dirty battle { OhmNanon }

■ 11. Tienes que seguirme

Narrador.

Era un lugar muy silencioso, había guardias de seguridad en cada esquina, las medidas que tuvo que tomar antes de acudir al llamado de Mark  habían sido de vital importancia, le había registrado, manoseado era poco, pero era un requisito para poder ingresar a la prisión, Nanon  Korapat caminó hacia una de las salas de espera, sabía que la policía estaría vigilándole a través del vidrio polarizado, estaba temeroso, pero él no le debía nada a nadie, al menos en ese momento no se sentía de ese modo, detrás del vidrio estaban los representantes de todo el personal de seguridad internacional y entre ellos estaba Ohm, el había avisado a las autoridades correspondientes de la visita que  Korapat le haría a Mark , él había sido invitado para presenciar el encuentro y pudiera con su perspicacia captar algo que pudiera ayudar en las investigaciones; Ohm no tenía ningún sentimiento al menos estaba tranquilo, quería saber cada una de las investigaciones que acararían en ese día de desastres, en aquel día que había perdido a Toey.

Un policía ingresó dejando a Mark  entrar en el pequeño cuarto donde nada más había una mesa, estaba demacrado, y tenía esposadas las manos, llevaba un overol de color gris, tenía el pelo despeinado y espiritualmente estaba muerto, esbozó una pequeña sonrisa al mirar a  Korapat, pero sus ojos no brillaban, estaban oscuros y fríos, se sentó frente a su ex y colocó los pies sobre la mesa, —Sabía que ibas a venir, siempre lo haces cuando te lo indico— dice tajante el más alto, —¿Qué quieres esta vez?— interrogó Nanon sin quitarle la mirada de encima, —Deseo que vengas conmigo—, —¿A dónde?—, Mark  se tomó su tiempo para responder, desvió la mirada hacia el espejo, sabía en el fondo que había alguien vigilándolos, bajó los pies de la mesa y se acercó todo lo que pudo recargando gran parte de su anatomía sobre este,  Korapat se quedó congelado al tener la presencia ajena tan cerca, —Sígueme aquí—,  Korapat parpadeo, analizando las palabras adversas, —¿quieres que me inculpe y termine en una celda como tú?—, susurró el más chico, —Es lo que hace la gente cuando ama ¿no?, Tu me amas —acotó el contrario, retomando su postura inicial, desde el punto de vista de Nanon, Mark  parecía haber perdido la cabeza, bajó la mirada y sentía que la ceja le temblaba, tenía cólera y rabia de no haber visto la verdadera intención de Mark — eres un monstruo, terminaste con la vida de decenas de personas que eran inocentes, ¿Por qué lo hiciste Mark ?—, —Muchas personas inocentes mueren a diario, a nuestro gobierno no le importa ¿o si?— después sonrío con ironía, —retomando el punto de la conversación, estando aquí reafirmo que tú siempre has sido lo más importante para mí, te necesito, quiero al menos sentirte cerca de mí, verte, tocarte, abrazarte— decía el contrario acercando sus manos esposadas a las mejillas de Nanon, —Por el amor que nos tenemos, se que lo harás, tienes que seguirme a donde vaya, porque tú sin mí no eres nada, sin mí no serás amado, porque tú sabes que solo entre mis brazos puedes sentir el verdadero amor, solo yo conozco tus debilidades, solo yo conozco lo que te gusta, solo yo sé lo que necesitas, por este amor eres capaz de renunciar a tu libertad, por todos los años vividos, por todos nuestros encuentros placenteros donde decías que me ambas, y por esos momentos en los que gemías mi nombre sin control, se que lo harás, porqué sé que nunca podrás amar a nadie como me amaste a mi—, Hasta ese punto Ohm no se había sentido diferente, pero escuchar las palabras del terrorista le habían hecho comprender que  Korapat amaba a ese monstruo aún por encima de todo, una tristeza estaba apoderándose de su ser, dio unos pasos hacia atrás y salió del lugar, quería escapar, y eso mismo haría, caminó a pasos largos hasta su cubículo y se sentó admirando la fotografía de Toey, aferrándose a su pasado, aferrándose al cariño que sentía aún por él, —aún existe ¿verdad?, lo que sentía por ti...¿verdad Toey?—.

Korapat escuchó con desilusión al hombre que alguna vez creyó amaría para siempre, —Tienes razón, me enamoré de alguien incorrecto, pero eso no significa que no pueda volver a enamorarme y conocer otro tipo de amor, en algún otro momento yo hubiera dado mi vida por la tuya, pero ahora ya no es así, hemos tomado rumbos diferentes, ¿recuerdas ese día que viajaríamos juntos?, sí, ese día cuando me usaste como carnada, ¡pude haber muerto!, bueno...ese día, yo tomé el avión mientras tú te quedabas, desde ese día, tenemos destinos diferentes—  Korapat se levanta de la silla y emprende la huída, —No vuelvas a llamarme, ya no volveré, déjame en paz, déjame ser feliz y retomar mi vida, me duele Mark , porque dejaré atrás nuestro pasado, pero necesito regresar a vivir el presente— puntualiza, — Conociste a alguien más ¿no?— interrumpió su huida Mark , pero la respuesta jamás la escuchó porque  Korapat salió del cuarto cerrando la puerta.

Mark  se quedo mirando hacia la nada,  Korapat lo había abandonado, la vida era injusta, pensaba, ahora estaba solo, sus ojos se aguaron, pero antes de que pudiera derramar una lágrima se levantó del asiento y camino hacia la salida, para enfrentar su cruda realidad, la realidad donde Korapat ya no estaría esperando, pero debía hacer algo para que  Korapat lo siguiera.

Korapat salió de las instalaciones, sintiéndose libre, al fin, un peso menos había caído de sus hombros, caminó directo hacia la oficina de Ohm, quería decirle sobre el encuentro que había tenido con Mark , quería explicarle, quería tantas cosas, estaba a unos pasos del cubículo cuando escuchó a alguien sollozando intranquilamente, asomó la cabeza por el umbral de la puerta que estaba abierta, y lo vió, Ohm estaba recargado en su escritorio con la cabeza agachada , sollozaba como un niño mientras mantenía un pequeño cuadro en las manos,  Korapat dio un paso, y en ese instante Ohm dejó caer el cuadro al suelo, el vidrio se rompió y desde donde estaba colocado  Korapat fue capaz de percatarse que se trataba del ex novio de Ohm, —Eras tan joven...— murmuró Ohm,  Korapat sintió ganas de llorar, Ohm no lo podía ver, así que da la media vuelta dejando al más alto en su duelo, el también lo entendía, Ohm y él estaban siendo separados por el destino, él era el ex novio del hombre que asesino a su novio, él era también parte del problema,  Korapat estaba triste, doblemente triste, ¿porqué el amor era así?, siempre sintiéndose atraído por las personas incorrectas.

Ohm sentía los ojos arderle, había llorado demasiado, y estaba sintiendo la tristeza más absurda que llevaba desde que Toey se había ido de su lado, pero él sabía que lo que realmente le dolía era el encuentro de  Korapat con Mark , Mark  había sido claro con sus palabras ellos eran más que amigos, habían mantenido una relación,  Korapat también era parte de Mark , y él había traicionado a Toey con el novio del asesino, se sentía sucio, se sentía asqueado con él mismo, pero se sentía también dolido.

El reloj tocaba las campanadas anunciando la media noche y con ello también anunciando una noticia, el subordinado de Ohm tocó la puerta aunque se mantenía abierta, durante todo el día nadie le había molestado, se había percatado de su precaria apariencia y de su estado de ánimo deplorable, pero las noticias eran urgentes, Ohm enfocó su fría e intensa mirada sobre el subordinado —¿Qué sucede?—, el contrario se acercó, —el director me ha dicho que le reporte lo siguiente, debido a que usted intervino en la captura del reo número 369414, el problema está en que el reo ha sido localizado en su celda con un corte profundo en la vena del brazo izquierdo, se presume que después de la visita que tuvo robo del custodio una navaja muy pequeña, durante horas estuvo rasgándose el brazo, hasta que se ocasionó una hemorragia, por lo que se cubrió con la manta y permaneció recostado en su cama, los vigilantes no se dieron cuenta de la eventualidad— Ohm estaba en estado de shock después de escuchar las palabras adversas, no podía dar crédito a ello. —hemos revisado las cámaras de seguridad y se trata de suicidio, el custodio le escuchó decir que no pasaría el resto de su vida en la cárcel y finalmente a las 10 de la noche, falleció —.