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Y llegó el día más esperado de sus vidas, unir dos almas para que solo sean una, estaban los dos parados viéndose cara a cara con los nervios de punta.
Ella tenía miedo de igual manera que él, aunque se lo venían pensado desde un tiempo atrás que serían marido y mujer seguían sin creérselo, tan pronto cuando den el si aceptó ya solo serían uno solo.
—Yo Jude Victor William Bellingham prometo amarte en todas tus etapas posibles, prometo honrarte y apreciarte siempre. Prometo permanecer junto a ti en lo bueno y en lo malo, ser un esposo fiel y amante, ser el más comprensivo en la enfermedad y la tristeza. Prometo entregarte mi alma, ser tu compañero y tu mejor amigo Y prometo amarte con toda mi alma y mi corazón por toda la eternidad. No será fácil, será muy difícil. Y tendremos que esforzarnos todos los días, pero deseo hacerlo porque te quiero, quiero todo de ti, para siempre, tú y yo.
Jude siempre se esforzaba y la fémina lo notaba, esos votos realmente los había dicho desde lo más profundo de su corazón.
—Yo Phoebe Ifeya Vloet Marques me entrego a ti este día para compartir mi vida contigo. Puedes confiar en mi amor porque es real. Prometo ser una esposa fiel, compartir y apoyarte en tus esperanzas, sueños y metas, mi voto estará contigo para siempre, cuando caigas te levantaré, cuando llores te confortaré, cuando rías compartiré contigo tu gozo. Te garantizo que habrá épocas difíciles y te garantizo que en algún momento uno de los dos o los dos querremos dejarlo todo, pero también te garantizo que, si no te pido que seas mío, me arrepentiré durante el resto de mi vida, porque sé en lo más profundo de mi ser que estás hecho para mí.
—Phoebe Ifeya Marques aceptas a Jude Victor Bellingham como tu futuro esposo.
—Aceptó—una gran sonrisa se dibujo en el rostro de la fémina.
—Jude Victor Bellinghamaceptas a Phoebe Ifeya Marques como tu futura esposa.
—Aceptó.
Los dos se agarraron de las manos.
—En el nombre del Padre, del hijo y del espíritu santo los declaró marido y mujer. Puedes besar a la novia.
Sin esperar ni un segundo más el futbolista agarró a su chica de la cintura atrayendola hacia él y uniendo sus labios formando un tierno beso.
Los invitados gritaban y aplaudían sin parar, la madre de Jude lloraba al igual que la mamá de Phoe, sus pequeños ya no eran tan pequeños ahora.
