Pҽϙυҽɳ̃σ Pαρά | InTheo [P1HARMONY]

☆彡13: eso creo

TaeYang

Sonreí en grande al ver el gran letrero que estaba colgado en la sala de estar de mi casa. InTak iba cargando la maleta de SeolYeon, mientras mamá mantenía a su mano en mi espalda baja, como si tuviera miedo de que me cayera con el bebé en brazos.

⎯ ¡Bienvenidos!⎯  susurró InWoo, una vez que se me acercó para ver a SeolYeon. ⎯ Oh, Dios, e tan preciosa.⎯ la sonrisa de Inwoo no desapareció en ningún moemnto, ni siquiera cuando DoYoung la empujó para ver a su sobrina.

Me habían dado el alta hoy por la mañana y a SeolYeon también, a pesar de haber nacido sido prematura. Según el doctor, ella se encontraba en perfectas condiciones y ante cualquier emergencia, podía ir de inmediato a su consultorio, por lo que no había ningún problema en llevarla a casa.

InTak se había encargado de guardar todas las pertenecías de la bebé y ayudarme con mi cambio de ropa, pues me encontraba un poco adolorido y no podía moverme demasiado. Mi madre también estuvo ahí y no dejó de ayudarme a "caminar" durante todo el trayecto hacia el auto y posteriormente a la casa. Mi padre, en cambio, se quedó en el auto y solo lo pude saludar al ingresar a este.

⎯ Todo esta precioso, muchas gracias ⎯ dije con emoción, mientras sujetaba con firmeza a mi hija y observaba todo lo que mis amigos, padres y suergos habían hecho para la llegada de la bebé.

InTak me ayudò a sentarme en el sofá y al ver la expresión de enojo de su hija ante los movimientos bruscos me pidió permiso para cargarla. Se la entregué con mucha confianza, mientras veía todos los bocadillos que habían comprado. ¡Por fin iba a comer de verdad! Ya estaba cansado de la maldita sopa de algas, sabia que era una tradición tomarla después de dar a luz, que te "entregava energía" pero más que eso, lo único que causó en mi fue asco. Ya ni siquiera quería embarazarme de nuevo, pues lo que menos deseaba era volver a probar ese platillo en mi vida.

⎯ Se ve que tienes hambre ⎯ Dijo Shota, quien aprovechó que InTak se colocó de pue y dejó un espacio libre a mi lado, para sentarse.

Moví mi cabeza, asintiendo, mientras seguía señalándole a mi madre los bocadillos que quería que me alcanzará, pues a pesar de que se encontraba en la mesita central de la sala y que se hallaba hecho muy cercanos.

⎯ ¿Y enserio duele demasiado?⎯  volvió a preguntar Shota, a lo que recibió un zape de parte de JiUng. Al parecer se habían hecho muy cercanos.

⎯ Es obvio que duele mucho, Shota, míralo nomas, apenas y puede inclinarse o caminar.

Miré Mao a JiUng y esta vez fue el turno de Jin de golpearlo, pues estuvo muy fuera de lugar.

⎯ Al menos el tiene excusa, en cambio, tú, JiUng, ni siquiera pones empeño en levantarte para ir al baño.

Todos hicieron una mueca de asco ante la confesión de Jin, mientras que Shota solo reía y JiUng se sonrojaba. Sabía que entre ellos dos había algo más que una amistad, pero no era nadie para meterme en su vida, por lo que simplemente lo dejaría en manos de mi amigo.

InTak no dejaba de mecer a la bebé en brazos, mientras mantenía esa gran sonrisa en el rostro. Se notaba lo mucho que estaba emocionado de ser padre y de cargar a nuestra hija. Mientras tanto, yo aprovechaba el moennto para comer cualquier de bocadillos y ver como nuestros amigos disfrutaban de la pequeña fiesta de bienvenida a SeolYeon.

La fiesta duró hasta la tarde, por lo que nuestros amigos y padres de InTak se quedaron a almorzar. SeolYeon estaba callada desde hace una hora atrás, cuando cambiamos su pañal y tuve que darle de comer. Todavía me dolía el pecho, pero tenía que acostumbrarme.

Nuestros amigos comenzaron a retirarse para las once de la tarde, los primeros fueron JiUng y Shota, quienes sorprendentemente se fueron juntos, luego le siguió InWoo, quien no quería irse, pero tuve que hacerlo, pues no podía faltar otra vez más a su trabajo (la primera vez fue el día del baby shower y la siguiente fue el día de la visita) pensé que Jin también se iría, pero al final decidió quedarse y pasar la noche en nuestra casa, con DoYoung (tal parece que habían arreglado sus diferencias) y por último los señores Hwang, quienes trataron de llevarse a InTak consigo, pero mi novio no quería irse y mucho menos alejarse de nuestra hija.

A pesar de que teníamos una bebé y prácticamente una pequeña familia, InTak y yo habíamos decidido vivir por separado, pues él todavía tenía que terminar la universidad ocupado. Ambos lo habíamos hablado, incluso fue difícil llegar a ese punto, pero sabíamos que era lo mejor para el otro, pues teníamos una bebé recién nacido que iba a ocupar de muchas atenciones y por tanto de mucho dinero (estábamos muy conscientes de eso) por lo que vivir juntos era prácticamente imposible.

⎯ Pero todavía no quiero irme ⎯ susurró InTak, dejando a nuestra hija en la cuna que le había comprado mi padre hace dos meses atrás.

⎯ Eso dijiste hace dos horas atrás y lo acepté porque era temprano, pero ahora sí que no, InTak. No puede seguir faltando a la universidad y mucho menos a tu trabajo, así que ve⎯ traté de ser firme con mi novio, pero a decir verdad yo tampoco quería que se vaya. Los uería esta noche conmigo y todas las que siguieran, no solo porque cambiaba perfectamente los pañales, también porque necesitaba abrazarlo y estar cerca de él.

InTak frunció su ceño, pero al final cedíó y se me acercó, agachandose un poco para dejar un casto beso sobre mis labios.

⎯ Los amo y cualquier cosa, me llamas por teléfono.

Rodeé los ojos y asentí, para luego reír. No pensaba llamarlo a medianoche.

⎯ Ve a tu casa, grandulón⎯ reí y en respuesta él también lo hizo.

Volvimos a besarnos y posteriormente nos abrazamos. Extrañaba tanto el tacto de InTak y no me refiero precisamente al sexo, sino a sus abrazos.

Una vez que nos alejamos, InTak se dirigió hacia la cuna, que estaba ubicada al frente de mí cama, y se agachó para dejar un beso en la frente de nuestra pequeña, esta se removió, pero no sé despertó y lo agradecí internamente, pues a diferencia de InTak, yo todavía no sabía cómo calmar a SeolYeon.

Mi novio se marchó con la promesa de volver al día siguiente y yo solo asentí, pues sabía que ahora más que nunca todos estarían a mi alrededor para ver a la bebé y velar por su salud.

Mamá llegó después de media hora, me sonrió y vio a la bebé dormir. Prácticamente solo se adentró a mi habitación para ver a SeolYeon, ni siquiera preguntó por mí o cómo iba con los dolores.

⎯ ¿No quieres que duerma contigo hoy?⎯ me preguntó, sentándose a mi lado y tomando mi mano libre, pues la otra estaba sujetando el control remoto de la tv.

Negué.

⎯ Estaré bien...⎯  mamá me sonrió y después de dejar un beso en mi frente asintió, avisándome al final que ante cualquier emergencia estaría al lado, para poco después marcharse. Solo ahí solté todo el aire que, hasta ese momento, no sabía que estaba aguantando. ⎯ o eso creo.