Rivales

Capitulo 25

    Cómo Jennie sospechaba, la semana en la escuela había sido un verdadero
infierno. No solo por el hecho de que cada vez que Joy la veía, se hacía la
enojada y le soltaba frases como veneno, además de los golpes y empujones de sus amigas.

  Tampoco porque Rosé la había vuelto a molestar, esta vez peor que
nunca. La verdadera razón era que, Lisa no la miraba. No le hablaba, la
ignoraba totalmente, ni siquiera se limitaba a fastidiarla junto a Rosé, era
como si la neozelandesa hubiera dejado de existir para la castaña.

  En estos momentos, estaban en clase de Historia y Lisa se encontraba
sentada, unas mesas delante de ella, ignorándola al igual que toda la
semana. Jennie suspiró y extendió los brazos sobre la mesa, la clase era muy
aburrida en su opinión.

  -No me ha insultado ni una vez, Jisoo. Es como si de repente yo fuera
invisible -se quejó jugando con el lápiz, con la mirada clavada en la espalda
de la castaña.

  -Puede que tenga mucho con los deberes y el equipo de animadoras -
comentó su amiga, pero después de ver a la castaña, pareció reflexionar-.
O... puede que esté enojada.

  -¿Enojada? ¿Por qué? -bufó fastidiada, Lalisa Manoban era un dolor de
cabeza.

  Jisoo tardó unos minutos considerando su respuesta, ella también había
estudiado el gran cambio de actitud de Lisa estos días y tenía una pequeña
teoria, una aue nunca se le hubiera ocurrido antes, pero ahora las acciones
de la castaña hablaban por si solas.

  -Puede... que esté enojada contigo, por besar a Joy.

  -¡No la besé! -repitió-. Y además, ¿eso qué tiene que ver?

  -No sé, puede que no le gustara que abusaras de su amiga -comentó
pensativa, sin querer llegar a la conclusión más obvia.

  -Yo no la besé -volvió a murmurar, pero Jisoo ya estaba perdida en sus
pensamientos, últimamente siempre estaba así.

     -... y deberás formar parejas para el siguiente ensayo de 200 páginas, con
dibujos incluidos, que tratara sobre la Segunda Guerra Mundial -explicó la
profesora, logrando que todos los alumnos soltaran un quejido-. Dejen el
drama, comenzaré a elegir las parejas...
Dijo el nombre de varios estudiantes, pero Jennie no podía pensar, era su
oportunidad. Rezó todas las oracionds que sabía y cruzó hasta lo dedos de
los pies.

   Quería que le tocara con Lisa, debía tocarle con Lisa. Esconidió su
cabeza bajo los alumnos para evitar el contacto visual con la profesora y
que no la escogiera. Sus esperanzas aumentaron cuando otra chica fue
elegida con Jisoo, una menos.
La profesora duró un rato diciendo nombres, hasta que llegó al turno de
la castaña.

  -Lalisa Manoban... -empezó a buscar con la mirada a la candidata yy Jennie
estiró el cuello, rezando por su suerte-... con Jennie Kim.
Ambas dieron un brinco en su asiento.

  -¡De ninguna manera!

  -¡Lo que usted ordene!

  Lisa fulminó a Jennie con los ojos mientras la neozelandesa mostraba una
sonrisa burlona.

  -Es parte del trabajo. Tienen que hacer el ensayo juntas, no quiero
discusiones -dijo zanjando el tema, mientras el rostro de Lisa se fruncía.

  -No pienso trabajar con este fenómeno -declaró, cruzándose de brazos, Jennie alzó las cejas, logrando que se irritara más.

  -El lenguaje, joven -avisó la profesora, para luego observar a Jennie-.
¿Usted, señorita Kim, tiene algún inconveniente?

  -Para nada -la neozelandesa le regaló una de sus sonrisas más encantadoras,
haciendo rabiar a Lisa.