Capítulo 12 - ¿Que viene quién?
Pues al final los vagos podían mover el culo de su cama, y ahora estábamos apoyando los culos en la arena dorada de la playa. Miriam y yo habíamos terminado la tarea milagrosamente, y luego fuimos a mi casa a dejar mis cosas y a coger otras para la playa.
Hacía un tiempo estupendo, aunque yo estaba tan acostumbrada al frío helador de Pamplona en marzo que me estaba achicharrando. En Pamplona suele hacer frío hasta mayo. Estábamos, sin embargo, a finales de marzo y en Valencia hacía un calor insoportable.
Yo todavía no me había quitado la ropa, pero todos los demás andaban en bikini y bañador. Es que estaba demasiado cómoda tumbada a la sombra y medio dormida.
-¿Lucía está dormida? -oí que preguntaba alguien.
-Es muy probable -respondió Violeta, que estaba sentada cerca.
De repente, algo muy frío y mojado me aplastó contra la toalla mientras yo gritaba, incapaz de moverme.
-¡Me cago en tus muertos, Unai! -grité al reconocer al atacante.
Todos los presentes empezaron a reírse al escucharme.
-Pero no os riáis y quitadme a este loco de encima -lloriqueé.
Al rato, conseguí quitarme a Unai de encima, pero ya me había mojado, así que me quité la camiseta y los pantalones y me puse al sol.
-¿Una de agua? -preguntó Lucas mirando al suelo.
-Por qué no, ya estoy mojada -murmuré.
Fuimos los siete al mar echando una carrera. Estuvimos metidos bastante rato, hasta que Violeta, Laura y yo acabamos congeladas. Salimos las tres y nos pusimos bien al sol para poder secarnos rápido.
-¿Por qué estaba Lucas enfurruñado ayer? -pregunté después de estar un rato en silencio.
Me giré quedando de cara a Violeta, que estaba a mi lado. Laura se incorporó para quedar las tres en una posición en la que todas pudiéramos vernos la cara.
-Verás, entre el grupo de amigos de Minho hay un chico bastante mono que se le acercó a Eunate a hablar. Ya llevaban bastantes días hablando, pero ayer se fueron los dos solos y... bueno, Lucas se enfadó -explicó Laura.
-Tampoco tiene derecho a eso -bufó Violeta.
-¿A Lucas le gusta Eunate?
-Sí -me respondió Laura-. Lleva tiempo colgado de ella, pero nunca se ha atrevido a decírselo.
ESTÁS LEYENDO
Ni lo pienses
Teen Fiction"- Bueno, por mucho que te fastidie, sé que te encanto. Veo cómo me miras desde lejos y escucho las conversaciones que tienes con mi hermana cada vez que vienes a casa, así que lo sé todo sobre ti. Lo que tú quieres es estar cerca mío todo el tiempo...