Centro Kawasaki. Rehabilitación y reinserción de menores

Equilibrando horarios

Izuku no se lo podía creer

Después de todo lo que pasó en la prueba de entrada a la UA, pensó que simplemente no entraría.

Pero ahí estaba ese disco holográfico que le dijo que lo había logrado, que había conseguido entrar en la escuela de sus sueños....

Los ojos se le empezaron a llenar de lagrimas mientras la sonrisa en su cara se ensanchaba más y más.

Sí, iba a ser un héroe, iba a cumplir su sueño.

Ese día se levantó temprano para llegar a clase.

El hecho de que parecía por fin haber hecho amigos chocó con el que Bakugo estuviera en su misma clase.

Obviamente cuando le gritó que esperara se fue corriendo para evitar la posible paliza que le recibiría.
No por nada Kacchan le había intentado pegar en clase, y aún recordaba con cierto temor todas las palizas de después de clases.

Y no tenía tiempo para ocultar bien sus heridas, el tiempo de visita al centro estaría cerca de acabar, y simplemente quería sorprender a los niños con una visita sorpresa.

- H-ho-hola- saludo algo cansado el peliverde.

- Hombre, si que has vuelto - contesto con una sonrisa Arbe, uno de los profesores.

- Sí - respondió tratando de recuperar el aliento.

- A que has venido?- le preguntó este

- Pues -

- Me temo que el tiempo de visitas acabo hace unos 5 minutos, señor Midoriya - contesto Sakura, la  subdirectora.- Hablando de ello, es hora de que charlemos sobre los nuevos horarios que tendrás que seguir, ya que ha empezado sus estudios en la academia -

- Si señora Sakura -

- De acuerdo. Sí bien no puedes mantener este empleo mientras estés estudiando, eso no significa que no puedas venir en calidad de visita, pero eso sí, tu contacto con los niños se verá más limitado. Aquí tienes la lista de normas a seguir en cada visita. Seran solo los sábados por la tarde, entendido?-

- Oye Deku - llamó Uraraka- te gustaría quedar mañana por la tarde?

- Ah, Ehm- respondió nervioso el pecoso - verás es que... Tengo planes.

- Oh-

- P-pero pasado mañana me viene bien - contesto rápidamente.

Dicho esto, se alistó y se fue corriendo camino a casa.

Afortunadamente su madre pasaría el día con su tía Mitsuki, así que no tendría que responder a sus preguntas sobre dónde había pasado la tarde.

Más que nada por no saber cómo reaccionaria su madre.

Los niños estaban esperando, los más pequeños ansiosos.

- Eh, venga, calmaos de una vez - ladró Dabna

- Pero tardan mucho- gimoteó Haru

- Creéis que le gustará mi dibujo?- pregunto dubitativo Copsi, el cual no paraba de dar vueltas por la habitación.

- Si no os calmais no dejarán que entre, y no pienso esperar otra semana para una visita suya por culpa de unos mocosos hiperactivos- dijo Filo

- Es que tardan un montón por culpa de esos 'protocolos'- habló Eileen

- Sí, me preguntó porque será - dijo sarcásticamente

- Eh, que estás insinuando? - pregunto furioso Daban

- Bueno, que no gastarían tanto tiempo en registros si no fuera porque "ALGUIEN" fue pillado con algo de contrabando -

Antes de que estallará una pelea la puerta metálica se abrió con su habitual estruendo, y entró el peliverde con su sonrisa y , para disgusto de un par,vistiendo un uniforme de la UA.