~Solo una mordida~
Mientras seguía a Eden para reunirnos con Dayn, vi a alguien conocida.
Alicia: - ¿Doctora...? Eden, ¡regresaré en un momento!
Eden: - ¿Qué? Dayn me dijo que te llevara de inmediato... ¿Es algo urgente?
Alicia: - Muy urgente. Tengo que ir al baño.
Eden: - ¿Estarás bien sola?
Alicia: - No soy una niña... Tan solo espérame aquí.
Eden: - ...
Alicia: - Eden, ¿quieres que te dé palmaditas en la cabeza?
Eden: - Qué repentino... Alicia, ¿estas de mal humor?
Alicia: - Tan solo me preocupas.
Eden inclinó la cabeza de costado, y yo estiré la mano hacia él. Le peiné el cabello con los dedos y luego le di unas palmaditas en la cabeza.
Eden: - Alicia...
De repente, Eden se cubrió la cara con las manos, y yo me detuve. Confundida, le di unos golpecitos en la mano e intenté mirarle la cara.
Alicia: - Eden, ¿Qué ocurre? Déjame verte. Si te escondes así. solo me harás sentir más curiosidad.
Eden: - Te esperaré aquí, tú ve. ¿Sabes? Me preocupas.
Eden: - ..... Alicia... Hasta yo tengo problemas para contenerme a veces.
Se quitó las manos de la cara lentamente, y nuestros ojos se encontraron. Sus ojos, de un rojo oscuro, temblaban, y sentí que su mirada podía atravesarme.
Eden: - ¿Acaso quieres poner a prueba mi paciencia?
Alicia: - No... eso no es lo que... No tenías de qué avergonzarte.
Eden: - Sí, lo sé... Ve, Alicia.
Ignore el sentimiento de incomodidad que empezaba a invadirme y me fui rápidamente tras la farmacéutica. Pero cuando estaba empezando a subir las escaleras. ¡¡¡BLAM!!! ¡De repente se cerró una puerta y alguien me apretó contra la pared!
Hice mucho entrenamiento aquí, en la mazmorra. ¡no debo desperdiciarlo!
Mientras el atacante intentaba acercarse, contrataqué y levanté la mirada...
Alicia: - ¿Qué demonios...? ¿Gray y... la doctora?
Gray: - Ah, y yo que me preguntaba quién nos seguía sin siquiera intentar ocultarse... No esperaba que fueras tú.
Alicia: - No sabía que estabas con la doctora...
MI contrataque no tomó por sorpresa a Gray, quien había levantado la guardia. Nos sujetábamos el uno al otro, y nuestras miradas se encontraron.
Gray: - Te pido disculpas. Mi intención nunca fue amenazarte. De hecho, es un alivio que hayas contratacado de inmediato.
Alicia: - No, yo no debería haberlos seguido de esa forma. ¿Qué tal lo hice? Nada mal, ¿eh?
Gray: - Parece que empiezas a acostumbrarte a tu trabajo. Tu postura estuvo muy bien.
Gray soltó una carcajada. Tenía la cara muy cerca de la mía, y su encantadora sonrisa abarco toda mi vista. Pude sentir cómo le temblaban las pestañas, y cómo mis labios se separaban. Justo entonces, Gray habló.
Gray: - Ah, eh... Ya te retuve mucho tiempo. No te lastimaste las muñecas, ¿cierto? ¿Te importa si les echo un vistazo?
Alicia: - No es necesario... Seguro que no tengo ni un rasguño.
ESTÁS LEYENDO
Blood Kiss
RomanceAcabo de conseguir un trabajo en... ¿Una mazmorra repleta de vampiros? ¿Qué harías si tuvieras que trabajar junto con vampiros peligrosos y misteriosos que odian los seres humanos? Tu padre y tu hermano te dejaron una inmensa deuda que te tiene con...