Capítulo 3

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Estaba parada frente al trono y no la intimidaba su 'magnificencia", trataba de memorizar cada Targaryen que se sentó en él, debía nombrarlos ante la Septa. Tuvo tres semanas entras para estudiar y dejó todo a último momento... jugar, escuchar conversaciones privadas y hacer travesuras era mucho más atractivo que un libro sobre reyes engreídos que no reinaron sobre su familia.

  --Es bonito, ¿verdad?-- La voz de Aegon la desconcentró.

El príncipe dejó de lado su enojo por los arruinados aceites refinados, los cuales debió botar en su totalidad debido a que la pequeña olvidó cuáles frascos contaminó. Cuando pasaron los días y empezó a verse en el espejo, le gustaba el corte de cabello, le sentaba mejor que los rizos, según él, aunque su prometida odiaba el corte.

  --¿Qué?-- Preguntó ella. La única vez que trataba de ser responsable la interrumpían. Bien... no era su culpa, era una señal de los dioses.

  --El trono.-- Respondió él.

Aly arrugó la nariz. --No, es demasiado feo, su color es horrible. Sí es intimidante y luce como una muestra del poder de tu familia pero no es bonito. Deberías cuestionarte tus gustos.--

Aegon sonrió. --¿Sabes quien será la próxima persona en sentarse allí?-- Le preguntó con una sonrisa pícara.

Ella asintió. --Tu hermana Rhaenyra.-- Él se puso serio y le dio un golpe en el hombro, ella se quejó. --Auch...-- Lo miró molesta.

  --¿Con quién vas a casarte?-- Le preguntó aleccionándola.

  --Con Aemond.-- Dijo sin entender su punto.

  --¿Quién debería reinar?--

  --Rhaenyra.-- Respondió otra vez, él bufó.

  --A ver, ¿quién es hermano de Aemond, tu futuro esposo, quien será tu familia también?-- La miró con ojos atentos.

  --Tu.-- Respondió con obviedad mientras rodaba los ojos.

  --Entonces, ¿quién debería sentarse en el trono?-- La miró mientras cruzaba las manos en la espalda.

  --Rhaenyra.-- Dijo convencida. --No entiendo lo que quieres decir.-- Subió y bajó sus hombros despreocupada. Dio media vuelta y se fue, dejándolo con cierta molestia, debía ser entrenada con prontitud, nunca se sabe cuando pasarán las cosas más deseadas y sacarle a Dorne de su interior y todos esos conceptos sobre a quien pasa el trono sin importar el sexo era necesario para que tome partido por Aegon ya que, al parecer, la princesa tenía definidas sus inclinaciones, siempre estaba del lado de las mujeres y en contra de los hombres. Ceryse siempre repetía "pobre del príncipe Aemond, su esposa será un hombrecito sin gusto por la delicadeza y el arreglo personal. Con ese salvajismo y disgusto por nuestros grandes reyes hombres hasta creo que puede ser de las deshonrosas e impúdicas que gustan de las damas". Aquello no molestaba a Aegon, le daba igual, pero quería contar con su poder y apoyo.

Debían eliminar toda posibilidad de que Dorne apoye el reclamo de Rhaenyra cuando llegue el momento...

Pero el príncipe debía preocuparse de cosas más importantes ahora...

La insistencia de Aegon por casarse tan rápido empezaba a preocupar a la reina, no le agradaba del todo su nuera pero era necesaria. Si su instinto no fallaba, algo pasó, razón por la cual su hijo quería unirse en matrimonio con tanta prisa.

Luego de obtener el Norte, debía buscar la manera de deshacerse de ella sin perder el apoyo de los Stark y sus vasallos, lo tenía claro.

Una víbora huele a kilómetros a otra...

 𝘍𝘪𝘳𝘦 𝘖𝘯 𝘍𝘪𝘳𝘦[En edición] ۞ Targaryen - Martell - StarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora