on stage » bts; myg + kth

06.

Un suspiro largo y pesado se escapó de mis labios al dejarme caer sobre el asiento de la cafetería, con mi café helado en mano y la mochila cayendo por mi hombro derecho. Aún si había intentado enfocarme en pulir algunos aspectos de la composición nueva en la que estaba trabajando, mi cabeza parecía estar completamente en otro lado. No podía concentrarme. Y Namjoon, conociéndome tan bien y notando que a pesar de las horas encerrada en mi pequeña oficina mi gesto de frustración seguía siendo el mismo, me pidió dar una vuelta fuera del estudio para despejarme.

Estaba sinceramente harta. Aún si tenía razones suficientes para sentirme de esa manera por el tema de Yoongi y porque la estúpida rueda de prensa me había sentado de todo menos bien, sentía que la situación ya se me estaba saliendo de las manos y estaba empezando a, justamente, hacer aquello que tanto quería evitar: meterse con mi trabajo.

Después de la charla con Jungkook y Taehyung varios días atrás, una pequeña espina en mi pecho no estaba haciendo más que molestar y punzar cada vez más profundo. Y, después de dedicarle unas tantas horas mirando al techo para conciliar el sueño, estaba bastante segura de que iba más allá del tema de mi resentimiento por Yoongi.

Tal vez podría adjudicárselo a la infinidad de memorias que me habían golpeado de regreso (como bofetadas en la cara) en un periodo de tiempo tan corto; tal vez podría culpar al sentimiento de injusticia que me había guardado desde la última vez que nos cruzamos... pero quedarme con eso y hacerlo funcionar como una carta válida para atormentarme era hacerme la tonta, pues en el fondo sabía que había algo más. Algo mucho más profundo de lo que no tenía ganas, ni por asomo, de enfrentar.

Pero por el bien de mi carrera y mis composiciones, sabía que tenía que hacerlo.

Bufé y cerré los ojos un minuto, apretujándome el puente de la nariz como si eso fuese a darme un momento de paz. Sin exagerar, aquellos minutos de silencio conmigo misma se sentían como una batalla campal entre un montón de pensamientos y sensaciones a las que no tenía ni idea de cómo darles forma. Era como si cientos de pequeñas Seoris hablaran una por encima de la otra, cada una tratando un tema en específico pero sin poder darse a entender en lo absoluto. Era como lidiar con un maldito kinder.

Sonreí ante mi pensamiento y abrí los ojos, largando un nuevo suspiro que terminó en un trago largo y certero al café. De acuerdo. En ese momento no era nadie ni nada más que yo, Woo Seori, tratando de darle un sentido a la ensalada de pensamientos que no dejaba de comerme la cabeza. Y tenía que parar ya.

Tienes que agarrar tu mierda y ponerte a producir música, Seori. Este es tu sueño, ¿no? Sí, por supuesto. Vale, ¿entonces qué demonios pasa? Estabas jodidamente emocionada cuando empezaste a pensar en el nuevo álbum y ahora no puedes avanzar ni diez segundos de la primera melodía. ¿Por qué? Anda, te escucho. ¿Qué te pasa?

Un sentimiento fugaz y casi imperceptible hizo que se me apretujara el pecho y el corazón me diera un brinco poco agradable. Fruncí el ceño. En cuestión de segundos el raudo recuerdo de la canción que Yoongi había rapeado en el escenario en aquel evento al que había negado presentarme pasó por mi mente. Después la rueda de prensa. La mujer preguntando por mi relación con Dean o Namjoon, el hombrecillo cuestionándome si algo entre Yoongi y yo había ocurrido...

Apreté los labios, inhalando aire en el proceso. El pecho se me estrujó más. Era como... darme cuenta de que todo lo que valía la pena en mi carrera para otras personas fuera relevante sólo porque se trataba de Seori con alguien más. Incluso la odiosa canción de Yoongi.

Taehyung me lo había dicho aquel día (y lo había confirmado recientemente cuando me habló de lo que pasó entre ellos): si Yoongi se había desbocado así, si estaba "herido" no era necesariamente por lo que había pasado conmigo ni por mi creciente éxito, sino por mi reciente relación con Taehyung en aquel entonces. Pero de no ser así...