Algún día...

No se lo cuentes a nadie

Riiiiiiiiiiinnnnnnnnnnn
Hora de entrar en clase.
¡Menuda desgracia!
No veía a Rebeca por ningún sitio. ¿Dónde estaba?
Entré en clase rápidamente, porque, debido a que me había dormido, llegaba tarde. Tocaba matemáticas.
- Señorita Valeria, llega tarde. ¡Otra vez! A la siguiente tomaremos serias medidas. - me gritó mi profesor de mates llamado Federico.
Menudo nombre más feo.
- Y ahora siéntese y no moleste más- me dijo Don Federico.
Pesadooo.
En mi clase, nos sentábamos por parejas. Yo iba con Rebeca. Lo extraño, es que ella no se encontraba en su sitio habitual. Con mi mirada di una vuelta a la clase, para encontrarla.
¡No puede ser!
Rebeca estaba sentada al lado de Naiara.
¿Pero a esta que le ha pasado?
Seguro que la falsa de Naiara ya le había comido la cabeza con sus mentiras. Típico de ella. Cuando me llevaba bien con alguien, siempre intentaba que ese alguien me odiara, o simplemente, pasara de mí.
Cuando se dieron cuenta de que yo estaba allí presenta y las estaba observando, Rebeca me miró y después bajó la mirada. Naiara hizo una de esas sonrisas malvadas que siempre hace.
- ¿Encuentra lo que busca? - me preguntó con sarcasmo Don Federico.- Haga el favor de sentarse.
- Lo siento.- me limité a decir yo.
La clase de matemáticas se me pasó volando. Porque, aunque no me gustaran mucho, se me daban bastante bien. Aunque, también dependía en el día en el que estaba.

Lunes:
Propósito: empezar la semana con positivismo (o al menos intentarlo)

Ahora teníamos un recreo de 15 minutos.
Decidimos sentarnos todos juntos en un círculo y hablar sobre lo que íbamos a hacer en verano.
Yo me senté junto a Vicky. Y Rebeca como no al lado de Naiara, y sus tres perritos falderos: Sasha, Duna y Kristal.
Sasha, Kristal y Naiara, eran inseparables. A mí, Sasha y Kristal me caían muy bien. De hecho, hace sólo un año, ellas dos, Vicky, Rebe y yo, éramos mejores amigas,pero cuando llegó Naiara nueva al colegio, todo cambió. Nos separó en dos grupos. Y los tiene a los dos controlados.
Sé que esconde algo. Lo sé, porque hace poco, su "mejor amigo" Jonas, tuvo esta conversación conmigo:

FLASHBACK

Jonas: - Valeria, me han dicho que te gusta alguien. ¿Quién es?
Valeria: - Lo siento, pero no te lo puedo decir. Las paredes tienen oídos, y no me puedo fiar de todo el mundo. Además, ¿por qué lo quieres saber?
Jonas: Simplemente curiosidad.
Valeria: Pues lo siento mucho, pero no.
Jonas: Tienes que confiar en mí. Tú no sabes cuántos secretos me ha contado Naiara, y ¿acaso te crees que los he contado a alguien? Pues no. Soy un buen amigo. Además, sinceramente esos secretos que me ha contado sobre ella, son demasiado fuertes, ya que si la gente se enterara, se arruinaría su popularidad y nadie querría ser su amiga. Pero bueno, esa es otra historia.
Valeria: ¿Cómo de fuertes has dicho que eran?
Jonas: Lo suficientemente fuertes como para que me de miedo contarlos porque me quedé boquiabierto cuando me lo contó y porque tampoco quiero arruinarle la vida a nadie.

FIN DEL FLASHBACK

Al principio, después de que me lo contara, me quedé alucinada. No podía creerme lo que acababa de pasar. Pero después, me preocupé bastante. ¿Y si le había pasado algo malo? ¿Debería ayudarla?
¡Por favor! Te ha hecho la vida imposible desde cuarto de primaria y tú la quieres ayudar. Estás muy mal de la cabeza. Enserio, no te entiendo.
Pero, yo necesitaba saber lo que pasaba.
Aunque no sé por qué, sobre todo, quería ayudarla.
No conocía esta parte de ti Valeria.
Nuestras madres eran muy amigas, y quedaban mucho, así que algún día que nos viéramos fuera del colegio se lo preguntaría. (...)

Bueno, continuemos con lo que estábamos. Nos sentamos en el círculo y empezamos a charlar. Cada uno, contó a dónde se iba a ir.
De repente Naiara se empezó a reír muy fuerte y alto. Su risa era muy parecida a la de un asno. Creo que son familia.
Yo no sé como los demás no se dan cuenta de lo falsa que es toda ella. Su vida es una mentira. Y lo peor de todo, es que a parte de mentir a los demás, se miente a sí misma haciéndose pasar por alguien que no es.
- ¿Qué pasa? - le preguntó Neil.
- Pues que Rebeca me ha contado un secreto muy gracioso. ¿A qué sí mi vida?- dijo Naiara mirándome.
- Jajaa zip- asintió Rebe.
Naiara, de pequeña era muy sosa. Jamás se reía, nunca sonreía. Por eso, yo fui con ella y nos hicimos mejores amigas. Quería ayudarla. Pero cuando a ella le pareció apropiado me aisló totalmente como si fuera un papel usado. Esto lo hizo también con Duna. Según Duna, Naiara era una bruja. Pero ahora parece que eso no le importe mucho.

Cuando sonó el timbre para volver a clase, decidí hablar con Rebeca. Necesitaba saber qué era lo que le pasaba, e intentar solucionarlo.
- Rebeca, necesito hablar contigo...
- ¿Qué quieres?
- Necesito saber qué es lo que te pasa conmigo.

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Nota de autora:
Holaaaaa!!!
Sé que hace tiempo que no escribía nada y lo siento de verdad.
El problema era que estaba en la recta final del curso y tenía los exámenes finales.
Necesitaba estudiar.
Pero ya llega el verano. Y ahora escribiré muy a menudo.
A partir de ahora mi prioridad seréis vosotr@s mis... ¿Cómo os puedo llamar?
¿Qué os parece mis ositos?
__________
¿Qué os parece Valeria?
¿Qué os parece Naiara?
¿Qué creéis que le ha pasado a Rebeca?
Comentad plis y prometo responder a todos los comentarios mis queridos ositos.
Os quiero! Nunca lo olvidéis.
¡La historia ha llegado a las 200 leídas! Sé que no es casi nada, pero a mí me hace mucha ilusión porque poco a poco, la historia va creciendo. ¿Y sabéis gracias a quién es...? ¡A vosotr@s!
Es un honor escribir para mis ositos ♥♥♥♥♥♥♥