Fairy Tale - Omegaverse

10. Así te conocí.

Mikage Reo, un omega empresario, famoso por ser uno de los omegas mas codiciados en todas partes, siempre se caracterizo por ser paciente, en parte humilde, con un gran corazon para ayudar aquellos que lo necesiten. Un omega el cual se sentia unico e independiente, no necesitaba de un alfa para vivir o ser el mismo. O eso pensaba el hasta que lo conoció...

Era una mañana de sábado, estaba en su primer semestre de la carrera de administración de empresas cuando lo vio, era enorme, un chico tan blanco como el papel, con un cabello albino y ojos grises, su estatura podía alcanzar casi los dos metros, estaba rodeado por varias betas y Omegas por qué, solo un ciego no vería lo apuesto que es ese alfa, en su interior se sintió algo celoso de que tantas mujeres se le acercarán a ese chico, era como si su Omega lo reclamará como suyo cosa que le extrañaba mucho, por qué su Omega generalmente rechazaba a cualquier alfa que se le acercarán, pero el no estaba cerca y su Omega lo reclamaba, ese alfa era suyo, lo quería.
Con paso firme y lento se acercó al alfa haciendo que la mirada gris del más alto, claramente su aroma salía lentamente seduciendo al alfa, provoco que el contrario también dejara salir su aroma, ahora entendía por qué los aromas tan comunes le causaban náuseas, el aroma de ese alfa era diferente a lo que estaba acostumbrado, era como estar en un bosque viejo con un enorme árbol de sándalo, seguido de eso el suyo el cual parecía un enorme prado con hermosas flores de loto flotando en un pantano, un aroma bastante antiguo y sin duda hermoso, los toques del aroma a sándalo y flor de loto rápidamente se mezclaron haciendo que las Omegas que estaban alrededor del alfa rápidamente se fueran al notar que no había oportunidades para ellas, además las betas sin sentir el aroma pero viendo la tensión que había entre alfa y Omega también procedieron a dejarlos solos.

-Y pensar que odio la idea de tener un Omega, pero viéndote... Ya no la odio tanto.- Aquella voz se notaba un tanto cansada y desinteresada, pero la clara mirada del más alto se mostraba asombrada y al mismo tiempo llena de cariño.

-Mikage Reo, para ti solo Reo.- Guiño su ojo mirando a aquel alfa el cual lo invadió una pequeña sonrisa, una que lo hizo ver aún más hermoso de lo que era.

-Nagi Seishirou, para ti, el amor de tu vida.- el humor que uso el alfa le hizo sonreír ampliamente, le extendió su diestra al más alto y levantó su cabeza lleno de soberbia siendo está tomada por el mayor el cual poso sus labios en el dorso de esta sintiéndose tan bien de poder sentir aún más cerca el olor tan exquisito de su Omega.

-Entonces, amor de mi vida, ¿Que estudias?- pregunto retóricamente, no sabía que decir, no sabía que hacer, era algo tan mágico, sus olores mezclándose, el pasillo totalmente solo ignorando el hecho de que un par de destinados acaban de encontrar su vida junto al otro.

-Marketing, pero es un fastidio estudiarlo.-...

(Pd: no quiero escribir todo el daño que les haré a mis papis... Estoy llorando.)