ese intenso fin de semana a Taehyung le quedo claro que la amistad de Jungkook con Hoseok iba a ser un dolor de cabeza para él, pues verles interactuar con tanta naturalidad y confianza casi le había producido una erupción de urticaria, lo cual pensando en frio era una estúpida reacción de posesión que Taehyung ni tenia derecho ni mucho menos se lo merecía y si la primera vez que vio a Jeon Jungkook entrando en el despacho le hubieran dicho lo que iba a sentir un par de meses después por el mismo joven que en ese momento era la persona viva que mas odiaba simplemente le hubiera recomendado una cita con su profesor de psicología.

Ahora simplemente se sentía avergonzado de sus propios celos y puesto que no se consideraba nada tonto, era que estaba seguro de que lo que sentía por Jungkook le iba a llevar por la calle de la amargura.

Aun así también era muy consciente de que se le hacia imposible resistirse a ese sentimiento cuando Jungkook era a si de fascinante, por que esa era la mejor palabra para definirlo, fascinante, pues le fascinaba desde verle cada día mas bonito, pasando por esa risa estridente y contagiosa que por desgracia solo la veía cuando estaba con su amigo o con los niños, hasta el mas pequeño gesto lleno de inocencia y naturalidad que le dejaba así de fascinado, con todos esos requisitos, Taehyung era un condenado en el corredor de la muerte y solo le quedaba esperar la fecha de su ejecución que le mandaría directo al infierno donde de seguro iba a ir por tener esos sentimientos tan sucios con el que tenia muchas papeletas de ser su hermano.

Y si con todo eso no estuviera suficientemente condenado, pasar un nuevo día en el centro Kim viendo lo muy adaptado que estaba Jungkook a aquel lugar en tan poco tiempo, ninguno de los componentes de consejo alguno de ellos formando parte desde el primer momento, estaba tan adaptado a ese lugar y no solo eso la aceptación que había tenido desde el minuto uno de parte de todos los niños era algo que Taehyung no había visto nunca, pues incluso Namjoon que le había acompañado alguna vez o incluso Soo que había ido al recinto tanto con él como con su padre, habían logrado esa confianza por parte de los pequeños que le habían dado inmediatamente a Jungkook.

Por todos esos pequeños detalles es que Taehyung no podía evitar sentir esa increíble atracción por Jeon Jungkook, viviendo una continua lucha interior cada minuto que pasaba con él cerca, pues es que se había dado cuenta de lo fácil que era perderse en su mirada o en cada gesto que hiciese y dándose cuenta de ello cuando ya se había perdido, por no hablar de que empezaba a darse cuenta de lo fácil que se le hacia el tocarle sin darse cuenta, como si ese gesto fuese lo mas natural para él, como le había pasado en el coche de vuelta a casa después de haber pasado el día en el centro, pues solo cuando había notado lo tenso que se había puesto Jungkook a su lado es que había sido consciente de que había puesto su mano en uno de sus muslos como si fuese lo mas normal del mundo estaba seguro de que casi le había producido un cortocircuito a Jungkook pues había sido de lo mas tierno verle tropezando con la nada cuando salio del coche y Taehyung estaba seguro de que su torpeza se debía a su descaro al poner la mano en su muslo, en el fondo Taehyung se regocijo al comprobar como podía alterarlo de esa forma.

Y es que si Taehyung no se consideraba para nada un tonto, tampoco era ciego (aunque necesitara usar gafas para leer desde pequeño) y se había dado cuenta perfectamente del comportamiento de Jungkook con él, pues viendo como interactuaba con Hoseok e incluso con Namjoon estaba claro que su manera de comportarse con él era totalmente distinta, con Taehyung era mas tímido, apenas le mantenía la mirada, siempre al borde de sonrojarse, tartamudeando de puro nervio y por alguna razón esa actitud no le molestaba, ni siquiera le preocupaba, pues le encantaba saber que solo se comportaba así con él, cual era su significado? Taehyung de momento no quería, ni necesitaba saberlo, quizás por su propia tranquilidad, bastante tenia luchando consigo mismo de momento.

INTRUDERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora