Capítulo 22

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ARTHIT POV

El sol se sumerge en el océano mientras yo rasgueo mi guitarra. Estoy sentado en el borde de nuestra propiedad, con vista a la playa, con una Fender acústica en el regazo y los dedos tocando los acordes De una de mis canciones favoritas, Ever So Sweet. Los colores de la puesta de sol se extienden ante mí, arrullándome tanto como la melodía que tarareo, que funciona como mi distracción favorita para el caos de mi cerebro.

No me gusta admitirlo en voz alta, porque actuar como si no me importara juega mucho mejor con mi imagen de inadaptado, pero sé que podría ser un músico realmente bueno. La estúpida banda que empecé con mis amigos es sólo para divertirme, pero cuando estoy solo y en mis sentimientos, me gusta venir aquí y tocar para el océano.

Me gusta imaginar que soy la banda sonora de la puesta de sol, la brisa y los pájaros. La naturaleza hace su propia música, claro, pero a mí me gusta tocar con ella; darle algo de armonía.

He pasado la mayor parte del día al aire libre. Después de la locura que se produjo en la oficina de Singto, me hice a un lado, sabiendo que sólo me volvería loco verlo atender a Krist como un adorable gatito que requiere constantes mimos. Paseé por la playa, me fumé un porro, y luego conduje un rato. Consideré la posibilidad de volver a la casa de Gunsmile para seguir con la fiesta, pero decidí no hacerlo.

Definitivamente no he estado de humor para más tonterías incómodas con Paris o Namtan, o cualquier otra chica que tenga ganas de pegarse a mí.

Cuando volví a casa, Singto y Krist estaban cenando. No estoy seguro de si fue incómodo entre ellos... no me quedé para averiguarlo. Pero conociendo a los dos, probablemente no lo fue. Probablemente volvieron a su conversación de nerds mientras se tomaban de la mano y se hacían ojitos. Jugando a la casita mientras mamá no está, aprovechando la oportunidad para alardear de su relación prohibida a la luz de nuestra casa vacía.

En lugar de ocuparme de ellos, o de subir a destrozar mierda, tomé mi guitarra y salí a tocar, lo que llevo haciendo desde hace más de una hora. Me mantiene lo suficientemente calmado, pero el sombrío estado de mi existencia aún persiste en el borde de mi conciencia.

El hecho de que soy un imbécil, sobre todo.

Mis dedos trabajan en las cuerdas mientras me regaño internamente. No puedo creer que pensara que ese estúpido plan me llevaría a alguna parte. Fue una idea tonta, y me siento tonto por lo confiado que estaba al principio.

¿Fingir ser Krist para seducir a Singto? Quiero decir, realmente... ¿Qué creía que iba a conseguir?

Krist no estaba ni de cerca de estar herido como esperaba que estuviera. No es que quisiera herirlo necesariamente... pero siempre lo hago, lo quiera o no.

En realidad, sólo quería que viera que al final del día, Singto es sólo un hombre. No es un dios, ni un héroe. Él es de carne y hueso y tiene impulsos como todos los demás. No es ni de cerca tan bueno como siempre ha intentado hacer ver. Hoy hemos podido comprobarlo de primera mano en su oficina.

El tipo tiene un lado retorcido, sin duda. Me da escalofríos sólo de pensarlo.

Tragando con fuerza, sacudo la cabeza mientras mi mano se desliza. No importa lo que haya creído sentir... fue un juego estúpido que salió mal, como todo lo que hago. Ahora ni siquiera quiero contarle la verdad a Singto. No tiene sentido.

Lo único que logró mi plan fue probar lo que ya sé. Mi hermano es el niño de oro, el genio... el diamante. Yo sólo soy el trozo de carbón.

Claro, decirle a Singto que era yo con quien se acostaba cuando quería a Krist probablemente lo haría enojar, lo que podría darme una pequeña alegría. Pero en última instancia, lo empujará más cerca de Krist. Se pondrán del lado del otro por encima de mí y eso será todo.

Doble Filo [PERAYA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora