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POV Damon

Los minutos seguían pasando con rapidez mientras esperaba ansioso el colectivo que se negaba a venir, no me gustaba tanto usar el transporte publico cuando tenía mi bicicleta que me acompañaba a todas partes pero esta vez no quería desentonar con mi cita que seguro llegó en un coche de alta gama.. algo tan ajeno a mi.

quería mandarle un texto explicando la razón de mi retraso pero era imposible ya que aun no nos habiamos pasado los numeros, admito que eso fue en gran parte mi culpa que seguia insistiendo en hacer las cosas con lentitud.

veinte minutos después llegué al lugar en donde lo había citado, corrí hacia el corazón del parque rogando internamente con que él esté igual de retrasado que yo o al menos que no haya esperado mucho tiempo.
pude visualizarlo mirando el lugar con curiosidad, como si jamás hubiese estado acá, cosa que me sorprendió bastante, se suponia que era uno de los puntos turísticos más importantes de nuestra ciudad.
me acerqué a él a paso acelerado y toqué su hombro con suavidad haciendolo sobresaltar.

-perdón, el colectivo tardó una eternidad en llegar

-¿te manejas en colectivo? -su tono de voz era el de alguien sorprendido

-para ser sincero prefiero más mi bicicleta

-oh ¿y por qué no viniste con ella?

-senti que iba a ser algo incómodo ir de un lado al otro con ella al lado

-ya veo...

el silencio incómodo digno de una primera cita nos invadió por completo.

-¿la cita es acá?-preguntó luego de unos segundos con desprecio

-si, acá-le sonreí mientras me sentaba sobre el césped

-¿acá? ¿en este parque?

-si, sentate

-eh...bueno-murmuró, pero no lo hizo, se quedó en cuclillas a centímetros del suelo

-sentate

-si...-lo vi luchando con ello, aguantandome la risa, era tierno verlo luchar  -ay, no,espera, es que es de diseñador-protestó poniendose de pie

-dios mio, Graham, es un pantalón-le dije, pero me saque la campera y la coloque de su lado para que se sentara sobre ella

con un poco de desconfianza tomó asiento a mi lado

-¿y ahora que? -preguntó como un niño pequeño

-hablemos sobre algo

-¿eso se hace en una cita?

-¿nunca tuviste una cita? -bromee pero recordé que la noche del bar él mismo me admitió que jamas habia tenido una -está bien ¿de que te gustaria hablar?

-no me gusta este lugar...

-¿por qué no? es bonito

-hay muchos insectos -volvió a quejarse colmando mi paciencia, no me gustaban las personas así

-es parte de la experiencia

-¿cual es la gracia? ¿ser comido vivo por los mosquitos?

-¿en ricolandia no existen los mosquitos?

-jaja muy divertido -respondió sarcástico

-puedo ser todavía mas gracioso, solo tenes que conocerme un poquito mas

-¿es una propuesta?

-¿vos que crees? -le segui el juego, pude notar como sus mejillas enrojecian -sos muy lindo cuando te pones nervioso

PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora