My Mother, My Omega (Lucemond)

Capítulo 5

El proceso de curación fue doloroso y lento, a menudo Aemond se culpaba por ser tan estúpido y caerse sobre una piedra por llorar y luego culpaba a Aegon porque no habría ocurrido si no hubiese estado en la habitación de su madre. 

Lucerys nunca había dejado su lado tal cual había predicho Aemond, siempre estuvo presente mientras se curaba y ya no había tenido el feo aroma de su tío impregnado en su piel, ahora únicamente estaba su olor impregnado en el omega.

Un año más tarde cuando finalmente pudo volver a sus rutinas, pudo montar a Vhagar y volar por los cielos libremente, al principio fue difícil adaptarse a su nueva visión, sus entrenamientos con la espada comenzaron desde cero pero fue moldeandose poco a poco, se dedicó estrictamente a sus estudios y volar sobre su dragón.

También había intentado incinerar a Aegon, pero Sunfyre lo detuvo, Aemond no quería lastimar al hermoso dragón dorado pero a Aegon si. Su madre lo reprendió cuando su tío fue a contarle como casi "lo mata" Lucerys estaba muy decepcionado de él, incluso le dio una charla del porqué no se debe matar a un familiar o sería apodado Kingslayer toda su vida.

Pero Aemond aún quería quemar a Aegon.

Lucerys le había regalado un hermoso zafiro cuando su ojo finalmente cicatrizó y pudo colocar la hermosa piedra en la cuenca vacía, su madre había dicho que se miraba hermoso, todo un alfa apuesto.

Y la obsesión de Aemond por Lucerys solo se hizo más fuerte.

Aemond había escuchado que su abuela Rhaenyra había planeado un buen compromiso con el señor del Norte para Lucerys, incluso Rhaenyra había hablado con él de que Cregan gustosamente lo recibiría como un hijo suyo y estaría al lado de su madre siempre.

- "El norte no es hogar para un dragón" - había dicho Aemond cuando le hablaban del compromiso de su madre.

Aemond se enfureció profundamente.

¿Porqué Lucerys se empeñaba en estar con otro alfa?

¿A caso él no era lo suficientemente alfa para poder complacer todos sus deseos?

Rhaenyra siempre decía que Aemond tenía miedo de que su madre lo dejara de lado por los nuevos bebés que tendría, Lucerys siempre le decía que aunque tuviese cinco bebés, Aemond será su primer hijo y nunca lo cambiaría por nada.

Alicent decía que eran simples rabietas que se pasarían cuando se diera cuenta que Cregan era un buen alfa y un buen padre.

Aemond desarrolló un nuevo odio por Cregan Stark, para su suerte, Cregan no era familia, el apodo "Kingslayer" no aplicaba aquí, fácilmente podría ser un accidente y nadie lo notaría.

Podría darle el cuerpo a Vhagar y hacer desaparecer todo rastro del señor del norte.

Sin embargo Lucerys parecía bastante complacido con Cregan Stark quién era mayor por unos años, Lucerys se veía tan diminuto a la par del alfa y parecía feliz.

Aemond hervía en furia cada que el alfa mayor se presentaba en Red Keep para pasar tiempo con el príncipe que pretendía cortejar.

Pero la gota que derramó el vaso fue cuando Aemond encontró a su madre siendo follada como una puta lasciva por Stark. El omega gemía ruidosamente mientras era azotado y follado con rudeza estampado contra la pared de uno de los pasillos oscuros.

Aemond no supo de dónde sacó la fuerza pero arrancó el enorme cuerpo del alfa de su madre, Lucerys chilló asustado cubriéndose, Aemond veía rojo, no dijo más y corrió hasta su bisabuelo y abuela para contarle como Lord Stark había faltado a su madre.