Sólo Tuya Drake. [ +18] [TERMINADA]

CAPÍTULO 26

- Drake ¿Ya empacaste? Y también ¿Mi mamá se quedara unos días más acá?  - dije conociendo lo descuidado que es en esos asuntos y también son muchas dudas de porque mamá queria quedarse mas tiempo.

- Si cariño, es que me comento que quiere unos días a solas... Quiere sanar del todo - dijo Drake con una pequeña pero hermosa sonrisa - si quieres adelantarte al auto hazlo ¿sí? - dijo mientras continuaba empacando - con cuidado cariño.

- Ok Drake tendré cuidado.

Camine muy despacio hacia el auto negro y con ventanas oscuras, al entrar recoste mi cabeza mirando hacia la ventana, que dejaba ver el cielo nublado junto con el césped lleno de agua y pequeños insectos.

Cerré los ojos escuchaba el sonido de la lluvia caer, era como sentir una brisa suave en mi rostro que poco a poco me arrullada y me llevaba a otro mundo.

Aún me parecía mentira sentir paz y tranquilidad.

Siempre mi mente estuvo llena de pensamientos horribles ¿pero ahora? Ahora me sentía tan relajada que casi pude haber quedado dormida en ese auto mientras esperaba a Drake.

Pero una voz desconocida interrumpió por asi decirlo mi paz.

Note a un hombre de aspecto muy familiar.

- Buenos días Señorita, me presento soy Pablo y soy el nuevo chofer. - dijo aquel hombre.

Me quede helada pero me recordó a papá... Su aroma y su sonrisa.

Aquel hombre volteo a mirarme de una forma muy amable y con una gran sonrisa en su rostro, su sonrisa me trajo muchos recuerdos... Recuerdos muy hermosos que deseo que jamás se borren de mi memoria.

Ese hombre de aspecto fornido pero a la vez cariñoso era tan parecido a él... Queria llorar en ese mismo instante y abrazarlo pero sería algo muy extraño para el.

Sin embargo traté de ocultar mi tristeza y mantener mi compostura dándole los buenos días con una gran sonrisa.

- ¿Se encuentra bien señorita? -dijo aquel hombre con una clara expresión de preocupación en sus ojos... Tan similares a los de el.

- Sí, no preocupes... Es sólo que... Me recordaste mucho a mi padre.

- Disculpa ser tan entrometida pero ¿Tienes hijos?.

En ese momento aquel hombre se le iluminaron sus ojos como si recordara su mayor tesoro, sus hijos.

- Si Señorita, tengo tres hermosas hijas.

Sus ojos se iluminaban como los de papá cuando hablaba de nosotras, sin duda era un buen hombre.

- Deben ser unas buenas niñas, Bienvenido Señor Pablo.

- Muchas gracias Señorita.

En ese instante llega Drake tomando asiento al lado mío.

- Buenos días Pablo ¿como está? - dijo Drake con una sonrisa hacía aquel hombre.

- Buenos días Señor Drake, muy bien señor muchas gracias por preguntar. - dijo aquel hombre con una gran sonrisa y respeto hacia Drake.

- Me alegra mucho, bueno ya sabes a donde ir. - dijo Drake para asi aquel hombre proceder a arrancar el auto para llevarnos a casa.

- Bueno mi amor, dime como te sientes... ¿Aún te duele? - dijo refiriéndose a la herida.

- Un poco mejor pero aún me duele.

- Lo sé mi amor pero recuerda debes guardar reposo, en poco tiempo estarás mejor.

- Amor... Ese hombre me recuerda a mi padre.