new spiderman?

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No se cuanto tiempo me desmaye, pero al parecer fue mucho.

— ¿Estas bien?— un policía me ayudó a levantarme.

— Si, gracias— le dije y di un paso pero mis piernas fallaron un poco. Tal vez mis células se regeneren rápido y tenga súper fuerza, pero es la primera vez que recibo un golpe tan fuerte.

— ¡Necesito apoyo!— escuche al policía decir y cuando mire a su dirección , vi a Kingpin peleando con Spiderman...

¿¡Spiderman!?

Me quede analizándolo, pero este Spiderman no era igual al otro. Era más ¿pequeño? y su traje era negro con rojo, no como el "común".

El policía y yo estábamos impresionados por la pelea. Vimos cómo Kingpin al parecer noqueó al nuevo Spiderman.

—Levántate, Spiderman. Levántate. ¡Rápido!—

No veíamos casi nada, o por lo menos yo no. Pero luego, una fuerza nos atrajo hacia el centro.

De repente , la máquina explotó.

Miles:

Acabe con todo esto.

Luego de enredar a Kingpin en la telaraña, decidí revisar si quedaba alguien más entre los escombros.

Vi, a lo que a mi parecer, era una mujer. Saque unos bloques gigantes hasta que la vi.

— ¿!______!?— asustado, la tome entre los brazos y la lleve a una ambulancia rápidamente.

¿Que hacia allá abajo?


______ : días después...

— Buenos días mi amor — hablo Rio, mi enfermera.

Luego de que la máquina explotara , estuve en coma por una semana. Mi cuerpo entró en reposo debido a los golpes que recibí en un solo día. No estaba y no estoy preparada para tanto.

Hola Rio, ¿cómo estás?— le pregunté en español.

Me gustaba hablar con ella. Era una mujer dulce y amorosa. Me sentía cómoda. La conocía de hace días, cuando me levante del coma y ella ha sido un amor conmigo.

Cansa' pero ahí— me respondió, ya me estaba acostumbrando a sus frases en puertorriqueño.

— Me alegra— reí un poco.

Ay mi amor, tengo que llamar al muchachito este, dijo y tomó su teléfono. — dame un momento.—

Me quede esperándola y encendí la televisión.
Estaban mostrando otra vez al nuevo Spiderman. Me recordaba tanto a Miles...

— Señorita Correa— un doctor me saco de mi trance. — Le daremos de alta mañana ya que salió bien en todos los estudios. También, tendrá citas con un psicólogo y un trabajador social en la escuela.— dijo y cuando le di las gracias se fue.

Río volvió a entrar a la habitación.

— ¡Escuche la gran noticia! — dijo y me abrazo. — Te daré mi dirección para que me visites cuando quieras mi corazón. — dijo sacando un papel y apuntándola. — Eres bienvenida siempre.— dijo abrazándome.


Al otro día... salí del hospital y fui directo a la escuela.

Entre y todo se sintió... normal.

—¡_____!— llamó alguien a mis espaldas y cuando voltee vi a Miles.

— Hola Miles— el me devolvió el saludo y esa pequeña acción me puso feliz.

Tal vez no todo era tan normal.

—¿Está todo bien?— pregunto — Estuviste casi dos semanas fuera.—

— Sí... si quieres podemos hablar luego en la biblioteca y estudiar un poco.— le dije y el acepto.

Fui a mi habitación para luego bajar e ir con el trabajador social.

Tuvimos una conversación corta donde él me decía que trabajaba para Kingpin, bla bla bla , que Kingpin me proveerá alimentos, casa y dinero, bla bla bla y que no tengo de que preocuparme. Le di las gracias y salí corriendo hacia la biblioteca.

Cuando llegue, Miles me estaba esperando con un chai tea y un pedazo de pastel.

— ¡Hola!— dijo alegre y extendiéndome la comida — Me alegra que estes bien. — dijo y le sonreí.

Con Miles sonreía más de lo normal...más de lo que he sonreído en mi vida. Él me hace sentir como si lo conociera de hace años e igualmente era mi único amigo, supongo.

— Gracias. Soy una chica fuerte.— le dije y el me otorgó una sonrisa. Sentí algo en mi estomago cuando lo vi...

— Sabes— me saco de mis pensamientos.—, necesito ayuda en Español de nuevo. Cuando mamá se entere que tengo una B, me matara.— dijo e hizo una mueca de miedo.

Volví a reír y de eso consistió todo el tiempo que pase con él.

Así estuvimos días. Yendo a la biblioteca , el siempre esperándome con mi chai tea y un pedazo de pastel, conversando y riéndonos de cualquier tontería.

— Oye, mamá hará comida hoy y... quisiera invitarte a casa, tal vez te guste mucho. — me dijo y sentí mis mejillas arder.

— Estaré allí...

One Day || Miles Morales || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora