Capitulo 7

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Esta semana fue la más difícil y extraña de todas. Había tenido que estar pendiente de Childe, dormir con él y estar con él cada vez que estaba mal debido a lo sucedido recientemente con su padre. Sus hermanos y su madre habían venido a verlo a mi casa y me pidieron que lo cuidara bien, que por ahora no podría volver hasta que el enojo de su padre se pasará.

A Childe le había dicho que podía quedarse aquí si así lo quería y dejar de preocuparse, pero él decía que quería estar con sus hermanos y estar lejos de ellos sería demasiado difícil así que deje de insistir.

Estábamos en vacaciones de invierno ahora mismo, lo cual me servía para ayudar a Childe y se pudiera olvidar de lo que había pasado. Kazuha venía a mi casa bastante seguido estos días, ya que decía que se aburría al estar solo durante casi todo el día, pues su hermano se fue de viaje con sus amigos y su madre estaba ocupada con el trabajo, así que estábamos juntos los tres como siempre hablamos estado.

Kazuha últimamente había estado mucho más cariñoso conmigo, se las ingeniaba para estar cerca de mí cada vez que podía y sinceramente no me molestaba en lo más mínimo, ya que de cierta forma, me había acostumbrado a tenerlo cerca y que de vez en cuando me diera abrazos, me tomara del brazo e incluso se despidiera con un beso en la mejilla. Le había hablado a Childe de esto, pero él solamente sonrió de una forma extraña para luego decirme que me daría cuenta tarde o temprano de lo que pasaba. Los dos eran muy raros.

Ahora mismo estaba recostado en el sofá, bueno, más bien mi cabeza estaba en las piernas de Kazuha mientras veía mi celular hablando con mamá de algunas cosas, sentía como el contrario jugaba con mi cabello, pero sé que decirle que parara él solo haría oídos sordos así que no me esforzaba en hacerlo.

— ¿Tu madre de nuevo llegará tarde?

— La pregunta está de más, sabes que siempre llega tarde o a veces simplemente no llega ¿Por que?

— Por nada, a veces me sorprende que estés tan acostumbrado a esto. — Hice mi celular a un lado y lo miré a los ojos para luego encogerme de hombros.

— Llevo años así, además no es tan malo estar solo, aunque ustedes pasan aquí metidos así que no me siento tan mal.

Él no respondió nada y solo lo vi sonreír mientras quitaba los mechones de cabello de mis ojos, aquella acción me hizo remover algo dentro de mí, siempre que Kazuha hacia algo así estaba esa misma sensación de por medio ¿Qué era? Se sentía bastante extraño y me ponía nervioso, como si tuviera miedo de que el contrario lo notará pero ¿Por qué?

Salí de mis pensamientos por un momento al sentirlo tan cerca de mi rostro, me encogí un poco en mi lugar y coloqué una de mis manos en su rostro empujando este hacia arriba.

— ¿Qué estás haciendo? —Mi voz salió un poco temblorosa debido a los nervios, carraspee un poco mi garganta cuando tomo mi mano alejando esta de su rostro.

— No estoy haciendo nada. — De nuevo tenía esa sonrisa de inocente en el rostro, rodee mis ojos para luego soltar su agarre de mi mano y seguir viendo mi celular.

Nos quedamos así un rato, hablando de cualquier cosa mientras yo seguía en mi celular pero prestándole atención al albino en todo momento. Nuevamente lo sentí cerca de mi rostro, pero esta vez no me dejó reaccionar cuando sentí sus labios contra los míos.

Todo pareció detenerse de repente, con ello mi cerebro también dejó de procesar lo que estaba pasando. Poco a poco comencé a reaccionar y el calor en mis mejillas comenzó a hacerse presente. Nuestros labios estaban quietos, solo se estaban tocando, joder, uno de mis amigos me estaba besando ¿Qué se suponía que debía hacer?

¿𝐋𝐨𝐯𝐞? 𝑌𝑒𝑠, 𝑙𝑜𝑣𝑒. [Kazuscara]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora