Relación familiar

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Mi relación con la familia en general ha sido distante tirando a mala, siempre fui la niña malcriada rara, berrinchuda y quisquillosa que nadie quería tener cerca. Sé que mis tías abuelas y mi prima Diana me aprecian de verdad y siempre han estado pendientes de mí, me han hecho sentir querido, gracias por eso. 

Quizá hayan otras personas de la familia a las que yo les importe pero como no me lo hacen saber de ninguna manera evidente para mí, las ignoro totalmente. Por mucho tiempo quise ser alguien de quien puedan sentir orgullo pero nunca lo logré, solo escuchaba lo que hablaban de mí en voz baja y en las quejas que le daban a Mari que luego me contaba; no era causa de alegría cuando llegaba a algún lugar, siempre me sentí como un alien, un extraño y se sentía forzada la amabilidad hacia mí. Igual esto no es raro, gran parte de las personas que somos diferentes nos sentimos de esta manera en el entorno familiar, lastimosamente ese apoyo que necesitamos y deberíamos recibir se nos es negado, somos totalmente incomprendidos.

Al día de hoy mi familia se basa en 5 miembros: Vivi (mi novia); Diana (mi prima); Le Niñe y La Niña (mis peluches de soporte emocional), y yo.

Porque la familia de sangre es un accidente, pero la familia que elegimos y formamos en la más importante y valiosa, es aquella que te ama y te acepta por quien eres, quien está contigo en los buenos momentos y se alegra de tus alegrías y te acompaña en las crisis y caídas sin juzgarte, que te dicen que están ahí para sostenerte cuando te caigas y te ayuden a levantar cuantas veces sea necesario. A esta pequeña familia la amo mucho y agradezco infinitamente que hayan estado conmigo en todo momento; también les pido perdón por las molestias que les he causado.

Siempre soñé con una linda familia, ahora la tengo, no como la que soñé sino más hermosa. Deseo felicidad para todes mientras vivan.

En la mente de Taylor MinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora