¿Aún quieres que no te toque más? PARTE 1

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Suzuka y Moa ocupaban el mismo dormitorio en la universidad para su mala suerte, viéndose únicamente al volver de clases. Ni una ni la otra sabían ni les interesaba lo que ocurría ni se encontraba en la habitación de su ex pareja. Nakamoto únicamente sabía que ahí se escuchaban música y sonidos raros cada ciertas noches.

Esa mañana Suzuka se sentó de sopetón al escuchar un conjunto de ruidos y una voz que hablaba a la distancia, viendo con la vista un poco nublada por el sueño la hora: 6:10 am. Se volvió a acostar y cerró una vez más los ojos; sus clases no empezaban hasta las 8:30am, por lo que podría dormir otros 15 minutos.

-¡¡El desayuno!!- unos pasos presurosos acompañados de un grito la volvieron a despertar y se sentó justo cuando tocaban la puerta -¡¡Arriba Nakamoto!!- y una vez más pasos presurosos.

-Ya voy, ya voy- bostezó y abrió la puerta mientras se pasaba la mano libre por su cabello despeinado, un escalofrío la recorrió al sentir el aire fresco de aquella mañana y volvió a bostezar mientras se sentaba en la mesa de la pequeña cocina/comedor de su dormitorio -¿Por qué me despertaste tan temprano?- se deslizó por el respaldo de la silla mientras estiraba sus huesos para tratar de espabilar.

-Sabes el horario de mis clases Suzuka- Moa le ponía frente a ella una montaña de tostadas, la bandeja de la manteca y un frasco medio vacío de mermelada de durazno -Ya tienes tu café, como te gusta-

-Un cuarto de café, leche bien caliente y tres cucharadas de azúcar- dijo entre susurros, aún adormilada, tomó la taza humeante y le dio un buen trago, sintiendo el líquido ardiente invadir su boca y garganta, definitivamente se había quedado sin papilas gustativas y tenía ampollas -Y por cierto, TUS clases no empiezan hasta las 7:30am, ¿Qué harás durante una hora y veinte? ¿Pasear por ahí, rascarte a dos manos?- agarró una tostada y el cuchillo de la manteca.

-Voy a repasar y corregir algunas tareas idiota- Moa se sentó frente a ella mientras agarraba también una tostada.

-¿Te bañaste y todo eso?- Nakamoto olfateó el aire y sonrió con burla.

-¿Viste tus pelos?- Moa le dio un sorbo a su taza y comió una buena parte de su tostada -Yo por lo menos sí me baño y me arreglo-

-Hey, yo no te insulté- hizo una mueca y siguió con su desayuno en silencio.

-Yo tampoco- ella se encogió de hombros y se metió lo que le quedaba de tostada a la boca.

...

Después de desayunar, Moa se encerró en su habitación y Suzuka pensaba en volver a dormir, pero se quedó mirando su cama.

-Ya que estoy despierta, debería aprovechar ¿No?- suspiró y se pasó las manos por el rostro -Maldita Kikuchi- miró el desorden de su habitación y comenzó a levantar y tirar a la basura envoltorios de dulces, papeles arrugados o rotos; puso a la lavar sus sábanas y ropa, abrió las ventanas para que circule aire y se metió a bañar.

-Ya me voy- se escuchó la voz de Moa y el sonido de la puerta del dormitorio abrirse.

-¿Ya es la hora?- Suzuka se quitó el jabón de los ojos esperando una respuesta pero solo escuchó la puerta cerrarse, suspiró y siguió bajo el chorro de agua tibia -Nunca tienes tiempo para responderme ¿Verdad Moa?-

...

Durante las primeras clases de la mañana Nakamoto apenas y prestó atención, estaba algo triste y frustrada por el comportamiento de su ex.

-Y se supone que terminamos en "buena forma"- abrió su casillero y guardo tres libros para después sacar otros dos más gruesos -De verdad que no la entiendo-

-¿Hiciste algo que la moleste?- Yui Mizuno estaba apoyada en la pared y miraba a su amiga guardar y sacar cosas de su mochila.

-No que yo recuerde- Suzuka se encogió de hombros, cerró su mochila y se puso la correa firme sobre su hombro -Pero con ella algunos días está todo más que perfecto y después vuelve a tratarme así, tengo que andar con pies de plomo para no enojarme y que arda Troya una vez más-

-La separación es reciente Su- Yui suspiró y la tomó del brazo con cariño -¿Cuánto tiempo ya?-

-Cinco meses y dos semanas- Suzuka hacía cuentas con los dedos.

-¿Ves?- se puso a caminar frente a ella y se dio vuelta para mirarla -Aún es reciente, los recuerdos prevalecen, las cosas todavía duelen-

-Que no lo hice a propósito- Suzuka se soltó de su agarré y suspiró al recordar ese día...


Flashback:

-¡¡Déjenme pasar!!- empujó a un par de mujeres que iban con sus compras y siguió corriendo.

Suzuka rogaba llegar al restaurante. Ese día se cumplían 5 años de relación con Moa y llevaba una hora y media de retraso para la cita por andar bebiendo con unos amigos.

Vio las luces del restaurante italiano al que habían acordado ir y se acercó a la recepción con un dolor punzante en el costado.

-Reservación para Moa Kikuchi y Suzuka Nakamoto- dijo entre toses, rogaba porque aún estuviera ahí -Era a las 8:40pm-

-Se acaba de ir- dijo el muchacho -Me dijo que usted pagaría-

-¿Se fue?- a Suzuka se le cayó el alma al piso.

No esperó una respuesta y volvió a correr, esperando encontrarla por la calle.

-¡¡Moa!!- comenzó a llamarla a gritos, mirando alrededor -¡¡Moa!!-

-¿Qué quieres?- se le acercó desde la plaza con la cara más triste que Suzuka le había visto jamás, el rastro de lagrimas era bien visible.

-Perdón, se me pasó la hora, tus mensajes no me habían llegado- comenzó a disculparse mientras la agarraba con desesperación de los brazos.

-No me toques- Moa se soltó de su agarre, nuevas lagrimas comenzaron a bajar por sus mejillas -Y además te apesta la boca a alcohol-

-Enserio perdón mi amor, quería salir antes con mis amigos- Suzuka no se daba cuenta de que lo arruinaba más.

-Así que salir con tus amigos era más importante que celebrar un año más con tu novia- Moa se limpió las lagrimas con coraje y se sacó el anillo de promesa que tenía en el dedo -Ya veo cuales son tus prioridades- se lo tiró a los pies.

-No...- tomó el anillo, que había empezado a rodar hacía la calle -Moa...-

-Adiós Nakamoto...- se limpió las lagrimas una vez más y se fue decidida.

-¿Aunque sea podemos ser amigas?- a Suzuka se la veía desesperada. La gente que pasaba por su lado la veía con lástima.

Moa siguió su camino sin mirar atrás.

Fin Flasback.

Yui soltó un silbido de asombro.

-Así fue- Suzuka se limpiaba las lagrimas con un pañuelo.

-Diablos Su- Yui negó con la cabeza -Sabes que eres mi amiga y te quiero muchísimo, pero ver a Moa llorar por tu culpa ese día me hizo odiarte un poco-

Bajó la cabeza y siguió su camino arrastrando los pies.





AL FIN EL WIFI VUELVE A MI VIDA, continuación pronto perros...

Sexo, alcohol, drogas y Rock & RollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora