vergüenza

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  Llego el fin de semana y estuve en la casa de Kingpin. No quería, pero lo hice. Por que a pesar de todo , el fue el único que cuido de mi y ahora que perdió a lo que más amaba , me tocaba a mi.

Traté de hacer cosas con él y prepararle comidas, pero rechazo todo.

Y así como llego, el fin de semana acabo y yo estaba preparando todo para volver a la escuela.
Esta vez decidí irme caminando. Solo eran 15 minutos de camino, supongo que no es mucho.

Estaba por entrar a la escuela cuando escuché la sirena de una patrulla.

— Tienes que decir "Yo tambien"— voltee y vi un chico, era Miles.

— ¿En serio?— preguntó el chico

— Quiero escucharte... — luego de un rato de pelea, el chico lo dijo.

— Papá, te quiero.— dijo y sonreí un poco. Ya es la segunda vez...

  Días después, estaba de camino a mi clase cuando me crucé con Miles. Sin querer chocamos y tumbó mis libros. Desde el día qué pasó la vergüenza, no lo había visto.

— Perdón— dijo con una sonrisa apenada.

— No te preocupes— dije mientras recogía los libros. El trato de ayudarme pero se le resbalaron de la mano.

— Perdón otra vez.— dijo

— Tranquilo— le dije , ¿por que suda tanto?

— Oye , nunca me dijiste tu nombre.— me dijo mientras terminaba de recoger mis libros. Nunca se lo había dicho.

— Soy _____, _____ Correa — le dije y el sonrió.

Luego de recoger los libros, él se despidió de mi y tocó mi hombro. Cuando iba a sacar su mano, no pudo.

— No puede ser— susurro mientras trataba de sacar su mano de mi abrigo. Estaba completamente pegada.

— Solo sácala— dije mirando a todos lados. Todos nos estaban viendo.

— No puedo— me dijo alterado

— Relájate— le dije pero no pudo.— Tranquilo, solo llévate mi abrigo —dije quitándomelo— y me lo devuelves cuando se te despegue o cuando nos veamos para otra clase— dije y él asintió.

Seguí mi camino sin mirar atrás. Eso había sido un poco extraño, pero lo ignoré. Me coloqué mis audífonos y comencé a escuchar música.

Play in Apple Music Sunflower

Mis pies llegaron automáticamente a mi habitación. Deje todas las cosas en el suelo y me acosté en mi cama.

Cuando mire al techo, casi me desmayo.

Pause la música y luego de un rato analizando, hable—...¿Spider-man? No puede ser.— para

A pesar de que Kingpin lo odia y se esmera en culparlo, no le guardo rencor. Mi madre adoptiva no murió por su culpa, si no por la de Kingpin.

— Necesito tu ayuda. Tu padre creó una máquina peligrosa y necesito desactivarla.— me dijo directamente

— No entiendo.— dije confundida

— Tu padre antes de morir creo una máquina que ahora la tiene Kingpin. Pero es mucho más grande.— dijo haciendo un ademán con las manos y volvió a su explicación— Pues Kingpin la está usando para volver a recuperar su familia y puede matar a muchas personas.— me explico.

— ¿Y para que me necesitas?— le pregunte y entrecerró los ojos.

— Te he estado investigando y eres muy inteligente. Sé más de ti de lo que piensas. — me dijo — Necesito tu ayuda. Si me compruebas que puedes hacer esto, te buscaré en un futuro.—

— ¿Que tengo que hacer?— pregunte y saque mi laptop.

Necesito que crees un chip que desactive la máquina.— me dijo — Necesitas hackear información del laboratorio y... — en un abrir y cerrar de ojos ya tenia todo.

— ¿Tienes un chip?— pregunte y me extendió uno.

— Te buscare de nuevo, me serás de gran ayuda.— dijo y se fue.

Cuando se fue, procesé todo. ¿Cómo Kingpin es capaz de hacer esto? ¿No ha visto las consecuencias? ¿No vio lo que le pasó a mi padre?

One Day || Miles Morales || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora