El tan ansiado día de la boda por fin había llegado, después de tanto tiempo finalmente estaban a punto de unir sus vidas para siempre y jurarse amor eterno.
La celebración se llevó a cabo en la casa de los Blight. Al principio se pensaba que un pequeño salón de fiestas sería suficiente, pero al ver que la mayoría de los invitados confirmaban su asistencia, optaron por hacerlo en el jardín de su casa debido a la gran extensión.
Nuevamente las mamás de las novias se habían encargado de la decoración de la casa, cabe mencionar que no escatimaron en gastos, flores por doquier, meseros deambulando por cada rincón de la casa, una enorme fuente de chocolate en el centro, figuras de hielo alusivas a la boda, música de arpa de fondo, todo simplemente hermoso y digno de la boda de sus hijas.
—Ha llegado el momento y antes quiero decirles que se ven hermosas —murmuró Camila intentando a toda costa retener las lágrimas en sus ojos. Era tanta la emoción que sentía al ver a sus hijas con un vestido blanco—. Estoy muy orgullosa de ustedes porque lucharon por su amor hasta el final, les deseo toda la felicidad del mundo hijas...
—Gracias mamá, no sabes lo que significa para nosotras que nos hayas aceptado así como realmente somos —contestó Luz entrelazando sus manos junto con las de su madre—. Gracias por querernos así y gracias por permanecer a nuestro lado.
—Y me tendrán hasta que dios me preste vida, incondicionalmente, es una promesa ¿de acuerdo? —preguntó Camila conectando miradas con sus hijas quienes asintieron emotivamente. Seguido de esto procedió a darles su bendición—. Bueno... es hora de que vayan al altar, deben estar antes de que las hermanas Blight lleguen.
—Mamá, pero... ¿no vas a ser tú quien nos acompañe? —preguntó Viney.
—No seré yo quien lo haga, alguien más me hará el favor de hacerlo —respondió Camila desviando su mirada hacia atrás—. Ven aquí.
Viney y Luz voltearon instintivamente hasta encontrarse con Gus por detrás sonriendo tímidamente.
—Yo... yo quisiera —trató de decir, pero las palabras no le salían de la garganta—. Sería un honor si me permitieran llevarlas al altar.
—¿De verdad harías eso? -preguntó Viney viendo a Gus asentir repetidas veces—. Gracias... hermano.
—No tienes nada que agradecer, es un placer y me siento muy afortunado de hacerlo —expresó Gus con los ojos brillantes antes de ofrecerles ambos brazos, quedándose él en medio de las dos—. Es hora, vamos...
—¡Esperen! Faltamos nosotras -gritó Masha con la respiración entrecortada en compañía de Willow—. Perdonen la demora, estábamos en el baño. Nosotras les vamos a llevar la cola.
—¿La cola? —preguntó Viney horrorizada colocando sus manos rápidamente en su trasero.
—La cola del vestido —respondió Willow procediendo a tomar la cola de Luz.
—No puedo creer que casi se van sin nosotras, somos las damas de honor, me siento indignada —murmuró Masha fingiendo dolor—. Solo las perdonaré porque es el día de su boda, solo por eso.
—Lo siento mucho Masha, Willow... gracias por estar aquí —dijo Luz mostrando una amplia sonrisa—. Ahora sí, estamos listas.
Y así sin más, comenzaron a caminar a paso lento con el corazón alborotado y lleno de emociones.
—Me siento muy nerviosa... —murmuró Viney a la par que caminaban por la larga alfombra roja que conducía hasta el altar. Todas las miradas de los presentes estaban puestas sobre ellas y eso hacía que le temblaran las piernas, afortunadamente nadie podría verlo gracias al enorme vestido—. ¿Alguno de ustedes me trajo un inhalador? Por si me da un ataque.
ESTÁS LEYENDO
Mi Novio Es Una Chica - Lumity • Vinira
Roman d'amourDonde Luz y Viney se hacen pasar por chicos para enamorar a las hermanas Blight Está Historia No Es De Mi Propiedad, Todos Los Créditos Correspondientes a Su Autora Original @Yessi_MO