Sálvame

Capítulo 22

POV Erick Walton

Me acerqué a Allison para tomarla por la nuca y robarle un beso de improvisto, no podía seguir luchando contra esto que deseo, pero esta estúpida me tenía enredado, me tenía totalmente amarrado.

La besé; la besé como había deseado todos estos meses, la bese como había pensado hacerlo y se sentía jodidamente bien. Su boca se movía con maestría sobre la mía volviéndome loco, la tomé por la cintura para elevarla del piso y obligarla a envolver sus piernas alrededor de mi.

Allison simplemente era perfecta, todo en ella lo era, su labios aún sabían a alcohol, camine hasta sentarme en la cama con ella ahorcada sobre mi, toque su cintura hasta a duerñarme de su trasero, esas nalgas perfectamente redondas que había querido tocar ayer mientras llevaba puesto esos vaqueros.

Escuché un gemido salir de su boca, el cual llegó directamente a mi verga para endurecerla aún más si eso era posible. Allison tomo su polera con ambas manos para retirarla de un tirón dejando a mi vista sus pequeños senos.

Los tome para confirmar que ocupaban perfectamente los espacios de  mis manos, la deseaba, Dios sabe cuánto la deseaba. Volví a retomar su boca, pero esta vez con un beso lento.

—Hazme tuya—, susurró ella encima de mis labios.

En ese momento me puse en pies  para tirar a Allison bruscamente encima de la cama, posicionandome encima de ella para besarla, mientras mis manos recorrían su cuerpo de forma tortuosa.

Mi mano viajó por encima de su braga acariciando su centro.

—¿Qué quieres Allison?—, le pregunté mientras seguía jugando con centro.
—Te quiero a ti, por favor— suplicó ella.
—¿Dónde?— volví a preguntar.
—Dentro de mi— me rogó.
—Lo sé, pero no le hago el amor a vírgenes borrachas— susurré.
—¿Que dices?—, indagó recuperándose en la cama ya que yo me había retirado de encima de ella con rapidez.
— ¿Crees que tu primera vez debería ser estando borracha?— pregunté.
—¡Pero no lo estoy!—, gritó.
—Lo estás, así que no te haré el amor para que mañana te arrepientas. El día que te haga mia deberás estar en tu cinco sentidos sabes ¿porqué?— sentencié mirándola fijamente.
—Porque ese día necesitarás de toda tu cordura para no volverte loca en esa maldita cama cuando te folle—, anuncié.

Allison abrió su boca ligeramente pero volvió a cerrarla. 

—Iré a la cocina, cuando vuelva quiero verte dormida, porque el dolor que siente mi verga en esto momento por culpa tuya, créeme que si te veo despierta deberás terminar el trabajo que empezaste aunque sea con tu linda boquita—, amenacé para salir de hay.

Debí salir de esa habitación cuanto antes, me sentía frustrado, Allison prácticamente se habia lanzando sobre mi y yo la había rechazado, qué diablos ocurría conmigo. 

Este claramente no era yo, aunque en algo tenia razón nunca follaba con borrachas, eran unas de mis reglas, cualquier mujer podía alegar violación por no estar en su sentido y me cuidaba bastante de esto. Por eso no solía acostarme con cualquier, siempre tenía mis putas específicas.

Me dolía mi verga, Allison maldición, estoy seguro que mañana la mataría. 

POV Allison Foster

Me dolía bastante la cabeza, era como si me la estuvieran martillando constantemente, me reincorporé en la cama y Erick no se encontraba, note que sólo llevaba puesta mis bragas.

!Oh por Dios que hice!.

Erick salió del baño con una toalla en su cintura.

—¿Como te encuentras?—, preguntó inmediatamente me vio.
—Estoy desnuda—, confesé.
—Si, solo llevas tus bragas puesta—, respondió mirándome fijamente.
—¿Que sucedió?—, pregunté algo confundida.
—Creo que eso debería preguntarlo yo Allison, ¿Que sucedió anoche?— inquirió serio.
—¿Que sucedió anoche?, ¿acaso tu y yo..., lo hicimos?— indagué nerviosa.
—No sé por quien me tomas, pero no me aprovecharía de ninguna mujer en ese estado—, reveló.
—¿Entonces no paso nada?—,  volví a indagar.
—En lo absoluto—, aseguró.
—Entoces porque solo llevo bragas—, dije inmediatamente
—Porque tu misma te la quitaste, igual que las demás ropas mientras me suplicaba que te hiciera el amor, pero no debemos hablar de esto—, anunció, —Arreglate, hoy es la cena de navidad y esta casa será un desastre, así qué te llevaré al parque que te prometí—, me informó para empezar a vestirse.
—¿Podemos ir mañana?, no me siento muy bien—, pedí. La cruda que tenía empezaba a hacer estragos en mi.
—Le pediré al servicio que te traiga unos calmante y algo para desayunar—, anunció él.

Pasé el resto del día en cama, era la primera vez que pasaba por eso y creo que mi inexperiencia con el alcohol hizo que terminara en ese estado, no me gustaba tomar alcohol porque de cierta forma me acordaba a mi padre, y la hermana de Erick y sus amigas habían insistido en mezclar dos licores lo cual ahora que lo pienso no fue una buena idea.

Fue una noche loca, llevaba algunos meses sin poder salir y reunirme con algunas chicas quizás fue algo totalmente nuevo para mi, no era mi ambiente en lo absoluto, yo era más bien la chica solitaria, una especie de llanero solitario pero así me gustaba. Taylor había insistido en beber hasta no más poder y demostrarme como se hacía en Oregón, pero creo que lo hacía más por enfadar a su hermano.

Me había contado algunas historias de Erick pero la que más me llamó la atención fue saber que tenía una novia con la cual estaba comprometido, según su hermana esa chica lo hizo sufrir pero yo dudaba que eso fuera cierto, Erick no tenía corazón. La chica solo estaba con él por el estatus que obtendría una vez casados y por su familia, la misma Taylor la había descubierto una noche que la encontró hablando con una amiga mientras le explicaba el motivo por el cual estaba con un Walton. 

Taylor obviamente no dejaría las cosas así, ella misma se encargó de hablar con su hermano y contarle lo que había escuchado, la chica por su puesto negó todo, pero Erick creía en Taylor ya que había empezado a sospechar de ella por la manera en que trataba a los empleados de la mansión Walton. Taylor me aseguro que en ese momento Erick dejo de creer en las mujeres y se sumergió totalmente en su trabajo pero para mí todo esto era difícil de creer.