You drive me crazy || RyuRyeong

Capítulo 9

Abrí los ojos sintiéndolos pesados, la luz del día se colaba atravesando mi ventana y a juzgar por la intensidad de la misma, podía asegurar que era pasado el medio día.

No recuerdo la hora exacta de mi llegada, pero estoy segura que no decepcione a Angie ni un poco.

Me incorpore poyando mi espalda sobre el respaldo de la cama, y sonreí al recordarme bailando con Seungmi gran parte de la noche. Aun no podía creer que durante toda la fiesta, estuvimos juntos y el sostenía de mi mano en cada tanto mientras me sonreía solo a mi.

Me levante de mi cama con una sonrisa en el rostro y mire mi reflejo en el espejo, aun tenia restos del maquillaje de anoche, y mis ojos lucían algo hinchados por la falta de sueño, sin embargo me sentía radiante.

Tome mi móvil, para revisar los mensajes de mis amigas, tenía especial interés en Lia, pues se la paso con Yeji prácticamente toda la fiesta, y lucían muy cómodas juntas, necesitaba urgentemente una actualización, sin embargo, a juzgar por la ausencia de mensajes, supuse que aun se encontraban dormidas.

Estaba por guardar el móvil cuando recibí un mensaje creyendo que sería Lia, sin embargo mi sorpresa no se hizo esperar, pues no era Lia quien me había mandado un mensaje sino Ryujin.

Shin Ryujin:

"Buen día Lee, quería agradecerte de nuevo por lo de anoche"

"Aunque digas que estamos a mano, no lo estamos"

"Te invitaré un café como agradecimiento, siéntete libre de cobrarlo cuando quieras"

Me quede observando el mensaje y dude durante unos momentos en responderle, si soy completamente honesta anoche Ryujin me dejó una impresión totalmente diferente a la que había tenido de ella hasta el momento. Quizá fuera por lo vulnerable de la situación, o quizá porque fue la primera vez que fui consciente lo pequeña que era cuando se oculto detrás mío, pero Shin Ryujin no es la tipa ruda que pensé que sería, ella también era frágil y algo dentro mío se volvió cálido cuando la vi sonreírme de la manera que lo hizo la noche anterior.

Mordí mi labio inferior mientras observaba su mensaje, en realidad no sabía que responderle, no éramos lo suficientemente cercanas como para considerarnos amigas, sin embargo, éramos mucho más que unas simples conocidas...

— Mi niña...— llamo Angie desde la puerta de mi habitación, sacándome de mis pensamientos.— Me alegra que estes levantada...

— Recién lo hago...— le dije con una sonrisa en el rostro.— ¿Qué haces todavía en casa? Pensé que te tomarías el fin de semana libre, te dije que tenia planeado irme a lo de Lia.

— Me temo que eso tendrá que cancelarse mi Cerecita dulce.— dijo mientras entraba hasta queda frente mío y acomoda mi cabello con sus manos.— Tu abuelo me llamo temprano para avisarme que su vuelo aterrizaría pronto.

— ¿El abuelo vendrá a casa?.— dije sorprendida, por lo general el avisa un día antes su llegada.— ¿A que hora llega su vuelo?

— Verás— comenzó Angie pero fue interrumpida por una familiar voz.

— Aterrizó hace hora y media para ser precisos.— dijo mi abuelo cruzando el umbral de mi habitación con una sonrisa en su rostro.

— Abuelo...— dije acomodando el cabello para recibirlo.

Mi abuelo me miro con una sonrisa en el rostro y tendió sus brazos para que lo abrazase, sonreí ante aquello y nos abrace disfrutando del acogedor reencuentro. Habían pasado casi tres meses desde la ultima vez que lo ví, así que lo había echado de menos.