Capítulo 13

3.7K 367 67
                                    

Al día siguiente, Aemond y Lucerys volaron de vuelta a King's Landing, todos en Red Keep vestían de negro, la Reina Alicent lloraba desconsolada sobre el cuerpo del Rey, Rhaenyra a su lado la reconfortaba, una escena bastante extraña para Lucerys puesto que las mujeres seguían sin llevarse bien desde hace mucho tiempo pero parecía que al menos hicieron las pases este día. 

Por otro lado, Otto Hightower había sido apresado por atentar contra la corona y planear una usurpación según las palabras de la princesa Rhaenyra, el hombre estaba prisionero en Red Keep y no se le permitiría volver a Oldtown hasta que su juicio se lleve a cabo y su castigo sea impuesto por la Reina. 

En cuanto a Rhaenyra, ella misma mandó a buscar a Aegon para traerlo a Red Keep y hacer que doble la rodilla ante ella y hacerlo pagar por las graves acusaciones en su contra desde hace algunos meses.

Pero a pesar de todo, Lucerys no dejaba de sentirse mal por la Reina verde pues en algún momento encontraría a su hijo muerto y tendría que volver a llorar por la pérdida, pobre Haleana, ella era la única que parecía feliz con la presencia de su hermano borracho. Alicent misma rogaba a los dioses que Aegon no fuera encontrado pues la ira de Rhaenyra por la justicia de Lucerys era más grande que la ira de Viserys, Rhaenyra era un dragón protegiendo a sus crías y ella haría todo por hacer que su deuda fuese saldada, tal vez con la muerte o el envío al muro, de todas formas Alicent deseaba que su hijo se escondiera.

Mientras que Aemond lucía un poco triste por la muerte de su visabuelo pero no lo demostró mucho, se mantenía rígido cerca de Lucerys sin perderle de vista, a veces colocaba una mano sobre su cintura cosa que no pasaba desapercibida por muchos y siempre estaba al lado del Omega, Rhaenyra lo había notado pero esperaría el momento adecuado para confrontarlos.

En cuanto a Viserys, el cuerpo del difunto Rey fue quemado por el dragón de su hija y heredera mientras ella derramaba algunas lágrimas, era la segunda vez que le tocaba incinerar una pila con uno de sus padres y esperaba no hacerlo jamás con otro ser querido.

La coronación fue bastante tranquila y silenciosa, Rhaenyra recibió la corona de Reina de los siete reinos esa misma tarde frente a todos los ciudadanos y nobles, ella parecía triste y no pudo evitar derramar algunas lágrimas pero el reino celebró el inicio de su reinado, esperando que sea prospero y lleno de vida.

Los días continuaron pasando pero Lucerys no dejaba de sentirse mal y siguió siendo así, se paseaba con nerviosismo mordiendo sus uñas mientras esperaba cualquier noticia, pero nunca llegó, parecía como si la tierra se hubiese tragado a Aegon.

- Lucy... estás muy nervioso, puedo sentirlo en tus feromonas - Dice Aemond mirándolo con preocupación - ¿Qué es lo que te aflije?

- Lo que le hiciste a Aegon....

- Ah - Aemond frunció el ceño con molestia clara reflejada en su rostro por la mención del alfa fallecido - ¿Te preocupas por él aún si esta muy muerto?

- Shhh - Lucerys lo calla de inmediato - Me preocupo por ti, que crees que hará la Reina Viuda cuando se entere que mataste a su hijo - susurra - Te llamarán Kingslayer!

Aemond bufa - No es como si lo supiera en algún momento, solo tú y yo lo sabemos, no creo que le digas ¿verdad?

My Mother, My Omega (Lucemond)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora